ᴅʀᴇᴀᴍꜱ ¿ᴜɴᴀ ᴡᴇᴀꜱʟᴇʏ ʏ ᴜɴ ᴍᴀʟꜰᴏʏ? [ᴄᴏᴍᴘʟᴇᴛᴀ]

Capítulo 67

[Narrador omnisciente]

Las semanas no iban del todo bien para la pelirroja, era claro que todo Hogwarts ya sabía que se había ido con Lizzie a vivir, "abandonando a su familia". Eran pocos los compañeros de casa que la apoyaban, pues la mayoría la veía con rabia.

Era un sábado por la mañana, muy temprano para ser exactos. No era costumbre de Elline madrugar, pero ahora que Snape impartía la materia de DCLAO debía estudiar más que nunca.

-Esto es agotador...-Se dijo para sí misma dejando caer su cabeza en los libros.

Elline llevaba ahí dos horas, no había desayunado nada y sus ojeras eran muy notorias.

-Hey-El chirrido de la silla recorriendose sacó a Elline de su trance-Ya llevas aquí mucho tiempo, deberías descansar-Aquella persona puso su codo en la mesa, posando su cabeza en su mano-¿Ahora no hablas?

No era que ella no quisiera hablar, le presencia de él la intimidaba, la asustaba.

-Vete-Fue lo único que pudo salir de sus labios.

-¿No me quieres cerca?-Se recorrió más a ella-¿Por qué, Elline?

-Conan, aléjate. Vete. Por favor...

-Quiere que me ruegues así... Me exita.

Lestrange se recorrió más a ella, poniendo su nariz en el cuello de Elline.

-Basta, déjame, Conan, déjame-Se quejó. La biblioteca estaba vacía, nadie podía oírla.

Un murmullo salió de los labios del azabache y de repente las persianas estaban cerradas y la puerta bloqueada.

-¡No!-Elline empujó a Conan, saliendo de la silla y sacando su varita.

-Expelliarmus-la varita de Elline cayó, haciendo que ella estuviera desarmada y no pudiera hacer nada.

-Conan... No hagas esto-Dijo con un hilo de voz-Por favor, no lo hagas.

-Te lo dije Elline... Tarde o temprano serías mía.

El cuerpo de Elline había chocado con una estantería de libros, no había escapatoria, estaba atrapada por él.

-Que bien hueles...-Murmuró en su cabello.

Lestrange fue dejando besos por su mandíbula, bajando a su cuello. Elline se forcejeaba, pataleaba e insultaba. Su rostro ya estaba hecho un caos de lágrimas.

-¡No!-Se quejaba repetidas veces, tratando de evitar que él la tocara.

Sus manos empezaron a bajar por su cuerpo, masajeando sus pechos, tocando sus caderas.

-Para...-Suplicó-Por favor, sólo para.

-¡Cállate!-Pegó una bofetada en el rostro de Elline-Mantente callada... Esto será rápido y lo disfrutarás si te quedas callada.