La Flor Malfoy

CAPÍTULO 9

-¿Estás segura de esto?- además de mi y Granger, Neville era el único que sabía realmente las exigencias del hechizo- Tal vez deberían practicar un poco más

-Estaré bien Neville- le sonreí mientras íbamos camino a la Sala De Menesteres, mientras la castaña y yo nos enfrascamos en perfeccionar el dichoso hechizo, Harry, Ronald y él estuvieron resolviendo donde se realizarán las clases, encontrado ese con el lugar- Además el tiempo sigue avanzando, que yo fuera la mejor opción, fue por eso

-Pudimos secuestrar a Malfoy- sugirió en broma mientras llegábamos al séptimo piso- Su familia también es vieja y es tu primo

-¿Neville Longbottom confiando en Malfoy?- jugar con sus rivalidades era uno de los puntos que me mantenían fuera de las sospechas, además de que mi hermano tenía historial yo solo lo usaba a mi favor- Creo que tanto plan te está afectado

-Nunca confiaría en un Malfoy- soltó de pronto, por alguna razón me hirió, pero dentro de mí sabía que estaba en lo correcto, yo era un Malfoy y mi única razón para hablarle era estar cerca de Harry para traicionarlos - Pero creo que prefería arriesgarme a eso a arriesgarte ... porque eres mi amiga- pude notar como sus mejillas tomaron un ligero tinte rojizo pero justo la puerta apareció frente a nosotros por lo que decidí frenar nuestra conversación, hablar con él solo lograba que quisiera tirar todo para pelear a su lado, algo que no me podía permitir debía recordar que un error mio llevaría no solo a la caía de mi familia, si no a su exterminio.

-Finalmente llegas

-Hola Granger un gusto verte- salude prestando atención a la enorme sala, tenía varios maniquies para practicar hechizos, una zona con estanterías que por los títulos deduje que era para defensa, algunos sillones similares a los de mi sala común, la castaña estaba frente a una mesa con unos 50 galeones extendidos, quise torcer el gesto, cuando hicimos la prueba que salió exitosa, solo fueron dos galeones y termine exhausta, no quería ni imaginar como me dejaría esta ocasión- Parece que debemos esperar a Harry y Ronald

-Sigo sin entender porque necesitas a más personas aquí- note como Granger estaba nerviosa, como quien está a punto de cumplir un reto absurdo -Hasta el momento estabas bien conmigo Black

-No podemos repartir todo solo nosotras- respondí tomando asiento en un sofá cercano -Sería sospechoso, hay que estar fuera del radar del merengue rosa

-Lamento la tardanza

-Esta bien- Neville fue quien los recibió cuando por fin los dos Gryffindors llegaron- ¿Qué los detuvo?

-Malfoy- soltó con hartazgo el morocho mientras el pelirrojo tomaba asiento a mi lado divertido de su amigo- Nos intercepto en el quinto piso, anda insufrible desde que se unió a la Brigada Inquisitorial - se limpio un poco la garganta para tratar de imitar el tono de voz, un poco más agudo de mi hermano- "Deberías portarte bien Potter, o tendré que castigarte"- tuve que bajar la cabeza para que no notara que me reía de su imitación- Ese tonto hurón mimado...

-¿Siempre se han llevado así con Malfoy?- pregunté en susurros a Ronald quien no disimulaba la risa ante el monologo del morocho

- Si creo - explicó el pelirrojo, pero note que Granger lanzaba una mirada molesta a la situación, esa chica se tomaba las cosas demasiado en serio todo el tiempo- Desde el primer viaje en tren, aunque ya sabes mi familia ya tenía conflictos desde antes

-Soy francesa Ronald, no tengo idea de que me hablas

-Bueno basta de charlas- cortó la voz de la castaña tanto nuestra conversación como el monólogo de Harry sobre lo odioso que era mi hermano- Tenemos cosas que hacer, Black