Mangel
—¡Adiós!—me volteé, al escuchar el grito de mi madre, levanté mi brazo derecho y me despedí.
¡Primer Día de Clases!
Algo que me encantaba pero, me acojonaba drásticamente; saber que Ruben puede golpear a un Chaval solo por pedirme prestado una bolígrafo o preguntarme por la tarea.
Alcé mi mochila, por mis hombros ya que, esta pesaba un montón. Tenía los libros del bachillerato y algunos cuadernos.
Paré, al ver que un carro cruzaba. Este, se estacionó frente a Mí, y un Muchacho que me parecía muy conocido; bajó la ventana que estaba de mi lado, y me sonrió.
—¡Miguel!—lo miré—Sube, te doy un aventón—negué frenéticamente con la cabeza.
No quería causarle problemas al pobre, y lo digo por Ruben.
—Vamos, subnormal—fruncí el ceño—¡Oh! creo que no me recuerdas—bufé—Soy Alejandro, fuimos compañeros en kínder—me quedé pensando.
Claro, era el Chaval más pequeño del salón.
Y valla recuerdos que tuve con Él.
—¿Alexby?—pregunté incrédulo.
—Él mismo—sonreí
—¿Te animas o no?—asentí, y abrí la puerta de copiloto
Sentí como la nostalgia me llevaba de vuelta a aquellos recuerdos, tenerlo nuevamente cerca de mí..era algo incrédulo.
Al estar dentro, sonreí. Logré mirar la hora en el reloj de su muñeca y murmuré.
—Vamos a llegar tarde—capté su atención
En el transcurso del viaje, me comentó que había pensado en vivir solo pero, no quería que su madre llore todas las noches o lo esté llamando por teléfono seguido.
Mi móvil sonó, lo tomé entre manos y nervioso, contesté
—¿Ruben?—el carro frenó
—Miguel, ¿dónde narices estás?—su voz ronca, en la línea me inquietó.
—Yo..-miré por la ventana, estaba a una cuadra del instituto—Ya voy llegar—murmuré—¿Tú?—el coche, volvió a avanzar
—Estoy a mit..—noté una mirada, era de Alex se veía preocupado—¿Eres tú, el del carro rojo?—mierda, mierda.
—S-Sí—alejé el móvil, de mi oreja. Estaba preparado, para lo insultos.
—Bájate ahora mismo- asentí, no quería ver a alguien herido—¡Ahora!—cancelé la llamada y asustado de lo que pudiera hacer, le pedí a Alex que parara el carro.
—Me bajo aquí- abrí la puerta del copiloto—Lo lamento pero, nos veremos en el Instituto—cerré esta—Te cuento todo allá ¿vale?—vi como mi novio, se acercaba
—Vale—respondió mí amigo
Retrocedí unos pasos, y vi al porche rojo desaparecer por la calle. Tomé una bocanada de aire, y me giré sobre mis talones.
—¡Mangel!—no tenía ganas de pelear, así que corrí hasta la academia.
Pero, sabía que Ruben era más ágil que yo. Sus manos, frías tomaron mi brazo, paré en seco y lo miré.
—Cariño—acarició mi mejilla—¿Cuántas veces, debo repetirte que no subas en coches que no sea conmigo?—lo abracé, sabía que era la única forma de calmarlo.
No quería golpeara a alguien, algo o hasta a...Mí.
—Te Amo—susurré en su oído, sentí sus músculos relajarse y deposité un beso en su mejilla izquierda
—Vamos, se nos hace tarde—asentí y entrelazamos nuestras manos.
Al llegar, Alejandro me esperaba en la puerta. Su vista, se posicionó en nuestras manos juntas y rogué, que Ruben no haya visto la cara de mi Amigo, en el porche que le regaló su padre.
Caminamos hasta la entrada pero, me despegué de la mano de mi novio y me paré frente a Él.
—Yo..-bajé la mirada—Quiero presentarte a alguien—tomé aire, y lo boté con suma delicadeza. Si Ruben se da cuenta que estoy nervioso va a creer que lo estoy engañando y.. no quiero ni pensarlo—¿Qué dices? —sonreí.
—Vale pero, si quiere algo contigo yo l.. —lo interrumpí
—Lo matas, si lo entiendo—pasó su brazo por mis hombros y nos dirigimos hacia Alex.
—¡Mangel! —corrió hacia Mí, y me abrazó.
Un carraspeo por parte de Rubius, un apodo que le propuse y le encantó, hizo separarnos.
—Alex, él es Ruben—me puse junto al castaño—Mi novio- sonreímos.
Noté una mueca en la cara de mi amigo.
—Ruben Doblas—extendió su mano y, mi pequeño, amigo la aceptó
—Yo, los felicito—abracé a Rubius—Nunca había visto tan feliz a Miguel, desde que rompió co.. —calló al sentir mi mirada en Él.
¡Joder!
—¿Rompió con quién?—bajé la cabeza.
—Conmigo- respondí en un murmuro.
—¡¿Contigo?!- me alejé de Ruben.
—Rubiuh—susurré.
—¿Estuviste con Él —me preguntó, en un tono agresivo.
Asentí, levemente. Cerré los ojos.
—...—sentí su mirada—¿Por qué nunca me lo dijiste? —los abrí.
—Yo no quería más problemas con los que lidiar—suspiré y pase ambas manos por mi cabello.
—¿Quien rompió con quién? —preguntó, su voz era ronca, como si estuviera dispuesto a golpear.
Iba a hablar pero, Alejandro se me adelantó
—Miguel, rompió conmigo—noté que el puño, que tenía Ruben desapareció
Miré a Alex, con una sonrisa. En realidad Él, rompió conmigo. Alex, tuvo que irse a Londres por cosas del estudio y por el bien nuestro, dejamos una bonita relación.
Lloré, lloré como si no hubiera un mañana. Pero, un año después conocí a Ruben a ese Chico Agresivo del que estoy completamente enamorado.
—Mangel—lo miré— Te Amo —era difícil, escuchar un "Te Amo" por parte de Rubius ya que, este era muy reacio cuando estaba molesto.
—Yo también—me besó, frente a mi ex-novio y algunos alumnos, que entraban al Instituto.
¡Madre Mía! de la que te has salvado Alex.
