NARRADORA.
Al día siguiente dieron de alta a Gonzalo y Bárbara algo fastidiada tuvo que estar con él, al pendiente de lo que necesitara.
Franco paseaba en su camioneta por la Ciudad de México y casi atropella a una chica que se atravesó en su camino.
Se bajo de su camioneta y se encontró con aquella chica asustada y al bordé del llanto.
-¿Estás bien?-. Le pregunto él pero ella no contesto, solo se limitó a mirarlo fijamente.
-Oye ¿Puedo ayudarte en algo?-. Volvió a hablar Franco.
-No... no se donde estoy-. Hablo al fin la chica y sorprendentemente abrazo a Franco.
Él no supo cómo reaccionar ante aquel gesto pero al verla tan preocupada decidió devolverle el abrazo.
-¿Cómo te llamas? ¿Venías con alguien?-
-No sé, no sé-. Repetía ella con voz temblorosa.
-¿No te acuerdas de tu nombre?-
La chica dudo un momento antes de volver a abrazarlo.
-Me llamo Liliana...Liliana Elizalde-.
A Franco le pareció no haber escuchado bien así que le volvió a preguntar su nombre y ella volvió a repetir lo mismo "Liliana Elizalde".
Tenía en frente a la hija perdida de Gonzalo y cuando le repitió su nombre pareció que ella un fantasma pues Franco no salía de su sorpresa.
-Ayúdeme, por favor-. Le pidió Liliana en un llanto ahogado.
Franco reaccionó al fin.
-Ven-. Le dio la mano a Liliana. -¿Quieres que te lleve a tu casa?-
-¡No! No quiero volver ahí-.
A Franco le extraño mucho esa reacción . -¿Porqué no?-. Pregunto él.
-Porque allá vive la hiena-. Le contesto Liliana llorando.
Y hasta acá el maratón.
¿Les gustaron los capítulos?