Domar nuestros demonios es la cosa más difícil en el transcurso de la vida, siempre estan tratando de desbalancear tu paz, llegan como intrusos sedientos y con hambre buscando la forma de llamar tu atención, cada día tratando de hablarte al oido buscando oscurecer tus primaveras, pero..¿Que pasa si un día dejas de luchar con ellos y tratas de domesticarlos?¿Se volveran tus amigos? ¿O te convertiras en uno de ellos?