-No puede ser.

-¿Qué?

-Su mamá, digo, si es su mamá es la dueña de una gran línea de Cosméticos, ella es china y...-Jaehyun soltó un jadeo.-¿Renjun es rico?

-Bueno, entre a este enlace y su papá es relacionista internacional y tiene cadenas de hoteles.-susurro el mayor aún leyendo.-Lo que nos deja a que es probablemente millonario.

Jaehyun estaba impresionado, a leguas se veía que Renjun venía de una familia acomodada pero jamás imagino algo como esto.

-¿Qué crees qué haya pasado?

Doyoung resopló dejando su celular a un lado.

-Lo qué pasa cuando a los ricos las cosas no le salen como desean, se deshacen de ellos.

-¿Solo porque esta embarazado? Es injusto.-susurró el menor sin poder creer que los padres de Renjun le dieran la espalda de esta manera.

-Asi es ese mundo.-se encogió de hombros antes de mirarlo.-Al menos eso veo en los doramas, no me hagas caso.

Jaehyun soltó una risa antes de bajar del árbol para ir hacia dentro, tenía sueño y estaba cansado, ansiaba descansar.

-Buenas noches.

En la mañana fue inevitable no mirar a Renjun con otros ojos, notaron el brazalete en su mano, parecía de oro blanco, ¿Como no lo habían notado antes? Pero además de eso el estaba dentro del rango normal mientras caminaba hacia el comedor acaricia...

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En la mañana fue inevitable no mirar a Renjun con otros ojos, notaron el brazalete en su mano, parecía de oro blanco, ¿Como no lo habían notado antes? Pero además de eso el estaba dentro del rango normal mientras caminaba hacia el comedor acariciando su muy pequeña panza.

-Buenos días.

-Buenos días, Renjun.-sonrió Doyoung.-¿Tienes planes?

-Algo.-respondió agradeciendo por la ensalada de frutas y los panqueques frente a él.-Iré al taller.

-¿Al taller?-pregunto Jaehyun confundido.

-Si, Renjun nos está ayudando con la administración.-respondió Yuta encogiéndose de hombros.

-Oh, hace años les dije que debían organizarse.

-Por fin, sabía que había alguien sensato por aquí.-sonrió Renjun antes de mirar a su alrededor.-Hablando de poca sensatez, ¿Donde está Jeno?

-Salió a correr.-respondió Donghyuck.

Renjun asintió.

-¿Y Jisung y Yangyang?

-Probablemente estén con el, no se, ¿No deben tener un horario también?

Renjun frunció el ceño mientras comía.

-Espera, lo único bueno de esto es tener un horario en el que podemos llegar algo tarde, ¿Si?

-Adoro como piensa.-susurro Yuta golpeando a Donghyuck en el hombro.

No fue hasta casi las nueve que estuvieron caminando hacia el taller, Renjun les había dado una lista de que comprar. Como un divisor de su pequeña "oficina" con el taller en si, un comprobado de tarjetas, un creador de recibos y un póster con las reglas del lugar sobre no devoluciones, o cambios de piezas, en cualquier situación tendrían que volver al taller.

-Siento que trabajar así es más ordenado.

Y lo era, Renjun estaba realmente impresionado de que hubieran funcionado así por tanto tiempo pero no dijo nada y simplemente continuó con su trabajo.

El tiempo pasó, de repente tenía cuatro meses y luego cinco, la amniocentesis era un tema que seguía en el aire pero que Jeno no quería tocar, al menos lo que se veía en el ultrasonido era positivo así que estaban bien dentro de lo que cabía.

-No, basta no estoy tan gordo.

Jisung negó decepcionado de que no aceptara su realidad y con ayuda de Yangyang pasaron la cinta métrica por su panza.

-Si. 17,5 será un gran bebé.

Renjun tiró su cabeza hacia atrás, esto no le podía estar pasando.

-Hace una semana era 16.

-Las cosas cambian.

-Eso es bueno, ¿No es bueno?-pregunto Donghyuck confundido desde el sofá.

-Es bueno, ellos solo son dramáticos.

-No, no entienden.-soltó lloriqueando.-El bebé va a tener una cabeza gigante, ¿Y si es una niña? Será una niña cabezona.

Doyoung soltó una risa junto a la abuela que estaba en el comedor tejiendo algo.

-¿Esa es tu mayor preocupación?

Renjun tenía un puchero mientras caminaba hacia el sofá.

-Una de ellas...-susurro más para sí mismo.

La puerta se abrió de repente y Jeno entró con un tarro de helado que dejó en las manos de Renjun antes de tirarse en el sofá.

-¿Cuanto mide?

-17,5.-respondió Jisung.

-Genial.-sonrió mirando la panza de Renjun.-Creó que no es el bebé Renjun está gordo porque come mucho.

-¿Qué?-el mencionado dejó de abrir el tarro para mirarlo.-Disculpe señor que me manda a vigilar para saber si estoy comiendo.

-Es tu decisión.-se encogió de hombros.

Renjun lo miró con los ojos entrecerrados, habían pasado cinco meses de conocer a Jeno y en realidad sentía que conocía a todos los demás más que a él propio padre de su hijo. Era mentira si dijera que no le seguía atrayendo, sentía que alhunas cosas malas estaban sucediendo en su cerebro cuando el pelinegro le parecía cada vez más guapo y una vida junto a él se veía posible.

Dios, apenas le decía buenos días.

Esa noche ordenaron hamburguesas y Renjun estuvo feliz, feliz de ser tan consentido y que le dieran dos, estaba avergonzado pero no lo fue por mucho tiempo y gozo de todo lo que le dieron porque jamás, en todos los siglos si estuviera viviendo ese embarazo en su casa comería estas delicias.

-¿Quieres más?

Las mejillas de Renjun estaban repletas pero sus ojos brillaron cuando vio la mitad de la hamburguesa de Jeno perfectamente cortada siendo arrastrada a su lado. La miró por varios segundos antes de volver su vista al menor.

-¿Me quieres hacer gordo?

-No.-sonrió.-Solo quiero que comas bien.

Renjun suspiro cruzándose de brazos.

-¿Lo prometes?

-Lo prometo.

-Bien.

Sin esperar un segundo más tomó la hamburguesa y continuó comiendo mientras tarareaba, la abuela en el otro lado del comedor los miró con una sonrisa antes de seguir cociendo.

Motorbike guy [noren]Where stories live. Discover now