⸝⸝' ꒳ '⸝⸝ ¡ papá quiere amor ! ⸝⸝' ꒳ '⸝⸝ ˗ˋˏ♡ ˎˊ˗ yoriichi x sumiyoshi ˋˏ♡ ˎˊ˗

𝟯

༺♥︎༻

—¡aba wa, ba baa!

—¿entonces contestas tú o yo? —le preguntó finalmente, al ver cómo tanjirou aplaudía al tono de llamada que el padre había dejado caer.

en la hora y media que el omega seguía encerrado en la habitación extra de su casa, su teléfono celular no había emitido ni un solo sonido, y no veía correcto husmear en el aparato sin el permiso del omega.

—“suyako”, ¿es tu madre? —le pregunta, antes de contestar la llamada.

y lo primero que escucha es una voz chillona riendo.

—¡yoshi, lo siento mucho! mi auto tuvo un fallo y el mecánico tardó una hora en venir, ¡apenas y pude arrancar por las prisas! y mi teléfono se descargó; lo puse a cargar desde hace rato y me quedé dormida en la sala, ¡pero ya llegué!, ¿dónde es exactamente? porque creo que estoy en la calle correcta pero di varias vueltas ya y...

yoriichi salió de su casa con tanjirou en su brazo derecho como si se tratara de un saco. en su mano izquierda tenía el teléfono. entre toda la plática de la joven, yoriichi tuvo tiempo de bajar las escaleras, abrir la puerta y salir, viendo a una muchacha hablando sin parar justo afuera de su casa.

—¿tú eres suyako? —preguntó, asustando a la joven.

ella lo miró, guardando su teléfono un poco asustada.

—¿quién es us...? ¡tanjirou!

—¡ba baa!

suyako se acercó al mayor, tomando a tanjirou en brazos y cargándolo con cariño.

—¡hola, pequeño! ¿dónde está tu papá? —le preguntó sin esperar una respuesta de él. dirigió su mirada al hombre con corbata floja y olió su aroma.

parecía una mezcla, pero resaltaba la vainilla.

—uh... ¿dónde está sumiyoshi, el padre de este bebé?

yoriichi dio paso a su casa.

—entró en celo, se encuen...

—¡¿celo?!

y suyako entró sin dudar, oliendo la casa para encontrar más rápido a su amigo.

—está en la habitación de arriba, a la dere...

—ten a tanjirou, ¡no le hagas daño! —le volvió a interrumpir, corriendo escaleras arriba para encontrar a sumiyoshi acostado en una cama, jadeando levemente.

suyako soltó un suspiro, acercándose para inspeccionarlo y ver si el señor alfa extraño no le había hecho algún mal.

—ay, yoshi... —susurró, palmeando la cabeza del padre.

¿qué debía hacer?

sumiyoshi no podía quedarse con ese alfa, pero no recordaba dónde estaba el departamento de sumiyoshi. y no estaba segura si su auto sobrevivía el viaje, menos ella con un omega en celo y un bebé que no puede estar cerca de él por su aroma.