˗ˏˋ Play pretend (Spy x Sniper) ˎˊ˗

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Ganándole al sol cada mañana, haciendo ese potente café negro y recargando cada bala, el RED Sniper hacía su rutina. Podría decirse que era monótono, pero con un orden estricto no podía haber error alguno.

Preparando cada detalle anticipadamente ya tenía todo listo de antemano.

Pasado ya cierto tiempo había empezado el enfrentamiento, pero sorpresivamente oyó un crujido detrás suyo.

— Hey⁓

Se le cayó el alma a los pies ¡Era un spy! ¿Desde cuando llegaba tan temprano?

Agarró el machete que tenía a su lado y, en un ataque de nervios, procedió a atacar torpemente.

Creyó haber tenido asegurada la victoria de aquel duelo, cuando de repente su contrario lo tomó del brazo y lo inmovilizó rápidamente. Parecía ser increíblemente ágil con ambas manos...

— Ah... — Analizó este en un murmuro — No sabía que eras zurdo, me hubieras sacado ventaja fácilmente ¡Suerte la tuya!

— Dejá de hablar y terminá con esto...

Observó discretamente el rifle a su lado, pero ya no tenía oportunidad.

— Eh, no — Contestó — Y te soltaría, pero sé perfectamente que lo primero que harías es disparar, después de todo es a lo que venís.

No podía creer lo que le decía ¿Será una distracción? ¡Seguramente! Nunca se puede confiar completamente en un spy.

— Ahora — Soltó el cuchillo y bajó el revólver totalmente desarmado — Escuchame un segundito.

Aprovechando el momento intentó escaparse, pero sin triunfo.

— Bueno, si así estamos no me cuesta nada buscar una cuerda — Bromeó al respecto, pero este seguía sin confiar ni una palabra — Estoy harto de todo esto, ¿De qué sirve ganar dinero si al final del día puedo estar muerto? Algo inútil...

— ¿Qué querés? — Bufó — Si me querías matar lo tenés en bandeja de plata.

— ¡No, imbécil! — Rodó la mirada — Como ya lo has dicho pude haberlo hecho y aún puedo, pero no quiero hacerlo.

— Dejá el palabrerío — Cortó la conversación.

— Que poca confianza, ¿Eh? — Sacó un cigarrillo — Y sí, yo también me hubiera volado la cabeza de un disparo.

— ¿Y qué falta? ¿Venir acá todos los días? No te creo nada de esto.

— Si es lo que querés podría hacerlo; venir todos los días acá, inmovilizarte y hablarte de lo muy harto que me tiene... — Quedó en silencio un momento — Hmm, nah. Dejalo así.

Miró de reojo observando como este sacaba un 'Zippo' para poder encender el cigarrillo.

— Olvidalo — Retomó — Sí lo haré. De esa manera me voy a asegurar de que me ganés confianza.

Hubo un corto silencio donde se podía escuchar al tabaco consumiéndose.

— Nos vemos mañana — Lo soltó este finalmente, ya parecieran milenios — Te digo, soy hombre de palabra.

Rápidamente, luego de liberar la fuerza que lo tenía preso, desapareció dejando la habitación en puro silencio.