Durmiendo con el enemigo

Capítulo 4

Los días después de la discusión eran realmente extraños ,nunca había dormido en una casa que no fuera la mía y por los sucesos que habían acontecido recientemente tendría que estar aquí por un buen tiempo. Estuve varios días con un fortísimo dolor de cabeza y desde la ventana de la cual ahora era mi habitación veía a mi padre aprovecharse de todo lo sucedido,traía a sus amigotes para darse solo unos tragos, situación que siempre terminaba con todos tirados en el jardín con un gran nivel de alcohol en sangre,pareciendo que fueran yonquis con sobredosis en los metros de Madrid y los mismos gritando obscenidades cuales locos para que todo el barrio de enterara del fiestón que montaban,como si fueran adolescentes con sus primeras grandes borracheras, desde mi punto de vista ese que supuestamente era mi padre parecía el jefe de los patios de una prisión ya que pensaba que dando golpes y haciéndose el temerario se daría a respetar, mi madre, mi pobre madre teniendo que soportar eso.
En estos días no he ido a la escuela ,Nate le explicó a la directora de la escuela lo sucedido, es mejor que lo sepa ella nada más, porque muchos de los profesores de allí son unos cotillas que escogen el horario de almuerzo para reunirse y contarse todo al respecto de sus respectivos alumnos,una actitud a mi opinión no muy profesional,pero bueno había que entenderlos con esas vidas tan tristes que tenían su único entretenimiento era ese, aunque no me gustaría que supiesen lo ocurrido.
Un martes por la tarde Roselyn la madre de Nate nos contó que en la iglesia se estaba preparando una celebración para todos los padres de la comunidad y que muchos estaban ayudando para los preparativos de dicho evento,dándonos el dato que los hijos que quisieran hablar de sus padres para de esta forma hacerles un pequeño homenaje podrían hacerlo, en ese momento mi compañero me miró fijamente como si intentará descubrir que era lo que en cuestión de segundos mi mente estaría planeando, no es que fuera una idea maquiavélica pero yo tenía que hacerles saber a todos el tipo de hombre que era ese que cada domingo se sentaba en los bancos de ese lugar de paz como si fuera la más pura de las ovejas del rebaño, sin duda alguna mi padre iba a saber de todo lo que yo iba a ser capaz , sintiéndolo mucho por el sacerdote y las monjas pero está vez la casa de Dios era el único lugar donde podía contarles a todos lo verdad. Todos los días antes de la celebración planeaba a cada detalle todo lo que tendría que decir, una y otra vez, todos en la casa de mi compañero estaban algo confundidos con mi repentino interés en ese discurso que me tocaría decir, cada noche le pedía a todo lo que existiera y me pudiera ayudar que lo hiciera.
Llegó el domingo y mientras nos arreglamos para salir a la iglesia mi compañero me volvió a insistir sobre lo que tenía pensado hacer,diciéndome que él no era bobo y que sabía que yo tenía algo planeado, tan solo le dije que no se preocupara,podía decir que apesar de todas estas marcas en mi piel y mi aspecto con estas ropas anchas me veía muy bien. Cuando llegamos a la casa del Señor entramos y a quienes primeros vimos fue a mis progenitores pero en esta ocasión no intente acercarme para no provocar algún problema por lo menos no en este momento, la iglesia estaba bella, solo interrumpía esa visión mística de la misma las habladurías en voz baja de todos los feligreses observándome con unos lentes oscuros que cubrían mi rostro hinchado y mi brazo roto con una escayola puesta. El sacerdote al leer la palabara de Jesús en nuestro evangelio le dio la palabra a todos aquellos que según lo planeado rendirán un momento a dar agradecimiento a sus figuras paternas por su arduo labor en sus aprendizajes, en el momento en el que me tocaba hablar Nate me aguanto por el brazo pidiéndome que dejara todo como estaba el sabía que yo quería hacer algo que lo más seguro no iba a traer nada bueno como consecuencia, tan solo sonreí y le dije que estuviera tranquilo, me dirijo a camino al atril ya enfrente de el veía a todos sentados ansiosos como animales hambrientos por oír lo que tenía preparado, puedo decir que me encantaba ver la cara de ese animal asustado y nervioso aterrorizado cuando supo que le dedicaría unas de mis palabras.
Conté hasta tres, cerré los ojos por un segundo y comencé -Buenos días , en este precioso día en el que celebramos con júbilo el día de los padres ,esas personas que nos cuidan y además de darnos esa imagen masculina necesaria en nuestra formación para la vida nos brindan su amor...- tuve que hacer una pausa no podía negar que aún sentía un poco de miedo por todo lo que después de esto podía suceder pero ya no podía parar.
- Hoy les vengo hablar del mío uno que lejos de dar esa imagen de padre amoroso prefiere maltratar a su mujer como si de un insecto al cual puedes aplastar con la punta del zapato se tratara ,ese,ese es mi padre ,el que era sentado allí con ese disfraz de hombre de fe ,ese que no solamente abandona sus tareas como padre sino que maltrata a sus hijos -
En ese momento todas las miradas se dirigieron hacia el ,es increíble desde donde estaba podía sentir como su presión estallaba y el nudo de la corbata le apretaba cada ves más, en ese momento le dije a todos que me mirarán nuevamente y fue cuando me quite la camisa de mi cuerpo para que todos fueran testigos físicos de cada una de las marcas de las cuales mi cuerpo ahora era el dueño,solo podía sentir ese silencio ensordecedor que hacía justicia más que cualquier otra cosa,en ese momento abandoné el atril y me dirigí en esas condiciones hacia el coche de mis vecinos y ellos detrás de mí. Según Nate cuando ya iba saliendo dice q mi padre intento caerme atrás para terminar lo que había comenzado pero varios de los allí presentes lo detuvieron.
Por la noche solo podía sentir satisfacción de haber tenido la valentía de haberlo denunciado públicamente ante todos, Nate al igual que su familia me comprendieron aunque para ellos tenía que haberlo hecho en otro lugar. Mi compañero se me quedó mirando y con no más que una pequeña sonrisa me miró y se acostó a dormir diciendo que sabía ahora que yo era o muy loco o muy valiente por haber actuado así, tan solo puedo decir que esa noche pude dormir feliz.