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La vida en su trabajo es estresante pero sabe perfectamente que es la razón por la que aquella hermosa niña está tan tranquila y está con todas las comodidades que incluso otras desean.

Los vínculos son importantes en cualquier lugar al que tienes que ir, tanto laboral como tú vida familiar.

No es fácil que de un momento a otro todo cambie. Eso lo sabe Clay con certeza.

Su vida cambio con su hija y también con su mujer. Cambiaron tantas cosas que llega a un punto donde solo espera que no sea una mala noticia los cambios en general.

Esta bien en su lugar de confort porque sabe que ahí puede cuidar a la pequeña de cabellos rubios y sabe de la manera más interna que es para intentar recompensar sus errores.

Sea como sea siempre es más importante aquella niña antes que cualquiera, no sabría que hacer si alguien la daña y solo espera estar ahí para protegerla.

Salir de la oficina era una de las cosas más reconfortantes después de saber que esa niña se encuentra ansiosa por su regreso.

Tiene entrevistas mañana con nuevas niñeras y eso ya era un gran avance.

Suele hacer eso ya que realmente es una persona estricta, no dejaría que cualquier persona se le acercara a la única persona que le importaba.

Clay tomó los dos celulares y comenzó a buscar los mensajes de George. Los vio y asintió para si mismo al ver qué la niña quería algunos cuantos dulces que no tardó en conseguir al entrar a un super mercado. Compró algo de paso para la cena y fue hacia su hogar.

Cocinaría algo para aquellos tres y llevaría a el más bajó a su hogar.

Al llegar a aquella casa bajó las cosas y entró a su casa viendo sólo algunos cuantos focos prendidos y escuchando la risa de la menor.

Sonrió para si mismo acomodando todo lo que había comprado para subir y ver a su pequeña con la pijama ya puesta mientras jugaba con las muñecas al lado de George.

- Llegué... ¿Como están ustedes dos?

Hablo calmado acercándose a ambos.

- ¡Papá! - la pequeña se mostró emocionada al verlo, dejando sus muñecas de lado para así colocarse de pie y acercarse hacia su padre, yendo a abrazarle - ¡Te extrañe mucho!

-¡Yo también te extrañé mi princesa!

Miró lo emocionada que estaba. Realmente parecía feliz y era la primera vez que no estaba al pendiente del reloj para verle, lo sabe porque si no seguramente estaría afuera en espera de él, en cambio se veía realmente feliz y tranquila.

George de igual manera que Lily se coloca de pie, acercándose pero manteniendo su distancia, sonriendo al ver la emoción de la pequeña.

- Me divertí mucho hoy, Gogy me ayudó con mi lectura y mi tarea y estuvimos jugando con mis muñecas mientras te esperábamos - La niña jugó un poco con su cabello, realmente se notaba muy feliz, no se había mostrado así con su anterior niñera era tan nuevo verla sonriendo.

- Oh... miren esa sonrisa... - Dijo Clay refiriéndose a ambos. Sin mucho problema cargó a la menor para besar su frente mientras escuchaba a George.

- Oh, Lily realmente es un ángel, es muy tranquila - ella no era del todo igual a cuando estaba en clases, en el sentido de que estando en su casa era menos tímida y aun así, no hacia desastres ni nada parecido - Hizo muy bien su tarea, ensayó una hora y de resto estuvimos jugando.

- Es fácil ver cuándo se divierte, está vez no parece haberme esperado abajo. Gracias por cuidarla, se ve que disfrutó mucho tú compañía. Es lindo verla tan alegre - Se atreve a ser un poco sincero, de verdad pensar que aquel maestro se prestó a ayudarle aún arriesgo de poder estar ocupado, era algo que agradecería por siempre. - Si quiere podemos bajar y les hago la cena y ustedes me cuentan un poco como les fue hoy mientras dibujan algo. Te compré algunas gomitas que era lo que pediste, pero eso para mañana o después de cenar.

Lily [DNF] [AU] [DreamNotFound]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora