— ¿Que le sucedió a Kane?—pregunto.

—Fue interceptado junto a todo su equipo por un escuadro enemigo. Muchos murieron pero no han encontrado el cuerpo de Kane—

Puedo decir que varias emociones me abrumaron: tristeza, por perder a alguien que significaba tanto para mí, ira porque ni siquiera pude tener una buena despedida con Kane y culpa porque sé que él se fue para evitar lastimarme. Siento como si me atravesaran cien puñales a la vez, mi amor secreto y prohibido ha tenido consecuencias y me ha costado tanto.

Pero no puedo permitir que me siga dañando tengo que alejarme de lo que me lastima, lo que me daña.

— ¿Corazón estas bien?—pregunta tony con evidente preocupación.

—Me iré—es todo lo que digo secándome las lágrimas.

— ¿¡Que!? no tienes que hacer eso ahora es el momento en el que debemos estar juntos—casi rio sarcásticamente. Miro a uno de los hombres que ocupa gran parte de mi corazón, pero no con anhelo como usualmente suelo hacer sino con odio.

Es cierto eso que dicen que del amor al odio hay un solo paso.

— ¿Desde cuándo sabes que Kane está desaparecido?—me limito contestarle.

Pero solo hay silencio y hay tengo mi respuesta. Empiezo armar las piezas y ahora entiendo porque cuando estaba con mis abuelos no me contestaba el teléfono.

—De seguro que lo sabias antes de que llegara de mi viaje—Tony solo agacha la cabeza, una señal de que esta avergonzado— Por eso ni siquiera me contestabas las llamadas—

—Corazón, no es como piensas. Lo hice para protegerte—se escusa con su voz temblorosa.

—Un mes Tony, tuviste más de un mes para decirme—le doy una mirada fulminante—No quiero verte, lo mejor es que me vaya con mi abuelo—me voy a mi habitación pero no sin que Tony me siga por lo que cuando llego a mi habitación cierro la puerta para no dejarlo pasar.

—Olivia te quiero, no sabes cuánto y lo único que no quería era ver ese dolor en tu mirada—dice atreves de la puerta.

—Si me quisieras como dices me hubieras dicho la verdad a pesar de que doliera—le contesto molesta.

Comienzo a empacar mis cosas. Sé que Tony tiene muchas influencias y no me dejara ir sin dar pela por lo que decido irme a casa de mi abuelo materno. Empaco una pequeña maleta y cuando no escucho ningún ruido de afuera decido bajar con mis cosas. Pero solo encuentro a Tony recostado en la puerta de mi habitación y cuando me ve con mi maleta comienza a palidecer.

—No te puedes ir—dice pero no le hago caso caminando hasta las escarelas y comenzando a bajarlas.

—Puedo hacer lo que quiera soy mayor de edad y no quiero seguir viviendo con dos mentirosos—digo sin voltearme para mirarlo, no quiero hacerlo más difícil para mí.

—Sé que hice mal corazón pero tenemos que hablar no te puedes ir como así—ruedo los ojos.

Cuando llego a la puerta principal me detengo para verlo.

—Necesito un tiempo, estar alejada será lo mejor para mí—a pesar de que mi corazón se rompa.

—Está bien—dice finalmente Tony—Pero no creas que no te voy a buscar. Siempre lo hare y te encontrare—

—No lo dudo—es todo lo que digo antes de cerrar la puerta e irme de la casa donde me criaron mis padres y donde viví los mejores y peores momentos de mi vida.

Tony

Trato de tranquilarme para no buscar mi coche y salir a buscar a Olivia. Me preocupa mucho que se quede con su abuelo, no es conocido por ser una persona muy amable sé que no le hará daño a Olivia pero eso no me tranquiliza.

Sé que lo que hice estuvo muy mal, no tengo justificación arruine a nuestra familia. Herí los sentimientos de Olivia lo que es irónico porque pensé que al ocultarle la verdad la estaba salvando de un gran dolor. Pero me equivoque y me merezco que este enojada conmigo y no me quiera ver.

Su un estúpido y un gran cobarde porque todos estos años he callado para que la familia se mantenga intacta. He ignorado mis verdaderos sentimientos, ocultándolos de todos solo para no causar dolor. Pero no ha servido de nada las circunstancias mismas nos ha causado dolor. El destino se empeña en destrozarnos, primero mis padres, luego Kane. Mi familia no es la misma de antes pero tengo que recomponerme y reunir los pedazos que queda de ella.

Decidido esperar a que llegue Shane, me siento en el sofá que casualmente tiene una vista directa de la puerta principal y lo espero. Si quiero que mi familia vuelva hacer lo que era antes tengo que ayudar a mi hermano a lidiar con su dolor. No puedo dejar que siga arruinando su vida dedicándose al alcohol, va por un camino de destrucción y hasta ahora no le he dado la importancia que amerita.

Pienso en mis padres y se lo decepcionados que estaría si nos vieran ahora, sobretodo siento que me odiarían si supieran que no pude hacer lo que por años ellos hicieron que es mantener a nuestra familia unida. Sobre todo sé que me despreciarían aún más si se enteraran de mis sentimientos hacia Olivia, si supieran que la veo más como una mujer que como una hermana.

Me detesto a mí mismo por no poder ser más fuerte. Soy el pilar de la familia debería de ser fuerte como mi padre y sin embargo me dejo dominar por mis debilidades haciendo que arruinen todo lo que he construido.

Sé que me hago daño a mí mismo, últimamente mi vida ha sido mi trabajo. Día y noche sin parar, despertar a las cuatro de la mañana y dormir a las doce de la noche, saltar comidas y hacer más de lo que debería. Sé que muy pronto todo me cobrara factura, vivo estresado la mayor parte del tiempo y como si fuera poco hace unas semanas compre un hotel y me encargado solo de dirigirlo, haciendo que mi exceso de trabajo solo aumente.

Cuando Shane llega sorprendentemente caminando sin tropezarse lo invito a que se siente. Por lo visto no está muy borracho porque en vez de mandarme a la mierda he irse a su habitación se sienta.

Aprovecho el pequeño momento de lucidez de mi hermano, sabiendo que si no hablo ahora la próxima vez que lo haga Shane, estará demasiado borracho para prestarme algo de atención.

—Olivia se fue—digo haciendo que frunza el ceño—Se enteró lo de Kane—

— ¿Cómo fuiste tan idiota como para dejar que se fuera? —dice molesto y casi quiero reír porque la persona que necesitaba que estuviera conmigo para apoyarme no estaba. Tal vez si hubiéramos estado los dos nada de esto estaría pasando, pero ninguno de nosotros es bueno para lidiar con el dolor.

—Comprendí que Olivia necesita tiempo para procesar lo de Kane—es lo que digo.

— ¿Dónde se fue?—pregunta irritado.

—Donde su abuelo—cuando termino de decir lo último Shane se levanta enojado.

—No debiste dejar que se fuera con ese diablo—ruedo los ojos por lo que dice. Puede que el abuelo de Olivia no sea santo de mi devoción, porque hizo lo que estuvo a su alcance para separar a mis padres desde el comienzo de su matrimonio hasta que se dio cuenta de que su amor era tan fuerte que nadie ni nada podía separarlos. Pero sé que el viejo nunca le haría daño a Olivia, pero sé que tratara de convencerla para que se quede con él. Solo espero que antes pueda perdonarnos.

—Olivia estará bien pero si queremos que regresen las cosas tienen que cambiar—Shane solo hace una mueca, sabe lo que viene—Tienes que dejar de beber—me levanto para poder quedar al mismo nivel que mi hermano y lo miro no con severidad sino comprendiendo porque ha tomado últimamente decisiones tan estúpidas, que sé que en otro tiempo nunca lo hubiera hecho—te ayudare en todo, hermano no estás solo entiendo porque estas actuando de esa manera yo también siento la perdida de Kane—

—Me siento culpable por no haber trato de evitar que se fuera—confiesa.

—Yo también me siento culpable. Pero Kane siempre fue muy terco esa fue su decisión y no podemos hacer nada para cambiarla—viendo las lágrimas que caen en los ojos de mi hermano decido abrazarlo—Si llevamos el dolor por separado se nos hará mas difícil. Si lo hacemos justos podremos superarlo—dijo para darle aliento.

Es hora de hacer un cambio.

Y juntos sé que podremos lograrlo.

No hay mayor fuerza que la de dos hermanos. 

Los Amores de OliviaWhere stories live. Discover now