Athena White, no era una diosa pero si muy inteligente. Una chica con un extraño pasado por descubrir.
Regulus Black, el hijo perfecto no tan perfecto. Un chico que se dió cuenta de que podía vivir sin importar lo que su familia diga, aunque vivía e...
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𝟎𝟏. 𝐏𝐀𝐍𝐃𝐎𝐑𝐀
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2 DE NOVIEMBRE DE 1977
En el baño de una habitación de hufflepuff, una castaña se hacía su habitual delineado. Athena White no era ella misma sin este. Se preparaba para sus clases. Alisó su uniforme y se peinó. Tenía su propia habitación desde el año anterior, cuando la seleccionaron como prefecta.
Aun recordaba como había sido la llegada de su carta:
8 de diciembre de 1971
En alguna parte de Liverpool, vivía una familia muggle, Los White. El día del cumpleaños de Athena llegó la carta de aceptación a un colegio de magia y hechicería, Hogwarts, junto a una bruja alta, de aspecto severo y cabello negro recogido en un moño apretado con una figura imponente. Esta habló con sus padres y les explicó que su hija era una maga, como serían las cosas en aquella escuela, que aprendería y a donde deberían ir a comprar los materiales. Y así, el 1 de septiembre de 1972, Athena empezó a asistir a Hogwarts.
Athena era una persona con la cual querrías estar, transmitía alegría y tranquilidad hacía donde quiera que vaya, pero nunca compartirías una habitación con ella. Era vidente, pero sus visiones no venían de la nada, eran en sueños. Muchas veces despertaba gritando, otras llorando y otras riendo, pero sus antiguas compañeras no lo soportaban, cuando llegó la oportunidad de tener su propia habitación, ella aceptó con gusto para no molestar a nadie más. Seguro te preguntarás cómo una hija de muggles podía ser vidente, era un gran misterio para ella y para los que la rodeaban.
