t r e i n t a y s e i s

Mulai dari awal
                                    

—¿No va a ir? —preguntó con un puchero.

—Sí, mi amor, pero tenía cosas que hacer. Lo veremos allá—sonrió y acarició su cabeza. Salió de la habitación luego de decirles a sus pequeños que el desayuno estaba listo.

Luego de comer y de hacer sus quehaceres, Jeno subió para darse una ducha y alistarse. Bajó vestido con un conjunto de pants en color blanco y apresuró a su papi porque se les haría tarde.

—Mi amor, faltan como cuatro horas para irnos—rio mientras echaba la ropa sucia a la lavadora—. Ve a jugar o a ver la tele, anda—Jeno asintió con la cara larga y se dirigió a la sala.


Al llegar al gran gimnasio en donde sería la competencia, Jeno comenzó a buscar a YoonOh por todos lados.

—¿Y si no viene?

—Va a venir—se inclinó para quedar a su altura y acomodar su sudadera—. Mira, ahí viene Renjun, mi amor—el pequeño giró la cabeza y corrió hacia su amigo, quien lo recibió con un abrazo.

—¡Vas a patear sus traseros! —exclamó Renjun y de inmediato volteó a ver a su papi YiXing, quien lo miró asustado.

—¿Qué dijiste, Kim Renjun? —preguntó MinSeok, su otro papi y el pequeño corrió detrás del chino—. ¿Acaso tú ya lo habías escuchado? —se dirigió a su esposo cruzándose de brazos.

—Un vez—levantó su dedo y sonrió tiernamente.

—Y supongo que lo castigaste.

—Me prometió que no lo haría de nuevo.

—Y lo hizo—arqueó su ceja y tanto su esposo como su hijo, se acercaron a él para abrazarlo y pedirle perdón.

—¡Papi! —Jeno corrió hacia YoonOh y éste por acto reflejo, lo cargó. Caminó con el pequeño en brazos hasta donde TaeYong y lo saludó con un tierno beso en la mejilla.

Esperaron a que Johnny y Mark llegaran para entrar y sentarse juntos. TaeYong ayudó a su pequeño a ponerse su uniforme y luego de dejarlo con los profesores, subió para sentarse a un lado de su novio.

En cuanto YoHan, el profesor, llamó a Jeno para su encuentro, el menor se levantó sintiéndose muy nervioso, pero no tan nervioso como su padre. Le ayudo a ponerse el equipo de seguridad y luego de animarlo, lo encaminó hasta el cuadrilátero.

Jeno estaba listo para dar el primer golpe, pero el otro niño fue más veloz y lo empujó con fuerza, haciéndolo caer.

—Eso es falta, ¿no? —preguntó TaeYong algo molesto y YoonOh no pudo evitar reír, ya que por lo poco que había visto en los entrenamientos, era completamente legal.

Jeno se levantó con ayuda del referí y puso sus manitas en posición, pero de nuevo, el otro niño lo empujó.

—¿Cómo pueden permitir que siga empujándolo? —TaeYong se puso de pie con intención de ir en busca de su hijo o de golpear al entrenador por hacerlo sufrir de esa manera, pero YoonOh se paró a su lado y tomó su mano para jalarlo de nuevo al asiento—. Es que, ¿por qué no lo detienen? —mordió su labio internamente.

—Amor—el mayor giró a mirarlo—. El entrenador sabe lo que hace, ¿sí? —TaeYong asintió y siguió viendo a su hijo con angustia.

El referí levantó a Jeno y le preguntó si podía continuar, el menor asintió mirándolo con los ojos cristalinos y el hombre le dijo que se calmara. El pelinegro ya no pudo más y un puchero se formó en su boca, para que poco después, las lágrimas se hicieran paso.

Johnny no pudo evitar reírse de su sobrino, ganándose un codazo en la costilla por parte de su esposo. Mark giró su cabeza para mirar a TaeYong y cerciorarse de que no vio a Johnny, pero su amigo estaba tan concentrado en su hijo, que podría explotar una bomba a su lado y no se daría cuenta.

Bizarre [JaeYong]Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang