3000 Miles. (Keaton & _____) Terminada.

Capítulo 29.

Antes de empezar quiero dedicar el capítulo a Aguszubi :)

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- Señorita, tenemos sus resultados. -El doctor entró en la habitación con una carpeta entre sus manos.

Keaton se puso de pie a mi lado y agarró mi mano.

- Tendrá que tener bastante reposo. -Comenzó a hablar y asentí.- En ese año que ha estado secuestrada, dos veces se quedó embarazada pero abortó naturalmente. Le hemos sacado los fetos que tenía en el útero y está limpia por dentro de todas las heridas posibles que pudiera tener. -Miró la carpeta y chasqueo la lengua.- En unos meses todo volverá a la normalidad. Podrá salir de aquí en dos días.

El doctor se marchó dejándonos solos y boquiabiertos.

- He estado embarazada dos veces de ese maldito....-Callé antes de alterarme de nuevo.

- Hey, no te preocupes... Ese hombre ya no podrá volver a por ti, no podrá volver a hacerte daño. Está muerto, ¿de acuerdo? -Dijo agarrando mi cara entre sus manos.

- ¿Cómo conseguiste que los policías te dejasen coger su arma? -Pregunté confusa.

- Les dije que si no lo hacían, me quejaría de sus servicios porque cuando empezamos a buscarte se fueron a tomar un café. -Se encogió de hombros y besó mi cabeza.- En dos días saldremos de aquí y volveremos a nuestra vida normal...

- Sí....¿Has llamado a todos? -Pregunté y él asintió.

- Vendrán más tarde..-Dijo sonriendo.- Lucky y K lloraban mucho....

- Tengo ganas de verlos...-Sonreí de lado.- Oye Keaton....

- ¿Sí? -Me miró como sólo él podía hacerlo.

- ¿Quién era esa pelirroja? -Pregunté deseando que no fuese una amante.

- Una fan que quiso ayudarme...Estuvo varios días conmigo ayudándome... -Se encogió de hombros.

- Dale las gracias de mi parte si vuelves a verla. -Sonreí y él asintió.

[...] Tres días después.

- Cariño, ¿qué tal lo llevas? -Pregunto Laraine, mi suegra.

- Bien, las pequeñas heridas ya están casi curadas... Pero no puedo moverme mucho y Keaton me está llevando en brazos todo el día de un sitio a otro. -Reí y junté las manos nerviosa.

- Me alegro mucho de que estés bien. -Me abrazó sin fuerza y sonreí.

Mi madre nos hizo comida a los dos para que Keaton no tuviera que pringar siempre y se lo agradecimos.

Los chicos y chicas vinieron a visitarnos y a pasar un rato con nosotros, fue genial, la verdad.

Cada vez me iba sintiendo mejor, más a gusto, más yo, más en casa... Poco a poco me acordaba menos del incidente, así lo llamo yo. Estaba intentando borrarlo de mi vida para siempre y gracias a ellos lo conseguiría.

Son increíbles todos.

- Keaton... Ven aquí y abrázame... -Dije desde el sofá. Necesitaba sus abrazos, sus mimos, sus caricias, lo necesitaba a él cerca. Se tumbó conmigo en el sofá y me abrazó suavemente.- Así me gusta.

- Te quiero. -Dijo y sonreí besando sus labios.

- Te amo. -Dije separándome de él y sonriendo a sus ojos.

- Prometo que nunca, nunca más volveré a dejarte ir. Prometo quererte siempre. -Me miró a los ojos mientras pronunciaba cada palabra.- Prometo que nunca te haré daño. Prometo que eres lo mejor que me ha pasado. Y sobretodo, te prometo, darte todo lo que te mereces, necesites y quieras.

- Eres todo lo que siempre he querido, Keats. -Admití.- Te adoro.

Vimos una película y después nos dormimos.