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-Srta. Navarrete? Puede venir conmigo, por favor?- pide la jefa de Liz.

-Uyy! Alguien está en problemas- bromea Fer.

-Ay no! No digas eso- pide Liz yendo hacia la oficina de su jefa. -Qué hice?- se le escapa preguntar.

La mujer de mayor edad sonríe -Mmh haha. Nada srta. Navarrete. De hecho usted es una de las mejores empleadas que tenemos y venimos a darle dos noticias. La primera es que gracias a su gran desempeño que ha demostrado estos meses, la empresa está dispuesta a pagarle el resto de sus estudios.

Al escuchar aquello, Liz se le quita un peso menos de encima -Dios! No sabe lo agradecida que estoy! No me lo puedo creer!- se le escapa una lágrima de alegría.

-Se lo merece- deja que Lizbeth se relaje para poder dar pie a la otra noticia -La otra cosa es, que le ofrecieron un puesto para trabajar en Londres. Me dijeron que te querían a ti solamente pues hay una vacante disponible. Sería únicamente por 3 meses.

-Oh...- la otra noticia no le vino bien como esperaba. De nuevo se tendría que ir y dejar a Ferran. Tenía que hablarlo con su novio primero. -Cuanto tiempo tengo para confirmarle mi respuesta?

-Este fin de semana. Necesitaré una respuesta a más tardar el lunes por la mañana- con eso finaliza y Liz se dirige de nuevo a su escritorio.

-Y...?- pregunta Fer y su amiga le cuenta todo -Oh... sabes? Haz lo que a ti te convenga. También no duele ser un poco egoísta de vez en cuando.

-Es que ese es el problema, Ferchu. Ya lo fui una vez cuando visité a mi hermana- recuerda -No quiero dejar a Ferran de nuevo.

-Ok, pregúntate esto, sin pensar en terceras personas: quieres ir?

Por supuesto que Lizbeth quería ir. Sería una oportunidad ideal para expander sus conocimientos.

-Si, quiero ir.

-Entonces sabes lo que tienes que hacer- incita Fer y después de su jornada laboral se dirige a casa donde sólo se encontraba su novio.

-Y las chicas?- pregunta la mexicana.

-Tina salió con Fernanda creo. Y Mar dijo que quería recorrer Manchester. Me mencionó que ya casi terminaba- indica Ferran.

-Gracias- se acomoda a un lado del español para comunicarle acerca de su trabajo. Deja que pase un rato y así hablar -Me ofrecieron una vacante en Londres- confiesa y nota a su novio tensarse.

-De verdad?- es lo único que dice.

-Así es- agacha la mirada -Y estaba pensando en que no debería...

-Tienes que ir- la interrumpe dejando a su novia sorprendida.

-No quiero volver a dejarte, y menos como están las cosas, Ferrancito- acepta Liz más por obligación que por gusto -Quiero estar contigo.

-No quiero ser la razón por la que te limites- el jugador del City toma las manos de su amada -Debes ir. Yo estaré bien- le sonríe al mismo tiempo que besa su mejilla.

El hecho de que Ferran ha estado siendo accesible, abre la posibilidad de que Lizbeth se sincere con él -Y si nos damos un tiempo?- temía ante la reacción de Ferran.

-Si es lo que quieres, yo no me opondré. También siento que puede ser lo mejor para nuestro noviazgo- Ferran se levanta levemente desesperado -Estuve a punto de perderte una vez. No dejaré que eso pase de nuevo- confiesa.

La mente de Lizbeth la lleva hasta Martin Ødegaard con quien últimamente se ha llevado mucho mejor de lo esperado y se puede decir que tenía ganas de verlo.

-Quiero ser el novio que una chica como tú merece. Y si quieres que nos demos un momento pues yo coincidiré contigo- propone Ferran.

-Gracias por comprender, Ferran- se atreve a abrazarlo cariñosamente. Él le corresponde incorporando sus manos en la cintura de Liz jalándola más hacia él, seguido de un beso en la parte superior de su cabeza.

-Nunca olvides que eres mi todo, Lizzy- dice Ferran sincero.

El resto de la noche fue una lluvia de pensamientos en la cabeza de Lizbeth. Cómo había llegado hasta aquí? Por qué de repente su relación con Ferran estaba a punto de colapsar?

Todo por Ødegaard. Replica su propia mente.

Ella frunce el ceño pues odiaba la idea de que el noruego tuviera que ver. Por supuesto que no. En qué momento esto se volvió cosa de tres? Desde que llegó a Manchester era exclusivamente Ferran y ella.

Lizbeth fue quien quería pasar más tiempo con su novio. Ambos hacían lo posible para que esto siguiera su curso después de lo sucedido con el jugador del Arsenal.

Estás en esta situación por él. Insistía su mente.

Siguió ignorando lo que su conciencia repetía e intentó volver a dormir.

𝐈'𝐌 𝐍𝐎𝐓 𝐋𝐈𝐊𝐄 𝐓𝐇𝐄 𝐑𝐄𝐒𝐓 :: 𝗙𝗘𝗥𝗥𝗔𝗡 𝗧𝗢𝗥𝗥𝗘𝗦Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu