Bizarre [JaeYong]

c u a r e n t a y u n o

TaeYong se encargó de servir los platos de los pequeños, mientras su novio y el padre de éste, asaban carne sin parar. Todos los niños ignoraron la mesa y las sillas, y corrieron hacia las mantas. El menor de los Jung tomó asiento junto a sus amigos y comenzaron a comer por la insistencia de los mayores. 

Los pequeños fueron los primeros en terminar de comer y entre todos, recogieron el lugar donde habían comido, llevando todo hasta TaeYong para comenzar a jugar a las atrapadas. 

SungChan y los chicos decidieron beber un par de cervezas, pero antes, le preguntaron a TaeYong si podían hacerlo con los niños ahí. El pelinegro asintió sin ningún problema, e incluso, les pidió una.

YunHo no pudo evitar que un par de lágrimas se resbalaran por sus mejillas al ver su jardín lleno, mientras que las risas resonaban en su cabeza. Él, junto a BoAh, siempre habían imaginado un futuro lleno de nietos jugando y brincando por todo el lugar y aunque los niños que se encontraban ahí, no eran sus nietos, no pudo evitar imaginarse a su amada y difunta esposa a su lado sonriendo o incluso, jugando con los pequeños. 

—¿Estás bien? —YoonOh preguntó en un susurró para evitar que alguien más se diera cuenta de lo que pasaba con su padre.

—Recordé a tu madre —esbozó una sonrisa y se puso de pie para entrar a la casa. 

TaeYong notó lo que pasaba, así que discretamente se acercó a su novio y le preguntó si todo estaba bien y YoonOh le dijo lo que su padre le había dicho. El mayor pudo imaginar de qué se trataba, así que discretamente acarició la mano de su novio por debajo de la mesa.

El sol comenzaba a ocultarse y la temperatura ya había bajado, así que volvieron a la casa y se acomodaron en el comedor para cantarle "feliz cumpleaños" a Jeno. Cuando la canción terminó y los aplausos se hicieron presentes, los ojitos de Jeno brillaron con intensidad y sonrió ampliamente. Luego de poca insistencia, se lanzó al enorme pastel y le dio una gran mordida que lo ensució hasta las mejillas.

Esperó a que SungChan tomara una foto de él sonriendo con todo el pastel en la cara y procedió a darle un beso a su papi, quien estaba a su lado. Por suerte, el castaño también capturó ese momento.

—¡Papi! —Jeno llamó a YoonOh y todos lo animaron a ir para recibir un beso en la mejilla lleno de pastel—. ¡Jun! —sin esperar una respuesta de su hermano, embarró algo de pastel en su cara.

—Hyung —SungChan llamó tímidamente a TaeYong—. ¿Podrías acercarte a Jeno y XiaoJun? —levantó su cámara y el pelinegro asintió con un leve sonrojo—. También tú, hyung.

YoonOh se negó tímidamente, ya que no quería irrumpir en su foto familiar, pero los Lee lo miraron con una sonrisa que lo hizo pararse detrás de Jun para que su hermano tomara la foto.

Todos devoraron el pastel y no paraban de comentar lo rico que estaba, tanto, que YukHei y HenDery pidieron para llevarse a casa. SooJung les sirvió un poco en un par de tuppers y los guardó en la nevera para que se mantuvieran fríos.

Cuando la noche cayó completamente, TaeYong decidió que ya era hora de llevar a los pequeños a casa, así que fue a la cocina para llamar a los padres de todos y preguntarles si estaban en casa para llevar a sus hijos.

—¿Amor?

TaeYong pegó un saltito al oír a su novio.

—Alguien podría oírte —susurró mientras el sonrojo cubría sus mejillas.

—¿Y? —rio bajito y se acercó a él para robarle un pequeño beso—. Papá me dijo que podías llevarte su auto para que lleves a los niños.