ʙʟɪɴᴅɪɴɢ ʟɪɢʜᴛꜱ; ʜᴀᴡᴋ & ᴅᴇᴍᴇᴛʀɪ

27; ¿Quieres ayudarme a ganar ésto?

—Estás tan loco por Demetri como él por ti, deberías darte cuenta de eso de una jodida vez por todas.— Dijo Miguel mientras comía un puré de papas.

—Pero... No quiero que me boten de Cobra kai.— Dijo Hawk jugando con una manzana, la rodaba a una distancia corta entre sus manos.

—¿Te parece que es un buen lugar donde tu sensei criticaría a la persona que amas?— Preguntó Miguel ya un poco fastidiado de aquella situación de su amigo, y terminó su comida.
—Tienes dieciocho años, sé feliz.— El moreno tomó la bandeja para ir a tirar la basura, pero antes miró a Hawk un momento. —Es Kreese, está en tu cabeza... El sensei Johnny no es así, deberías considerar la idea de unirte a Colmillo de águila.— Se alejó.

Hawk suspiró y guardó la manzana en su mochila, las palabras de Miguel querían entrarle, pero aún le costaba.
Salió de la cafetería y se dirigió al baño, para su suerte, Demetri estaba ahí, pero no quería molestarlo, así que solo fue a hacer sus necesidades.

Demetri esperó a que Hawk fuera al lavabo a lavarse las manos y lo observó a través del espejo.

Hawk sintió la mirada del castaño y le regaló una sonrisa. —¿Me parezco a alguien o me miras porque te gusto?

Demetri no pudo evitar reír. —Quizá sean ambas.

El peliteñido se sintió más confiado y se acercó a abrazar al castaño por detrás. —Te extraño, mi amor.— Le besó el hombro sobre su camisa y después subió a darle besitos en el cuello. —Lamento lo de ese día, te juro que no sabía que en realidad te estaba lastimando, fui un tonto al no medir mi fuerza.— Le besó la mejilla, dándose cuenta de que Demetri estaba algo inclinado, ya que no le había sido difícil alcanzarlo.

—Y-Yo...— A Demetri se le fue la voz y cerró sus ojos. —También te extraño, bebé...— Soltó un suspiro de gusto, no podía evitar creer en las palabras de Hawk, se oían tan sinceras.
—Traigo puesta la ropa interior que me regalaste...— Comentó y se mordió el labio con picardía.

—¿De verdad?— Preguntó Hawk y con sus dedos tiró un poco del pantalón de Demetri para ver dentro y era cierto, el castaño traía aquellos boxers rosas de corazones.
—Me encantas, Dem.— Lo volteó y lo besó, lo tomó de las piernas y lo sentó sobre el lavabo.

—Te amo demasiado.— Susurró Demetri sobre los labios de Hawk y le atrapó la cintura entre sus piernas mientras también lo abrazaba por el cuello.

Hawk metió sus manos en la camisa del castaño y acarició su espalda.

—Follame...— Dijo Demetri con voz de súplica y bajó su mano para apretar el miembro de Hawk sobre la ropa.

Hawk gimió y mordió el labio inferior de Demetri.

La puerta del baño se abrió, dejando ver a un Miguel traumado.
—Ehh...

Demetri y Hawk se separaron rápidamente y ambos rieron de forma nerviosa.

—L-Lo...— Miguel olvidó hablar y rió igual de nervioso que sus amigos.
—Lo lamento, pero tienen suerte de que los ví yo y no fue otra persona, tengan cuidado.— Dijo el moreno para después casi salir corriendo.

—Hemos traumado a nuestro hijo.— Hawk bromeó y abrazó a Demetri, quien estaba muy sonrojado.

—Pobre Miguel.— Dijo Demetri y ocultó su rostro en el cuello de su amor.

🐍

—¿De verdad es necesario?— Cuestionó Hawk quitándose el Karategi, no le daba nada de vergüenza.

—Sí que lo es, ese grupo de nenitas se creen el mejor dojo de la ciudad.— Dijo Tory cruzada de brazos y observó algunos hematomas en el cuerpo de Hawk. —¿Esos son por entrenar o andas haciendo otras cosas?— Preguntó burlona.