Capítulo 1

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Por Yuuji.

Me enamoré hace dos años del ser más perfecto del mundo, demasiado alto a mi parecer pero de excelentes proporciones por donde lo veas, rasgos delicados y seductores, además de sus increíbles ojos color cielo, a parte de eso tenía un extra, era inalcanzable, prohibido incluso.

Mi jefe Gojo Satoru.

Dueño de la empresa Jujutsu y casado con mi tía.

Pensé que ese enamoramiento era pasajero, después de todo yo estaba comprometido, hasta recuerdo jurábamos amarnos con locura cada vez que nos veíamos, siempre la pareja perfecta, mi prometida Akkari Nitta, siempre radiante, vibrante, ardiente y maravillosa.

No recuerdo que le provoco o como caímos en esto, pero, actualmente me resulta tan motivante y excitante continuar con la pasión de mi tonto enamoramiento, no lleva a nada y se que será devastador cuando termine, pero aun así me arriesgo.

Toco la puerta de su oficina, me resulta extraño que haya oscurecido sus vidrios antes de mi llegada, pero espero hasta escuchar la confirmación para acceder, entro a su oficina con varios documentos sobre mis brazos, siempre a la misma hora, la misma sensación y por primera vez en mucho tiempo no es el mismo olor, siento mi corazón derrumbarse al mismo tiempo que coloco mi mejor sonrisa para la esposa de mi jefe, Shoko Ieri, me mira entusiasmada, y en cuanto coloca los documentos sobre el escritorio de Gojo me abraza con cariño, mi sonrisa flaquea y la culpa me carcome.

¿Como soy capaz de hacerle esto a ella?

Mi vista viaja hasta mi cómplice que me sonríe de lo más natural posible, entonces mis ojos viajan por la oficina hasta encontrar los motivos de que los vidrios estén oscurecidos, terminamos nuestro abrazo e intenta comenzar la platica, pero la interrumpo, una disculpa descuidada y una escusa apresurada me dejan salir de la oficina en un momento con la promesa de una cena juntos la próxima vez con mi prometida incluida.

Salgo lo más tranquilo posible, acomodo mi gabinete y me dirijo por mi auto, es la hora de salida de todos y aunque planeaba quedarme más tiempo, ya no es posible, entro rápido a mi carro y salgo del edificio, me alejo lo suficiente.

Conduzco hasta mi casa y agradezco que Nitta se encuentre de viaje con sus amigas para encontrarme con la soledad y culpabilidad, las lagrimas caen desesperadas, siento mi bolsillo vibrar y el mensaje de siempre que esto pasa.

-Lo siento, ¿puedo ir a verte?-

No contesto, no puedo, no después de sentir el casi imperceptible vientre de mi Ieri, más mensajes llegan sin darme tregua, entonces empieza el enojo, arrojo violentamente el aparato y me centro en mi mismo.

Esto debe terminar, lo se, y aún así no me atrevo a hacerlo, está claro que Gojo no lo hará, entonces el teléfono suena, reconozco el tono y trato de calmarme lo más que puedo, si no contesto estoy seguro que mi hermano tomara el primer vuelo a Japón para verme, así que con la voz más calmada que tengo contesto.

-¿Porque demonios no contestas?-

-Hola a ti también, ¿como te encuentras?- escucho el resoplido que me da y la espera me hace sospechar sobre que se ha dado cuenta.

-Estoy excelente como siempre, soy el gran Ryomen Sukuna, jamás me ira mal- y ahí esta, mi  orgulloso y perfecto hermano- la pregunta es si tu lo estas, aunque se que estas mas que jodido con lo de Gojo-  ¿qué?¿Lo sabe? ¿como? y antes de que pueda preguntar o decir algo continua- con todo lo de sus nuevos negocios y la tía embaraza debes de ser su esclavo n.1- suelto un suspiro de alivio.

-hahaha es cierto, aunque me he acostumbrado, hoy vi a la tía por cierto, se ve saludable y llena de vida, como todo una embarazada, bueno es una, pero sabes a lo que me refiero- 

-mmm suenas un poco diferente, ¿realmente esta todo bien?-

-Por supuesto que si, porque no habría de estarlo?, ah cierto, lo siento, tengo un encargo que hacer, así que te hablo después, te quiero Sukuna, saluda a Megumi, adiós- y cuelgo antes de que pueda responderme, veo mi celular y la clara línea en medio de la pantalla signo de que no debería haberlo aventado con tanta fuerza o al menos lo hubiera hecho sobre el sofá.

Me siento por un segundo inspeccionando alguna otra consecuencia de mi acto y para mi desgracia encuentro varias abolladuras que estoy seguro no estaban antes ahí, miro por la ventana, toda la ciudad se observa, mi departamento no es extremadamente lujoso, pero más que otra cosa es porque logre evitar que Ieri compraran todo, ella me regalo este departamento (que yo consideraba que era más un pent house que otra cosa), cuando me gradué de la preparatoria, a Sukuna le regalo el de alado, un lugar propio había dicho, que nos quedaba más cerca de la universidad, nos mudamos casi de inmediato aunque no dejamos de ir un solo día a la casa a verla, ella aún no se casaba, solo decía que tenía un loquito detrás de sus huesitos, quien diría que se terminaría casando con el.

Ieri me adopto junto a Sukuna cuando mi familia murió en un accidente, aparentemente fue ahijada de mis padres y por eso lo hizo, aunque ella acaba de cumplir la mayoría de edad se hizo cargo de nosotros y nos brindo todo, incluso hizo que Sukuna hiciera la universidad aunque estaba empellado en no hacerla y mejor a hacer otras cosas de procedencia legalmente dudosas, Sukuna estudio leyes mientras que yo estudie administración de empresas.

Salgo de mi viaje en el tiempo cuando escucho el timbre, me levanto con pereza, parece que perdí completamente el tiempo porque la ciudad se encuentra totalmente iluminada en contraste a la oscuridad que parece que la devoraría si se descuidara, me acerco al picaporte y cuando estoy apunto de abrir me asomo por el agujero de la puerta y veo a Gojo afuera parece molesto entonces pienso en retirarme sigilosamente hasta que escucho su voz.

-Se que estas detrás de la puerta, ni pienses en no abrirme a menos que quieras tener que comprar una nueva puerta, por que te juro Yuuji Itadori que la tumbare- y con eso giro el picaporte.

-Ha!, no es como si cumplieras tus promesas al pie de letra ¿no?- le digo con burla, me empuja al entrar y cierra la puerta, coloca el seguro como si fuera el dueño, en cuanto se voltea mis labios caen prisioneros de los suyos y unas manos se cuelan debajo de mi camiseta, por un momento me dejo llevar por estas emociones hasta que me aprieta más contra el y un recuerdo vuelve - NO- lo empujo y me hago hacía atrás en cuanto el avanza otra vez- no es correcto hacerle esto a Ieri, ella... está embarazada-

-Desde hace mes y medio- me dice con sinismo- ¿pero hemos dejado de vernos en ese tiempo?-

-¿Y no podríamos?- me armo de coraje- ¿no deberíamos parar?, ¡me caso en 2 meses y tu tendrás un hijo en 8 meses más! ¿no crees que es momento de parar?- miro sus ojos y me arrepiento de inmediato sus ojos parecen un par de hielos, no hay emociones en ellos, esta vez se acerca y coloca su mano en mi mejilla.

-¿en serio quieres eso?, ¿crees que ahora podrás jurarle amor eterno a Nitta en un altar en Yokohama o cogertela en tu luna en Cancún?, pobre Yuuji, no seas absurdo, tu no quieres dejarme, después de todo, ¿que harás después?, ¿serás capaz de decirle a Ieri que te metiste con su marido?, sigamos como estamos, nadie sale lastimado de esta forma- me suelta sin mucha delicadeza y se dirige a la puerta- me voy, espero y recapacites de lo que paso, descansa bien Yuuji- en cuento todo su cuerpo está fuera me dirige una ultima mirada que me deja en escalofrío- yo te amo Yuuji.- y con eso se va, me apresuro a colocar el seguro por si decide terminar por lo que vino.

Me dejo caer en la pasillo, me siento tan desesperado y perdido que me es imposible entender en que momento todas las cosas se jodieron de esta manera, mientras mis lagrimas siguen cayendo me quedó dormido.



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⏰ Poslední aktualizace: Aug 19, 2021 ⏰

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