Golden String • Larry

7. The exit

—jamás dije...

—no, no vas a hablar porque aún no he terminado—interrumpe, golpeando su mano contra la mesa. Es ruidoso e inesperado pero Harry ni siquiera parpadea. Se limita con cruzar los brazos y asentir en señal de que está escuchando—¿quién mierda te crees? ¿El abogado de Morfeo y defensor de los sueños?—niega estupefacto—No necesito consejos de un estúpido como tú. Me encuentro perfectamente bien.

—si tú lo dices—levanta las manos a la altura de la cabeza, suspirando. Sin embargo, un momento después se inclina sobre la mesa y susurra, arqueando las cejas en escrutinio—aunque, si fuera tú, me limpiaría la baba seca del rostro y pondría un poco de corrector en esas ojeras antes de que las personas comiencen a confundirme con una muerto viviente.

Louis tiene ganas de gritar lo patético que es el rizado y lo equivocado que está. Harry no lo conoce y jamás lo hizo. Así que tampoco puede disturbar su paz con tontas ideas infundadas por algunos bostezos y oscuras ojeras. Él no está cansado, quizás un poco somnoliento.

—púdrete—masculla, apretando los puños.

Harry exhala al tiempo que vuelve a recostarse en el espaldar de la silla y se concentra en continuar sellando libros.

—tus deseos son órdenes, principito—murmura y así termina su única interacción aquel día.

Tomlinson desgarra algunas paginas al tirar los libros de lado, pero poco le importa. Quiere terminar lo más pronto posible y encontrar a Niall para ir a comer a algún puesto de comida chatarra. No obstante, su plan se ve un tanto modificado cuando encuentra al rubio colgado de Zayn al terminar su turno en el periódico.

—¿nos vamos?—inquiere Horan, ignorando la incómoda mirada del castaño.

—claro—contesta por obligación, forzando una tensa sonrisa en sus labios—Zayn, hola—abre las manos, luchando por encontrar las palabras correctas—Niall no me dijo que vendrías.

—ah, si. Fue de improviso—murmura el morocho, agachando la mirada. Louis se sorprende de lo tímido que puede llegar a ser a veces—¿está bien? Si prefieres, puedo...

—por supuesto que está bien—se apresura a intervenir Niall, otorgando por el rabillo del ojo una mirada de advertencia al castaño—Nos encanta pasar tiempo contigo.

Louis a veces llega a odiar la necesidad de Niall por hacer sentir a todos incluidos. De igual manera, es lo que más adora de él.

—está bien—asegura Tomlinson, palmeando el hombro de Malik—es solo que no lo esperaba.

Zayn asiente, sonriendo en demasía al verse aceptado.

Los tres terminan en el restaurante a donde Louis fue con la banda el día que publicó su primer artículo en la página web.

Pasan un rato agradable y la presencia de Zayn no arruina sus planes de quejarse sobre Harry. Lo único molesto a remarcar serían los constantes comentarios de Malik por justificar a Styles. No obstante, Louis los ignora, sin detenerse a reflexionar que tanta razón puede haber. En parte, Harry le dio un consejo razonable y beneficioso. Sin embargo, Louis no necesita nada que venga del rizado. Así que tampoco se arrepiente de haber sido grosero en la biblioteca cuando Harry solo quería ayudar aparentemente.