♡ Christmas cake ♡ || One-shot HanKisa

《Capítulo único》

Kisaki Tetta estaba en problemas. Y muy grandes.

Su mejor amigo lo veía con el entrecejo fruncido, de forma nada adorable cabe decir.

Podría echarle la culpa a su falta de interés por las cosas románticas o su nula capacidad para captar hasta las más simples o sencillas demostraciones de afecto. Pero lo que había hecho estaba en otro nivel. Se había superado a sí mismo como nunca antes.

— Estás en graves problemas —le recordó su mejor amigo, que solo se reía de su mísera—, tu novio te puede perdonar muchas cosas, sobre todo tu nulo interés en el romance, pero esto no lo hará.

Y Kisaki sabía que el rubio frente a él tenía razón.

Su novio era maravilloso, dedicado y considerado con él en muchos aspectos. Lo que más admiraba de su pareja era su inagotable y admirable paciencia hacia él, como esa vez que el de lentes fue sorprendido por este con todo un día de salidas, mimos, regalos sorpresas y comida deliciosa. Celebraban un año de salientes y para ambos era una ocasión especial, o al menos para uno de ellos.

Tetta sabía la fecha, y porque se conocía bien la tenía anotada en su calendario para no olvidarla. Hasta había hecho recordatorios en el celular, pegado post it en su casillero de la secundaría y del club al cual pertenecía. Su desesperación fue tanta que para no pasarla por alto le dijo a su mejor amigo que hiciera todo lo que él ya había realizado previamente para recordarla.Y a pesar de sus esfuerzos la olvidó. Su nulo interés en el aspecto amoroso tenía la culpa.

Y ahora había fallado de nuevo.

— Confío en que Hanma me ama lo suficiente para saber que no lo hice con mala intención…—se lamentó, tirando a un costado el paquete causante de su actual malestar.

— Oh, en eso tienes razón —concedió—, te ama demasiado, tanto para aceptar y comer con su familia el desecho orgánico y mutante al que llamas pastel de navidad.

Y tal comparación no pudo ser más acertada.

Hanma y él habían acordado pasar navidad en familia. Invitaron a sus respectivas madres a cenar y decidieron cada uno llevar algo para celebrar. Su novio llevaría el vino y la champaña, la madre de éste el pollo asado con ensalada, su madre llevaría pollo KFC a pedido del mayor y Kisaki se encargaría del pastel de navidad.

— ¿Qué tan mal se ve..? —preguntó en un susurro, queriendo ocultar su rostro en la mesa del centro comercial en donde se encontraban almorzando.

— Me estás preguntando si me comería algo que definitivamente no se ve apetitoso, tiene un color antinatural y antiestético, fruta mal cortada y por si fuera poco un olor a bosque quemado —más que una pregunta fue una clara negativa rotunda.

— No tenías que ser tan cruel…

— Entonces te pregunto… ¿Dejarías que tu madre, tu suegra a la que tanto presumes, o si quiera tu novio lo comiera en la víspera de navidad? —cuestionó de manera cortante, sabiendo que no decía nada más que la verdad.

— No sé cómo el ricachón de tu novio te puede aguantar —se quejó, desviando la mirada hacia las diferentes luces y decoraciones que adornaban el edificio. 

— Él es como Hanma, me ama tal y como soy, aunque yo nunca me comprometería a preparar algo que sé muy bien nunca me podría salir.

Tetta volvió a poner su mirada en su rubio amigo, tan sofisticado al vestir como solo él podría ser. Su mejor amigo destacaba entre todos, ya sea por su forma de vestir, por sus facciones tan finas, sus movimientos delicados y calculados, o todo lo anterior junto. Lo admiraba y odiaba por eso.