Capítulo 1

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Los Ángeles es agotador. La gente es agotadora, el tráfico es agotador, la falta de familiaridad y la sensación de no pertenencia es agotadora. Louis debería haber pasado suficiente tiempo en Los Ángeles en su vida de estrella del pop multimillonaria para acostumbrarse al lugar. Al aire pesado y caliente que se pega a su piel como una sábana. Sin embargo, sigue sintiéndose como en otro mundo, a un millón de kilómetros de distancia de los cielos grises y de la comodidad de Londres.

Louis trata de llevar un poco de su hogar allá donde va. Ya sea algún viejo amigo que necesite unas vacaciones, como Oli o Calvin, o simplemente algo tan pequeño como una foto de 6x4 de su madre en su cartera. No solía echar de menos su casa, cuando la banda empezaba a tomar impulso. Antes, cuando iba a lugares por primera vez, demasiado distraído por lo absurdo de la realidad en la que se encontraba. Metido en algo que ni siquiera sabía que quería, con cuatro chicos que apenas conocía.

Ésa es otra de las razones por las que se encuentra desubicado en Los Ángeles, incapaz de eliminar una picazón que le lleva molestando años. Al principio, el hogar no era un lugar. Había sido una persona. Lo había grabado permanentemente en su piel, por el amor de Dios. Siempre fueron él y Harry. Pegados el uno al otro como pegamento. Atraídos por una fuerza magnética, existiendo en su propia burbuja. Todo el mundo podía verlo, pero eso era la mitad del problema, ¿no?

No es que Louis pueda señalar el momento exacto en el que él y Harry perdieron la sintonía. En realidad no hubo ninguno. Había sido un deslizamiento gradual, como la marea desgastando un acantilado de piedra arenisca. Desgastando los sólidos cimientos hasta que no quedaba nada que impidiera que la estructura cayera a las olas de abajo.

No es que se pase todo el tiempo sentado lamentándose por una amistad perdida, se le dan bien las distracciones. Pero LA sólo parece acentuar la distancia entre ellos. Dos planetas separados, ni siquiera en el mismo sistema solar

Harry está tan a gusto aquí, que pasa cada segundo que puede disfrutando del calor californiano, haciendo contactos con magnates de la música y codeándose con las Kardashians. Harry brilla en Los Ángeles, como si la ciudad estuviera hecha para él. Louis pasa la mayor parte del tiempo en lujosas villas con aire acondicionado, demasiado limpias y sin vida para sentirse cómodo. Tirado en el sofá, busca su nombre en Google y se enfada con la mierda que le sigue.

El último flujo de artículos es deprimentemente hilarante. Fotos de él cayendo de las discotecas, rodeado de una multitud de hermosas rubias de piernas largas.

'El recién soltero Louis Tomlinson se lleva a cinco chicas afortunadas a un hotel'. Dice un artículo, Louis se burla. Siempre ha sido un borracho pegajoso, desesperado por la atención y abrumado por la sensación de querer tener a alguien cerca.

No puede evitar sentir lástima por las chicas a las que se aferra en los clubes. Volver con Louis desde la habitación de hotel de One Direction suena muy bien en teoría. En realidad, supone poco más que sentarse en la cama de Louis mientras se lía un porro y, tal vez, fumar con él antes de llamar a un taxi para las chicas y prestarles su ropa de abrigo para volver a casa.

Lo más íntimo que ha hecho en meses es agarrar la polla de Liam en el escenario para que le jodiera la nota alta. Eleanor y él no habían pasado de ser amigos hace mucho tiempo. Había sido como una red de seguridad, ella era una de las mejores personas que Louis había conocido y aunque su relación había sido poco más que platónica durante mucho tiempo, ella significaba mucho para él. Hacía meses que habían terminado oficialmente. Aunque Louis sabía que no había nada, le había dolido mucho oírlo. "Estoy viendo a otra persona, Lou. No puedo seguir llamándome tu novia, no es justo para ninguno de los dos. Tenemos que empezar un nuevo capítulo. "

Untangle Me (traducción) Where stories live. Discover now