Pansy lo había hecho quitarse el vestido para retocar algunas cosas. No pudo evitar mirarse él mismo en el espejo y sentir que su corazón de aceleraba. Pronto, esa pequeña pancita que tenía se convertiría en un vientre abultado lleno de cachorros, y sus muslos dejarían de ser bonitos y relucientes, se convertirían en piel rota y gastada por los embarazos.

Mirándose más detenidamente en el espejo de cuerpo completo podía entender a su madre y sus comentarios sobre lo joven que era. Pómulos afilados, cutis estrecho y delgado, ojos grises sin ojeras o arrugas, nariz de botón, curvas prominentes y caderas acentuadas; su piel era suave, delicada y levemente bronceada, jugosa y tierna. 

El cuerpo de un omega muy joven con su fertilidad a flor de piel. 

Entonces Pansy lo llamó y volvieron a colocarle el vestido. A Draco no le importaba porque ya había llevado un vestido de omega antes.

"¿Debo hacer algo durante la celebración?" Le preguntó Draco a Blaise. El alfa lo miró y sonrió suave, aunque por dentro se asombrara por la firmeza y serenidad del omega.

Blaise negó. "Oh no, omega. No debes hacer nada, Harry es quien debe hablar y dar el discurso."

Asintió lentamente, observando a gente trabajar de allí para allá mientras el sol se ocultaba en la montaña de lo lejos. "¿Dónde está Harry?"

"No lo sé. El líder alfa se encarga de sus propios asuntos, no tiene por qué avisar a la manada."

"Lleva fuera desde por la mañana." Murmuró, más para sí mismo que para Blaise. Se quedaron en silencio, con el bullicio de las personas de fondo. "¿Puedo preguntarte algo, Blaise?"

El alfa inclinó su cabeza. "Por supuesto, omega. Eres el futuro omega líder de esta manada, estoy a tus servicios como guardaespaldas."

Draco mordió su labio inferior un poco, nervioso. "Yo, ummh, por favor no me llames.... omega líder ni nada. Eso lo primero, prefiero que me llames Draco." Rio un poco nervioso.

Blaise parpadeó incrédulo, sin dar crédito a lo que oía. "Pero, omega—."

"Draco, por favor, dime Draco."

"...Los alfas Harry, James y Evans pueden enfadarse por eso."

El pequeño omega frunció el ceño. "No lo harán." Dijo, pero vaciló unos instantes. "No lo harán, ¿no?"

Tanto Draco como Blaise se miraron inseguros, al menos tenían algo en común; los dos temían a esos alfas. 

"En todo caso." Draco hizo un amago con su mano para restarle importancia. "Me siento más cómodo y seguro si me llamas Draco, por favor. Lo apreciaría mucho."

"¿Por qué?"

El alfa moreno no entendía cómo Draco podía sentirse más seguro siendo llamado por su nombre, que siendo llamado por el título que cargará, el líder omega de la manada. Todos los omegas se sentían honrados de utilizarlo y se pavoneaban de ello.

Pero, de nuevo, Draco no es un omega muy común.

El rubio llevó un mechón de su cabello tras su oreja. "Me hace sentir que no solo valgo para dar cachorros, sino que soy más."

Blaise sintió la necesidad de abrazar a Draco para consolarlo al verlo tan triste y deprimido, pero Harry le cortaría la cabeza si olía a Blaise en Draco. El fornido guardaespaldas sabía perfectamente que Harry era un alfa posesivo y que, muy en el fondo, se preocupaba mucho por las personas.

Pero probablemente ese comportamiento asustaría a Draco, y Blaise solo quería hacer la estancia del omega lo más suave y agradable posible.

"Eres más de lo que crees." Murmuró Blaise, Draco levantó la mirada. "Que lleves cachorros solo te hace ver lo fuerte que eres. Tu cuerpo es increíble, es capaz de gestar y dar vida, eso es fascinante, Draco. Pero también eres más que una simple máquina para los niños." Se aproximó y palmeó la espalda de Draco como consuelo. "Llevar el título de omega de Harry, James y Evans no te hace más débil. Sigues siendo Draco, no alguien diferente."

Draco quiso llorar por eso, porque durante mucho tiempo la gente no lo había tratado bien o lo había mimado o elogiado. Era un omega y tenía su instinto después de todo, y como omega quería que lo mimasen, amasen y que su alfa le hiciera un nido calentito en el que acurrucarse.

Se limitó a asentir y parpadear repetidas veces para retirar las lágrimas que empezaban a formarse en las esquinas de sus ojos grises. "Gracias." Susurró.

Blaise le acarició la espalda. "Soy tu guardaespaldas, mi deber es ayudarte."

Draco se rio entre pequeñas lágrimas emocionadas. "Blaise, te he dicho que dejes de decirlo así, me haces sentir raro."

"Pero es la verdad..."

"Bien, vale, ¿pero delante de mí puedes simplemente no decirlo? No me siento muy cómodo sintiendo que con quien hablo es mi guardaespaldas y no mi amigo." Pidió Draco, riendo un poco.

Blaise sonrió, porque Draco era su primer amigo omega. Normalmente los omegas le temían o solo lo querían como alfa, cosa que Blaise se negaba. "Amigos." Repitió, feliz.

(...)

No había visto a Camille, lo cual era un inmenso alivio para él. Sentía que ella rondaba por James y Evans, y Draco no estaba dispuesto a eso, sólo porque no iba a permitir que lo burlaran así. Camille sabía que Draco sería marcado por los trillizos, y al omega le ofendía mucho que esa beta aun así siguiera coqueteando y haciéndole ojitos a sus alfas.

Por eso no iba a rebajarse, tenía dignidad y orgullo.

Harry entró a la cabaña, todos los ojos se fueron hacia él. Iba con su torso descubierto y tenía su cabello desaliñado con algunos mechones rizados salidos. Cruzaron miradas, los gélidos ojos verdes con los serenos ojos grises.

Finalmente Harry desvió la mirada y entró al dormitorio. Nadie cuestionaba al líder, menos sus hermanos.

"¿Adónde fuiste?" Exclamó James de buena manera desde la cocina, ocupado atando sus botas con los gruesos cordones.

Harry salió abotonando una camisa azul marina, la cual dejó con dos botones abiertos. "Fuimos al río en busca de la manada Hemmings, simplemente charlar."

Evans resopló una risa. "¿Cuando dices que fue una simple charla, te refieres a que le rompiste la mandíbula?"

El mayor no contestó por unos segundos. "No. Una charla amistosa."

"¿Sobre qué?" James enarcó una ceja, muy curioso.

"Un favor que me debía, nada más." Se frotó los ojos con su dorso. "¿Adónde se ha ido el omega? Estaba hace un momento aquí."

"Salió con Blaise a tomar aire." Informó Evans. "Estuvo preguntando por ti."

Harry asintió pero no argumentó nada sobre eso. "¿Cómo lleva el cambio de aire?" 

Evans olisqueó la atmósfera. "Y hablando de aire, ¿por qué huele todo a él?"

Vio a James rascar su barba apenas crecida un poco. "Le incomoda Camille, eso puedo notarlo. Su olor se vuelve denso y territorial cuando ella está cerca. Claramente no le agrada y comienza a marcas cosas, a nosotros."

"Omega dominante." Murmuró Harry, curioso. 

"Su olor es increíble, es fascinante." Comentó James, respirando hondo. "Joder, no me quiero ni imaginar cómo olerá en su celo."

Harry no dijo nada.

"¿Alguna vez te dignarás a hablarle directamente, Harry?" Su hermano mediano le preguntó. "Sabe que vas a ser el primero en morderlo, y por ende crearás más efecto en él. Necesita sentirse seguro y a salvo, ¿cómo vas a mantener a un omega que se siente en peligro y sin confianza con uno de sus alfas?"

"Le haré un nido, o lo que sea."

Harry jamás fue bueno demostrando cosas, el contacto físico y las muestras de afecto nunca fueron su fuerte. 

"Eso no sirve de nada, necesita saber que estás dispuesto a cuidarlo y protegerlo. ¿Qué pasará cuando llegue su celo, sabes lo inestable que es un omega marcado pero sin confianza y asustado? Se estresan, se vuelven locos y pueden morir de ansiedad, Harry."

El alfa de la manada respiró hondo. "Ya pensaré en algo."

"Pues piensa rápido." James insistió. "Son las nueve de la noche y la celebración comienza ya."

blåøyde omega ;; trillizos!potter [harco]Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin