CAPITULO 13

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Nahoya había despertado después de unas horas de aver estado dormido, pero despertó con un gran dolor de cadera, aunque agradecía mucho de que su celo no hubiera durado más días, aunque rápidamente se levantó preocupado, al saber que su hermano también estaba en celo y el tonto de su cuñado fue a verlo, pero todo fue interrumpido al sentir un gran dolor y después caerse, esto espanto a Ran el cual rápidamente se levantó asustado y más al ver a Nahoya

-Una semana sin sexo- sentenció Nahoya y Ran solamente asintió mientras lo ayudaba a levantarse del suelo, sinceramente que Nahoya le dijera eso le daba risa, ya que ese alfa siempre cada que andaban de melosos este empezaba a provocarlo, así que esté sería un gran reto aver quien aguantaba más, aunque Ran sabía que sería pan comido para el, pero para Nahoya sería más difícil

Al ya tenerlo levantado, se agachó y paso sus manos por el cuerpo desnudo de Nahoya para cargarlo y llevarlo al baño

-Me vas a duchar- Ran  le sonrió, mientras asentía ante eso, para entrar al baño junto a Nahoya y así empezar a darse un cálido baño, entre besos
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Mientras que Rindou estaba en la sala después de recoger toda la ropa que tiro Souya para después, intentar  cambiarse su vendaje, el muy tonto se había olvidado de que estaba lastimado y había sido muy brusco en la hora de que estaba teniendo sexo con Souya, y sus heridas se veían un poco mal, aunque no era muy bueno como Souya a la hora de cambiar vendajes, aunque no quería despertarlo, el chico estaba durmiendo, hace una par de horas que habían terminado de bañarse después de tener aquella ronda de sexo

Aunque cada cosa que hicieron, volvía a inundar su mente, y su cara se pintaba de rojo, era algo muy vergonzoso y erótico el que su mente le recordara con lujo y detalle,todo lo que le había echo a ese alfa  de cabellos azules, lo volvía loco

Se dio unas leves  cachetadas, para seguir con lo suyo, necesitaba acabar de cambiar los vendajes, para ir a descansar, se sentía muy cansado y ya era de madrugada, el estar casi todo el día de compras y después el estar ayudando al alfa con su celo, era muy agotador y más sus heridas

Aún no sabía ni como es que se encontraba aún despierto, si fuera otra persona está ya estaría en cama y no sé levantaría en todo un día

-Deberia dejar de meterme en peleas- ya había acabado, y ahora solo se estaba poniendo una de las prendas que había comprado, al estar ya cambiado, fue directo a la cocina de los hermanos Kawata, para sacar leche y tomarse un gran vaso de leche fría, para ahora sí irse a dormir

Llegó a la habitación de Souya y se metió a la cama, cobijandose, para seguido cerrar sus ojos y dormirse
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Nahoya ya había vuelto a despertar nuevamente, y está vez se sentía mejor, su dolor de cadera ya había disminuido y había notado que ya era muy tarde, debía ir en busca de su hermano y saber si estaba bien, así que sin más se levantó de un brincó de la cama, para buscar sus zapatos, su lado sobreprotector le pedía a gritos que fuera aver a su hermano

Ran el estaba en un lindo sueño, donde se bañaba con muchos billetes, todo era tan feliz, hasta que empezó a escuchar ruido, quien era la persona que interrumpía su bello sueño, abrió uno de sus ojos y vio como Nahoya ya se estaba poniendo los zapatos, así que rápidamente se sentó en la cama

-Que estás haciendo- su tono de voz  salió algo ronco, acababa de levantarse, Nahoya volteo a verlo y por un momento había olvidado que estaba en casa de su pareja

-Siento a verte despertado, iba a casa aver como estaba Sou- se le acercó y le dio un besito, Ran se levantó también de la cama

-Te acompaño, debo ir por el tonto de Rindou- ambos se miraron fijamente y abrieron grandemente sus ojos, al tener en cuenta de que sus hermanos estaban juntos, solo esperaban no verlos desnudos o en medio acto sexual, el solo pensar eso, hacía que sus pelos se pusieran de puntos

-Tu crees que ellos se acostaron- Nahoya no quería que su tono de voz saliera algo nervioso,pero no lo había logrado, sabía que Rindou no era un mal chico pero le aterraba la idea de  que su hermano ya no fuera virgen

-No lo sé, tal vez sea asi- a Ran le preocupaba saber si su hermano seguiría vivo, así ambos tomaron sus cosas y se pusieron sus zapatos para ir rumbo a casa del alfa de cabellos anaranjados

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La pareja había llegado a casa de Nahoya, el cual ya había  bajado del coche y estaba cuidadosamente abriendo la puerta, se encontraba temblando, no es que tuviera miedo, si no que se sentía nervioso demasiado, gracias a la ayuda de Ran pudo abrir bien la puerta

-Aver deja que te ayude- Nahoya gustoso acepto la ayuda, para entrar a su casa y primero checar si no había algo raro, al comprobar que no había nada raro empezó a caminar a la habitación de su hermano, Ran venía detrás de él

-Esto es demasiado- fue lo que dijo al tocar la perilla de la puerta, y abrirla lentamente, un golpe de feromonas llegó a las narices de ambos, que rápidamente taparon su nariz y Nahoya, rápidamente cerro la puerta, para mirar a Ran,con sus ojos conteniendo las lágrimas, las cuales amenazaban por salir

-Se acostaron, nuestros hermanos se acostaron- Ran solo estiró sus brazos para consolarlo, aveces olvidaba lo sentimental que se ponía Nahoya, cada que su celo terminaba

Ran solo se dedico a consolar a su pareja, la cuál lloraba desconsoladamente, como había dicho Nahoya podía estar muy sentimental, pero sus cambios de sentimientos variaban demasiado, ya que de aver llorado por un buen rato, se separó de Ran para voltearlo a ver con ojitos de cachorrito, apenas sus ojos rojos e hinchados quedaban

-Hazme el desayuno porfavor- Ran no sabía que poder mágico tenía Nahoya sobre el, pero claro que accedió, necesitaba ver a su pareja feliz 

Asi ambos empezaron a hacer el desayuno, mientras que el otro par de alfas, se encontraban plácidamente dormidos mientras se abrazaban, pero el olor de comida llegó hasta sus fosas nasales, que el primero en reaccionar fue Souya, el cual se movió algo incómodo en la cama, notando un fuerte dolor en su parte de abajo, mientras que Rindou escucho como algo se removia entre sus brazos, así que con cuidado abrió sus ojos al igual que Souya, y ambos se quedaron viendo fijamente, mientras sus caras se ponían rojas

-Buenos días lindo- le sonrió Rindou aún con sus mejillas rojas, Souya volvió a sonreírle

-Tengo hambre- Rindou le dio un besito en su mejillas, para levantarse de la cama y ayudar a Souya, para que ambos fueran a la cocina, ya que de ahí provenía el olor delicioso

Así ambos salieron de la habitación, Souya caminaba un poco mal por el dolor, pero ambos se sorprendieron al ver a sus hermanos haciendo un rico desayuno

-Buenos días dormilones- ahí estaba Nahoya y su sonrisa asesina, que puso nervioso a ambos chicos menores, pero más a Rindou

-Buenos días Nahoya- Souya si o si necesitaba hacer algo con el ambiente que se tornaba un poco incómodo, ambos alfas se sentaron en la mesa, mientras que los otros les servían de comer

Algo muy extraño pero pasaron una agradable mañana, nadie dijo nada sobre el celo de ambos gemelos, pero sabían muy bien que estando solos las preguntas comenzarían

He vuelto, espero les guste, nos vemos

COMO PASO ESTOWhere stories live. Discover now