"Eres tan linda" {Manjiro Sano/ Mikey x reader}

CAP. 31

- mira por don-   -esa persona iba a protestar sobre nuestro choque pero se interrumpió a si mismo tras reconocerme.- ¿Yumeko?

Aquella voz, ¿cómo no reconocer esa voz que me ha hecho sentir tantas cosas?. Seguía en el suelo, con las lágrimas corriendo por mis mejillas, pero no podía mostrarme así, me seque las lágrimas lo más rápido que pude y me levante del suelo.

- lo siento po-   -me quise disculpar pero me interrumpieron con un tono de voz grosero, frío y cortante.

- ¿has tenido que tropezar con nosotros para llamar nuestra atención? -habló ese.

- si me disculpa me iré... -hice un intento de irme pero me interrumpieron.

- supongo que ya que no nos tienes a nosotros para ocultar cosas, se las vas a ocultar a Kazutora, ¿no es así? -me interrumpió, otra vez.

Miré a aquellos ojos negros vacíos.

- Mikey... ¿podrías callarte?

- ¿ah? Deberías de ca-  -lo interrumpí.

- que te calles... ¿no que no me querías ver ni hablar en tu vida? Pues cállate

- pero que te crees hablando de es-  -lo interrumpí.

- cállate

- pero que te pa- 

- cállate

Antes de pudiera protestar con aquel enfado que pareció recorrerle todo el cuerpo pasé por su lado mirándole de reojo y con superioridad.

Aquellas lágrimas y tristeza quedaron en el olvido.

Una idea más que buena cruzó mi mente.

Y si...

Agarré la chaqueta de los Black Dragons que me dió aquel chico pelinegro, ojos negros, piel pálida, alto, con mala suerte en las chicas y fundador de los Black Dragons. Sí, hablo de Shinichiro.

Arranqué la moto que anteriormente perteneció a Carlos y abandoné mi casa rumbo a aquella guarida.
Hace poco tiempo me enteré de que los Black Dragons habían aparecido de nuevo y que ahora estaba al mando de un Taiju Shiba, creo que era. Tampoco me importaba, eran mis últimos días, ¿crees que por un estúpido nombre y apellido me voy a arruinar la vida? Nah, ya la tengo arruinada, ni modo.

Estacione la moto y pasé andando por aquellas calles que según un tipo en el parque decía que era territorio de los Black Dragons. Sí, estoy buscando a una pandilla que dijo un chico desconocido en el parque.

Anduve por aquellas calles, pero no había rastro de pandillas.

- ¡eh! ¿Qué haces con un traje de los Black Dragons? -dijo la voz de un chico mientras se acercaba a mi.

Por la voz supuse que era un chico, pero el sonido de unos tacones me dejaron confundida.

Me giré a verlo. No era uno, eran dos

Ellos llevaban una chaqueta blanca larga con una cinta roja en su brazo.

- ¿quiénes sois? -pregunté.

- ¿quién eres tú y por qué llevas un traje de los Black Dragons de generaciones pasadas? -preguntó uno que tenía un lateral rapado en forma de tiras en un lado de la sien mientras el otro lado lo tenía suelto y ondulado.