Capítulo Diecisiete.

Start from the beginning
                                    

Nick parecía encantado con todo eso de las tradiciones, así que comencé a explicarle mientras me maquillaba mirando un tutorial de internet. Él estaba en la cama, observando lo que hacía con mucha concentración y me gustaba girarme para observarle. Su traje era antiguo, pero de todos modos le quedaba divino como todo lo que vestía él.

—Vamos a ir a una fiesta en donde todos nos vestimos según una década, no importa realmente cuál. Thomas y Lisa serán los únicos que se vestirán como ahora, pero en toda la fiesta habrá fotografías, videos y otras cosas para confundir a los novios. Por ejemplo, pondremos fotografías mías en todos lados y si en algún momento Thomas toma una de ellas creyendo que esa era Lisa... perderá puntos para el final del juego —le conté entusiasmada por todo ese evento. Lo encontraba realmente divertido porque siempre el novio fallaba y terminábamos todos riéndonos de él.

—¿Y qué fin tiene esto?

—Recordar un poco los viejos tiempos. Vemos videos de nuestra infancia, nos burlamos de quienes éramos... y al mismo tiempo los novios se van conociendo para que no quede nada de ellos sin descubrir —le expliqué mientras iba hacia mi bolso y le mostraba un pendrive que había traído desde mi casa—. Yo me encargué de crear un video con Thomas de nuestros mejores momentos. Desde que éramos jóvenes, la primaria, la secundaria y un poco de nuestra vida de novios, aunque sin demostraciones de afecto. Tengo fe que eso le traiga buenos recuerdos y vuelva a mí.

Nick se rio mientras se ponía de pie y acomodaba un poco su ropa, cuando estuvo frente a mí yo hice lo mismo ya que se había arrugado un poco. Llevé mis manos a su pecho de manera inconsciente y recordé que duros eran, fuertes y apoyé mis manos sobre la ropa. Las subí lentamente, para finalmente dejarlas sobre sus hombros en un acto que parecía inocente, pero era mi propio cuerpo gritando por él. Para mi sorpresa, Nick se comportó algo raro cuando estuvo cerca de mí. Sus manos fueron hacia mi cintura y yo me quedé en silencio notando que estaban más bajas de lo habitual. Mi vestido era lo suficientemente corto para que si tirara del vestido con esas manos en mi cadera, se me viera todo el trasero en el espejo.

—Has pensado en todo —me susurró y yo asentí, aunque insegura por su manera de comportarse. Quise entender un poco su manera de actuar, pero sin embargo no logré comprenderlo. Finalmente sus manos bajaron a mi trasero y lo apretó con firmeza, acercándome a su cuerpo para sentir su calor. Por un momento me vi invadida del calor que irradiaba Nick en ese momento y un poco mi mente se perdió en el camino. No entendía nada, pero tampoco me quejaba. Era como si mi cuerpo necesitaba eso, necesitaba de Nick.

—Siempre, llevo meses planeando todo —le dije con el mismo tono de voz, pegada a él y, sin previo aviso, tomé una de sus manos para llevarla a uno de mis pechos. Supo que hacer y sus yemas acariciaron por sobre la ropa aquella parte de mi cuerpo, haciéndome derretir sin poder evitarlo.

Me di cuenta que nos estábamos provocando sin motivo, simplemente porque lo deseábamos. Nick lo deseaba más que yo, claramente, y yo estaba ahí cayendo en sus encantos físicos como una tonta. Ni siquiera era grande el tacto, pero sus manos lograban ponerme tonta y me temblaban un poco las piernas.

—¿Qué haces, Allison? —me preguntó sobre la boca, aunque yo no dejé que nuestras bocas se encontraran, simplemente estábamos muy cerca. Lo suficiente para que nuestros alientos se mezclaran.

—No lo sé... te provoco —expliqué y me causó gracia que admití que no lo sabía, pero al mismo tiempo sí. Estaba provocando a Nick creyendo que sabía que estaba haciendo, gran ilusa era yo—. Empezaste tú.

—Porque vas con ese vestido diminuto y pretendes que no me pase nada. Hoy te vi casi desnuda, con un vestido negro infartante y ahora me hablas así de decidida... me pones bastante y te crees que soy de piedra.

Me reí, porque lo que menos esperaba en ese momento es que confesara porque se había acercado a mí. Yo sabía lo que hacía, no voy a fingir inocencia, pero a veces creía que Nick era un amigo y me olvidaba que también era un hombre y que respondía a mis provocaciones.

—Ay, pobrecito él... el hombre provocado...

—Te estás portando muy mal. Voy a tener que regañarte una vez más —me dijo y con solo recordar la vez anterior se me aceleró el corazón.

—Tal vez deberías...

Decir eso fue como un explosivo en aquel momento. El juego se había terminado entre ambos y chocamos de la completa nada. Su boca buscó la mía y nos fundimos en un beso abrasador que me dejó sin aire, siendo tan pasional que ni siquiera tenía sentido. Eran movimientos bruscos, su boca cubriendo la mía mientras su lengua me buscaba y yo estaba más que entregada a todo eso. Con un rápido movimiento, me levantó y yo lo rodeé con mis piernas, ignorando por completo que estaba arrugando mi vestido para esa noche. En ese momento lo único que me importaba era Nick y nada más. Estaba segura que a él le pasaba lo mismo.

Quiero robarme al novio [Terminada]Where stories live. Discover now