Un loto travieso

12. NOCHE

12. NOCHE

Los criados se apresuraron a cumplir las órdenes de su Líder mientras Wei WuXian seguía comiéndose la sopa de costilla de cerdo y raíz de loto bajo la atenta supervisión de Jiang Cheng.

-No hace falta que la comas tan rápido, hay mucha más. Puedes repetir las veces que desees.

La respuesta de Wei WuXian fue mirarlo de reojo y sin más, levantar su cuchara repleta de líquido acercándola a sus labios.

-¡Come!

Todos los presentes miraban la escena estupefactos ante la simpleza del gesto... y su inocencia. Jiang Cheng miró la cuchara y aquellos ojos grises que brillaban tras ella... y engulló la comida ofrecida sin más. Wei WuXian sonrió satisfecho ante su gesto.

-¡Rica! -exclamó el pequeño.

-¡Eh! ¡Deja de alimentar a mi Tío, eso sólo puedo hacerlo yo! -exclamó Jin Ling levantándose de un salto con gesto indignado y señalándolo con el dedo acusador.

Todos los presentes lo miraron con sorpresa ante aquella explosión.

-Joven Amante está celoso -canturreó Lan Jingyi divertido.

-¿¿¿Qué??? ¡¡¡Cómo te atreves!!! -exclamó Jin Ling encarándolo.

-Joven Maestro Jin es un gritón, Maestro Sandu -protestó Wei WuXian mordisqueando la cuchara.

-En ocasiones, sí -reconoció por lo bajo el Líder de Yunmeng Jiang rellenando su copa -. Siéntate, A-Ling -acabó seco.

El rostro de Jin Ling se encendió escandalosamente... porque pese a que el tono de Jiang Cheng no había sido excesivamente alto, lo había escuchado perfectamente. Wei WuXian volvió a hundir la cuchara en la sopa... y siguió devorando el plato con expresión de satisfacción.

Un silencio incómodo se aposentó en la sala, apenas roto por el ir y venir del servicio sirviendo a los invitados del Muelle del Loto hasta que Wei WuXian dejó la vajilla que utilizaba sobre la mesa, resopló y salió corriendo en estampida hacia Lan SiZhui, refugiándose en su regazo sin previo aviso y apoyando la frente contra su cuello. El joven lo dejó hacer mientras lo observaba.

Años atrás era él quien hacia aquel gesto en Yiling según le había explicado Wen Ning, cuando se aferraba a su "Xian-Gege". No lo recordaba del todo, porque las memorias de su infancia se desdibujaban en cualquier lugar que no fuera los Recesos de la Nube y sólo eran jirones y retazos los que en alguna ocasión conseguía visualizar. Pero ahora sentía que era el momento de devolver una parte de lo que había recibido.

-A-Xian, ¿estás cansado? -preguntó.

-A-Xian ya no quiere más cena... A-Xian está lleno -declaró.

-No me extraña, tiene que salirle la sopa por las orejas -porfió Jin Ling -. Tres tazones y todo lo que ha querido...

-Entonces iremos a la cama a descansar -anunció Lan SiZhui empezando a levantarse.

En cuanto la palabra cama apareció en la frase, Wei WuXian se enderezó impulsado por un resorte.

-¡No, no, no, es pronto, no quiero! -negó -. ¡Vamos a buscar a ranita!

-Pero A-Xian, se te cierran los ojos... y ranita seguro que está durmiendo con su familia.

Wei WuXian se levantó, echó una rápida ojeada al salón y correteó de nuevo hasta Jiang Cheng, que lo miraba sosteniendo una copa con vino... y acabó escondiéndose detrás de su trono ante la sorpresa de los presentes.