-No muy bien-.

Me dirijo a la tetera. 

Necesito té.

-¿Cómo estuvo la cena?-.

Así comienza.

-Teníamos ostras. 

Seguidas de bacalao, así que diría que estaba a pescado-.

-Ugh... 
Odio las ostras, y no quiero saber sobre la comida. 
¿Cómo estuvo Lauren?
¿De qué hablaste?-.

-Estaba atenta- ,hago una pausa.

¿Que puedo decir?

A si,su estado serológico es claro, le gusta mucho el juego de roles, quiere que obedezca todas sus órdenes, lastimó a alguien a quien ató al techo de su habitación y quería follarme en el comedor privado,ya sabes cosas del oficio.

¿Sería ese un buen resumen?

Intento desesperadamente recordar algo de mi encuentro con Lauren que pueda discutir con Dinah.

-No aprueba a Wanda-.

-¿Quién lo hace, Mila? 

Eso es una vieja noticia. 

-¿Por qué estás siendo tan tímida?
Déjalo, salir...-.

-Oh, Dinah, hablamos de muchas cosas. 
Ya sabes, lo quisquillosa que es con la comida. 
Por cierto, le gustó tu vestido-.

La tetera ha hervido, así que me preparo un poco de té. 

-.¿Quieres té? 
¿Quieres que escuche tu discurso de hoy?-.

-Sí, por favor. 
Trabajé en eso anoche en Lilah's. Iré a buscarlo. 
Y sí, me encantaría un poco de té-.

Dinah sale corriendo de la cocina.

Uf, Dinah Jane se desvió. 

Corto un bagel y lo meto en la tostadora. 

Me sonrojo al recordar mi sueño muy vívido. 

¿De qué diablos fue eso?

Anoche me costó dormir. 

Mi cabeza estaba zumbando con varias opciones. 

Estoy muy confundida. 

La idea de Lauren de una relación se parece más a una oferta de trabajo. 

Ha establecido horarios, una descripción del trabajo y un procedimiento de quejas bastante severo.

No es como imaginé mi primer romance, pero, por supuesto, Lauren no hace romance. 

Si le digo que quiero más, puede que diga que no... 

Y podría poner en peligro lo que me ha ofrecido. 

Y esto es lo que más me preocupa, porque no quiero perderla. 

Pero no estoy segura de tener el estómago para ser sumisa; en el fondo, son los bastones y los látigos los que me desaniman. 

Soy una cobarde física y recorreré un largo camino para evitar el dolor. 

Pienso en mi sueño... 

Es que cómo sería "Mi diosa" interior salta arriba y abajo con pompones de animadoras gritándome que sí.

Dinah vuelve a la cocina con su computadora portátil. 

Me concentro en mi bagel y escucho con paciencia mientras repasa su discurso de despedida.

50 sombras de Jauregui (PAUSADA).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora