-Perdón solo venía a por un poco de agua – Sofía está un poco incómoda pero asiente.

Yo sin embargo siento la mirada de Cameron, le miro alzando mis cejas y el me mira picaron, me dan ganas de volver a pegarle.

-Disfruten el desayuno – dice Cameron riéndose un poco y le doy en la espalda.

Sofía se sienta sin despegar la mirada de mí, joder hasta recién despertada se ve hermosa, todo en ella es perfecto.

Cojo los dos platos colocando uno a su lado y el otro al mío quedándome cerca de ella.

-¿Qué tal tu herida? – me pregunta cuando empieza a comer las tortitas.

-Bien no me duele la tengo mejor, oye Sofía ya se que ayer por lo que pasó no te pude llevar al cine pero si quieres podemos ir hoy – veo como se le ilumina más su rostro apareciendo un brillo especial es sus ojos, si esa idea le encanta al parecer, no hace falta ni que me lo diga la conozco perfectamente.

-Me parece una idea genial, ¿pero estas seguro? – dice señalando la zona donde tengo el disparo.

-No te preocupes por mi – comienzo a comer yo también, ella asiente.

Desayunamos tranquilos, al parecer no era tan mal cocinero porque Sofía me repitió varias veces que la encanto así que estaba más que contento por eso.

-Ahora toca recoger – me dice levantandose para dirigirse hacia la encimera.

-Recojo yo que para eso manche – la digo porque no hace falta que ella lo haga.

-Oh vamos Harry déjate ayudar – dice ella sin hacerme caso recogiendo.

Sonrió cuando se me ocurre hacerle una broma que por cierto hace mucho no la hago nada.

Saco la harina disimuladamente sin que ella me vea, la doy un poco la espalda y espero el mejor momento, cuando ella se gira a mi dirección me doy la vuelta rápido estampando un puñado de harina en su cara.

Comienzo a reír fuerte cuando ella abre su boca impresionada y pasar sus dedos por sus ojos que también están llenos de harina.

-¡HARRY! – dice con un tono más alto provocando que me ría aún más.

Ella suelta un grito abriendo sus ojos, aún estando llena de harina sigue estando igual de preciosa.

Corre a por el paquete de harina cogiendo un poco, comienzo a correr porque se lo que me espera.

Me recuerda a cuando éramos pequeños hacia una de las mías y ella acababa corriendo detrás de mi.

Corro rodeando la mesa mientras no paro de reír estas cosas me quitan por completo los dolores del disparo.

-¡Te voy a matar! – me amenaza.

Me tira un poco desde una distancia solo manchándome un poco la camiseta.

-Eres malísima – la pico un poco más yendo rápido a por más harina.

Corro cogiendola por la cintura cuando la atrapó esparciendo más por su cara y pelo ella suelta otro grito y consigue mancharme de harina también.

Sacudo mi cara porque no veo ni una mierda cuando siento como me tira harina.

Ella se lleva las manos a la cara cuando me ve mi aspecto.

-Vas a morir – la grito volviendo a por ella, suelta una carcajada cuando corre.

La vuelvo a coger antes de que se salga de la cocina, suelta un chillido la doy la vuelta restregando mi mejilla por su cara.

Mi Perdición II Parte De Un Nuevo ComienzoWhere stories live. Discover now