💛PARA ENAMORARTE❤️ FREE Y SHU 💛 SEGUNDA TEMPORADA ❤️

||• CELO 🍂

Lo que sus ojos veían era a una persona quien daba todo en el escenario, sin detenerse ni un momento y hacer que sus fans disfrutarán cada segundo del concierto, en ese instante sintió que su corazón palpitaba muchas veces por segundo, disfrutaba ver a Free de la Hoya sobre el escenario.

Después de casi 2 horas, la gente aplaudió y se fue despejando del lugar muy feliz de ver a su Idol favorito. El albino no lo dudo y corrió chocando con la multitud para poder ir tras el escenario, no se, tal vez lo abrazaría y le diría lo que genial que estuvo.

La sonrisa de su rostro no desaparecía, pidió a los guardias que lo dejarán pasar al ser abogado del Idol, estos no lo dudaron y lo hicieron pasar.

El brillo de sus ojos se borró cuando vio a Free casi desplomarse en el piso, corrió rápidamente hacia él y antes de caerse lo tomo en brazos.

Al tocarlo sintió como una corriente eléctrica recorrió su cuerpo, así como hacerlo sonrojar y una llama fue encendida en su interior.

El staff así como su manager corrieron hacia él.

– Free, Vamos, ¿Que ocurre?– pregunto el albino preocupado

– ¿Que.. paso, con, los, fans? – respondió el rubio

– Actuaste como un profesional en todo momento, ellos no se dieron cuenta – dijo Valt preocupado

– sonrió– Eso, es bueno.

– Free, tenemos que llevarte a tu casa no estás en condiciones de caminar más

– Veo, que te, preocupas, por mi Shu –lo vio de reojo mientras sonreía

– Eres un idiota Free, salir al escenario como si estuvieras del todo bien

– Ellos, hacen el esfuerzo de venir, están más, ocupados que yo, y aún así vienen, no podía decepcionarlos

– Valt, lo llevaré a casa – el nombrado asintió y le dió la dirección

Con un cubrebocas y una chamarra Super grande pudieron subir a Free al auto, el albino encendió el motor y manejo lo más rápido posible.

– Free, no te duermas – le dijo Shu

– Si lo que, menos quiero, es dormir – advirtió aflojando su corbata

Después de unos minutos, llegaron hacia el hotel dejando el coche en el estacionamiento, una larga caminata hasta el elevador y otra hasta llegar a la habitación del rubio.

Abrió torpemente la puerta ya que el peso de Free hacia que sus manos entorpecieran. Al abrir la puerta y cerrarla las feromonas de Free se liberaron totalmente llenando la mante del albino.

Con un poco de nerviosismo en su mirada se detuvo unos segundos, sintió como una fuerte presencia lo arrinconaba hacia la pared, el rubio sostenía sus manos fuertemente hacia atrás.

– Free..

– ¿Quien es el padre de Akemi? – pronunció el rubio con su voz de alfa.

Está voz no se hacía presente en muchas ocasiones, solo la utilizaba para proteger a su Omega de cualquier peligro, pero esta vez era diferente.

– ¿Que?

– Dime la verdad, Shu, ¿Quien es el padre de Akemi?

– F-free, no estas en condiciones, estás mal y mañana se te olvidará todo

– Dímelo Shu

El albino iba a pronunciar más palabras de las que pudiera imaginar, se detuvo al sentir una punzada en el pecho, abrió los ojos alterado y nervioso.

– Free .. estás en Celo

– Eso no fue lo que te pregunté

– ¡¿Es que acaso no lo entiendes?! N-necesitas a tu Omega

– Y si lo tengo frente a mi ¿Que hago? ¿Lo ignoro, lo hago mío? ¿Que hago?

– Por favor Free... – cerro los ojos, una corriente eléctrica paso por su cuerpo al sentir una respiración ajena sobre su cuello – D-detente, si sigues...

– ¿Si sigo que?

– Si sigues no podré resistirme

El rubio al escuchar esas palabras y al sentir una aroma dulce en su entorno sonrió.

El Omega que estaba frente a él reaccionó a sus feromonas y adelanto su celo, El albino estaba en su límite.

– N-no entiendes que si sigues, el celo me controlara y haré locuras

– Haz locuras conmigo entonces – pronunció el rubio, apretaba los dientes por ya empezar, pero tenía que preguntar algo– ¿Firmó?

– S-si, firmó el acta de di-–

Sus labios se detuvieron en un segundo, labios contrarios lo besaban con ternura y pasión. ¿Hace cuánto que no sentía la sensación de amar de nuevo? ¿De besar a su pareja destinada? Hace mucho que no lo hacía.

No dudo, se soltó del agarre, llevo sus piernas a la cadera del rubio, este lo sostuvo para que no cayera.

A los pocos minutos el beso se volvió aún más apasionado, sus respiraciones chocaban al ritmo de escucharse del uno al otro.

Al separarse de dieron cuenta que el celo les dió ese pequeño empujón que necesitaban para estar juntos de nuevo, para besarse y entregarse de nueva cuenta como hace años.

Ahora el albino estaba sentado sobre el rubio, se besaron de nuevo.

La ropa fue tirada por algún lugar de la habitación.

El lubricante que producía el Omega ayudo a qué estuviera dilatado y listo para lo que seguía. No obstante antes su cuello y clavícula fue lleno de besos y lamidas por parte del alfa, sin dejar ni un lugar.

Tocar un cuerpo ajeno al suyo, besar labios ajenos, era todo lo que pedía, pero solo de una persona, esa persona que ahora lo besaba con intensidad.

El miembro del alfa se adentro al Omega, este en sus ojos se podía ver pequeños corazones en sus pupilas, las expresiones que hacia y los sonidos que soltaba lo "prendían" más, quería hacerlo de todas las formas posibles, de todas las posiciones.

No podía evitar soltar aquellos gemidos, pronunciar el nombre de su alfa lo era todo en ese momento.

Soltó un pequeño gemido más alto cuando sintió unos dientes encajarse en su cuello, ahora le pertenecía al rubio, ¿Se molestó? En ningún momento, le fascinó la idea de ser solo de Free de la Hoya.

Su mente se nublo por completo, el placer que le brindaba el rubio lo hacía desear más, quería saber a qué más podía llegar, pero sabía que no resistiría si pedía más, "Al diablo con la cordura" se dijo en la mente.

– Se que, tienes, más que eso – pronunció el albino en el oído del rubio

Este sonrió saboreando sus labios, elevó la cadera del Omega haciendo que se adentrará más. Ahora sentía que estaba en las nubes.

Después de unos minutos más de ya no poder, con un fuerte grito elevado por parte de los dos llegaron al climax, el alfa ennudando al Omega.

El dolor era algo soportable, pero pequeñas lágrimas de sus ojos salieron.

– E-eres tu... – detuvo su cuerpo colocando sus manos en el pecho del rubio– T-tu eres el padre de Akemi

Los ojos de rubio se abrieron en modo sorpresa, sonrió besando los labios del albino atrayendolo hacia él.

CONTINUARÁ

SI ME EQUIVOQUÉ EN ALGUNA PALABRA DISCÚLPENME ;-;

OMG ya no había escrito esto :v