Mimosa - Nadie sabe que te quiero

C083 - ¡Una persona con gran poder!

―Pfft, saltemos las plantillas. ―Yan Qiu frunció el ceño con leve desdén. Extendió la mano para tomar la bolsa mientras arrojaba las plantillas a los brazos de Xie Yu. ―Solo estoy tejiendo una bufanda, no debería ser demasiado problemático.

Yan Qiu enrolló la bolsa y la escondió bien en su chaqueta. Le echó una mirada casual cuando de repente se dio cuenta de que la bolsa de Xie Yu tenía impreso el nombre de una tienda: Artículos de Maternidad e Infancia Genius. Preguntó: ―¿De dónde has sacado esa bolsa? 

―Mi tía acaba de dar a luz a una niña. ―Xie Yu se rascó la cabeza y dijo: ―¿Qué pasa? ¿Te interesan los artículos de maternidad y cuidado de bebés? 

Justo después de que terminara de hablar, ambos se quedaron en silencio. Recordaron el incidente del falso embarazo.

Al recordarlo, Xie Yu se enfadó más que el propio Yan Qiu. Resopló: ―¡Maldita sea, Ji Xinglan te estafó para que te casaras! Voy a... 

―Olvídalo. Ya lo he castigado. ―Yan Qiu sostuvo al agitado Xie Yu y lo consoló.

―¿Cómo lo has castigado? 

Xie Yu miró fijamente a Yan Qiu con entusiasmo.

Ji Xinglan era realmente descarado. El propio Xie Yu no podía golpearlo, así que quería escuchar la historia de Yan Qiu para desahogar sus propias frustraciones.

―Yo... lo castigué a... ―, tartamudeó un poco Yan Qiu, ―d-dormir en el suelo durante un mes.

―¡¿Qué?! ―Xie Yu ensanchó los ojos, como si acabara de escuchar algo aún más increíble que Yan Qiu tejiendo él mismo una bufanda. Se sintió angustiado, porque sabía que su jefe debía sentirse tentado por el aspecto de Ji Xinglan. ―¡¿Cómo es posible que sólo le deje dormir en el suelo durante un mes?! Deberías haberle metido un cactus en los pantalones y hacerle hacer dos mil flexiones! 

―Um. ―Yan Qiu miró al agitado Xie Yu. Para explicar que no era una persona que había dejado que la lujuria le nublara el juicio, se armó de valor y dijo: ―¡E-Eso no es todo, por supuesto! Incluso hice que me dejara follar una vez.

...Sólo que no lo logré.

Pero cuando Xie Yu lo escuchó, ¡sus ojos se iluminaron de inmediato!

―¡¿Qué?! ¡¿Cómo lo has hecho?! ¡Vamos, cuéntame! ―Xie Yu estaba tan emocionado que se frotó las manos y quiso escuchar la historia.

Como se esperaba de su jefe. ¡Es una persona con gran poder!

¡Un omega realmente ha XXX a un alfa! ¡Es realmente el luchador entre los omegas! ¡Jaja! Ji Xinglan, ¡pensar que llegaría un día en el que acabarías así! ¡Es tu culpa por ser siempre tan arrogante! ¡Jajaja!

―Um, bueno. ―Yan Qiu se sintió tímido. Miró a todas partes menos a Xie Yu. ―Simplemente lo hice así.

Aunque no consiguió los detalles, Xie Yu utilizó su imaginación para visualizar lo que había sucedido. Era como si hubiera conseguido vengarse, y eso le hacía estar realmente excitado.

¡No había nada más embarazoso que un alfa siendo XXX por su propio omega! ¡Debe haber dolido! ¡Debes desesperarte! ¡Tiembla, estafador!

―Entonces, ¿lloró? ―Xie Yu preguntó con entusiasmo.  

Como ya había comenzado a jactarse, Yan Qiu solo podía continuar. Preocupado por decepcionar a Xie Yu, dijo: ―Por supuesto que lo hizo. Lloró mucho y siguió rogándome que le mostrara misericordia.

Xie Yu estaba realmente emocionado. Parecía tan eufórico que parecía estar volando libremente por el cielo.

Mientras tanto, Yan Qiu miró hacia abajo con culpabilidad.