100. Especial 30.K de Vistas 💕

816 80 34
                                    

Todos conocemos a Kai Kamal Huening, aquel chico de rostro angelical, corazón de oro y alma pura, voz de Ángel, alguien sociable y extrovertido, de anchos hombros al igual que su espalda, de un ochenta y cinco de estatura, viniendo de una familia multitalentosa, de hebras castañas y de signo Leo.

Nadie lo conocía tanto que su mismísima pareja, Kang Taehyun.

Bueno, esta vez era la excepción...

— No sé si darle un peluche de pingüino de su tamaño, o darle un teléfono nuevo. —dijo el menor cuestionándose el regalo perfecto para Kai.

Aún sabiendo perfectamente las cosas que le encantaban a su lindo y tierno novio, no sabía que regalarle para su quinto aniversario de este año. Estaba a unas cuantas horas de reunirse con el menor a tomar un café y pasar el día juntos de seguro comiendo, en el parque de diversiones o noche de películas.

Tal vez un poco de todo.

— Mmh.. ¿Y si ya es hora? —volvió a preguntar anarcando una ceja, refiriéndose a otra cosa.

— Veamos... Cinco años de relación.. Sumandole desde su enamoramiento y de que ambos dudaron de sexualidad cuando eran Trainees. Pues casi ocho años. —río la castaña— Taehyun, lo amas y él a ti. Hasta diría que fueron hechos el uno para el otro desde que nacieron, pero ya sabes que no creo en eso de las almas gemelas.

El mencionado asintió desanimado y nervioso, había pensado durante muchos meses en si ya dar el siguiente paso o no a su relación. A veces se preguntaba si hizo bien en declararse a Hueningkai, pero siempre desechaba algún pensamiento relacionado al arrepentimiento de su relación. ¿Cómo podía dudar? ¿Cómo podía pensar en que si fue buena idea declararse a Hueningkai?

Recordaba perfectamente la primera vez que experimentó las típicas sensaciones de tener mariposas en el estomago, mirar boba o profundamente a quien era producto de ese sentimiento como si darías hasta tu vida por aquella persona y de sentir como todo tu cuerpo se ponía nervioso con solamente su presencia o en hablarle, y es que Taehyun cayó profundo por su menor.

Acabó por lanzarse al barranco sin miedo a ser rechazado, sin miedo a ser juzgado, sin miedo a nada.

Sonrío.

Aún recordaba perfectamente la primera vez que lo vio. Después de ser aceptado por BigHit decidió explorar la agencia, caminando entre los pasillos mientras abría y cerraba las puertas se acercó a una que se podía escuchar claramente como del otro lado del cuarto la música sonaba a todo volumen. Al abrirla se encontró con un pequeño niño de hebras oscuras, posiblemente de unos quince, catorce o trece años practicando.

Sus mejillas gorditas coloradas de un rojo vivo, con un camisón lleno de sudor y con una banda al rededor de su cabeza. En ese momento Taehyun fue flechado por el encanto de aquel niño.

— Sí. Creo que ya es hora. —dijo una vez decidido, agarrando aquel pingüino o más bien tratando de hacerlo.

[...]

— ¡Hyung! —grito el menor, corriendo hasta su enamorado siendo sujetado por la cintura al abrazarlo.

— Hola NingNing. Feliz quinto aniversario, bebé. —dijo después de besar los dulces labios de su novio.

— Feliz quinto aniversario, TaeTae. —río una vez que sintiera como su Hyung le besaba la frente, sonriendo tiernamente.

Ambos jóvenes se acercaron a una mesa y ordenaron el almuerzo. Kang pidió un capuchino acompañado de una mini tarta de moras mientras Huening ordeno un simple té y una porción de pastel de fresas.

𝘐𝘯𝘤𝘰𝘳𝘳𝘦𝘤𝘵 𝘛𝘺𝘶𝘯𝘯𝘪𝘯𝘨 // Taehyun X HueningkaiWhere stories live. Discover now