𝑶𝑴𝑬𝑮𝑨

V

"Dos lunas superiores!"

Ambos mirarón arriba suyo, tanto el albino como el rubio no lograban procesar lo que el cuervo había dicho

"SANTA MADRE, POR QUE, JUSTO AHORA TIENE QUE LLEGAR ESE SACO DE PLUMAS!?" Penso con nerviosismo el alfa, lo que menos queria en estos momento era que Zenitsu se alterara

–D-dos...que?–el rubio estaba ensimismado en los pensamientos que su mente creaba, cosa que no era nada favorable, con la mirada perdida, su mundo se caía a pedazos, adoraba a Tanjiro, el fue su primer amigo desde que se hizo cazador, luego llego el pedazo de jamón andante.

El miedo lo estaba consumiendo lentamente "no, no, no, no! Si tan solo topandonos con una luna superior, incluso estando en la compañia de un pilar, siempre paledeciamos, ¿habra algún pilar con el? Maldición! Y que lunas superiores són!? 1, 2...la 3 quizas...?"su mente era un desastre, sin darse cuenta, su mano ya se posaba encima de la otra, jalando y rasgando la piel fuertemente, dejando marcas rojas a su paso

–ZENITSU!–grito el alfa, al fin pudo sacarlo de su trance–Respira, por favor–miro suplicante al menor, preocupado por su estado, el rubio lo observo detenidamente, mientras trataba de calmarse, ordenar sus pensamientos de mejor forma y calmar las fuertes emociones, de desesperación, miedo y temor.

Se dio cuenta de que una mirada se posaba encima suyo, asi que elevo su vista, y ahora quedo ensimismado en lo que veia, el alfa que estaba en frente suyo le sonreia con calidez, aun que se notaba un poco de nerviosismo en su expresión–Uzui...–el no era el unico que estaba desesperado, eso era mas que claro y no se había dado cuenta

Uzui trato de ensanchar su sonrisa, y no separo su mirada de Zenitsu en ningun momento, luego extendio sus brazos en dirección al omega–Tranquilo, todo va estar bien–el ojos dorados se cuentionaba si realmente debia correr hacia sus brazos y ser envuelto en la calidez del alfa, pero antes de que pudiera tomar una decición, ya estaba en siendo envuelto en un calido abrazo.

La calidez ajena, era tan agradable y lograba tranquilizarlo, por un momento penso que podria estar asi por siempre y nunca se cansaria de ese tacto tan ligero pero tan encantador al mismo tiempo, si antes estaba nervioso ahora se encontraba calmado tranquilo y una paz comenzaba a llenarlo.

Extendio su brazos para enredarlos en el cuello del alfa, correspondiendo asi el abrazo del albino, y llenando de alegria al mayor, que le correspondiera un abrazo al alfa de una forma tan dulce era señal de que el peliplata estaba haciendo las cosas relativamente bien.

El alfa solo regalaba pequeñas caricias a la cabecita del rubio, tocando suavemente su cabello, a veces acomodandolo y otras desordenando el cabello ajeno, para asi tener mas motivos para tocar los suaves mechones dorados, y al omega no le molestaba en lo mas minimo, lo unico que le importaba era que el contrario no se separase de el.

–Se ven tan lindos, verdad? Son divinos, tu que opinas? Exijo ser la tia de la futura bendición–comento emocionada una pelinegra, que observaba todo oculta desde un rosal

–Creo que no es bueno espiar a las parejas señorita kocho–comento seca en sus palabras

–Crio qui nu is bieni espiar a lis parijas, Bueno! En algo tienes razón, y es que esos dos pronto estaran juntos!–dijo emocionada, uzui estaba progresando, y eso le llenaba de alegria–Ya es hora de irnos kanao–

–Claro, vamonos–mostro una suave sonrisa, y luego partio junto a Shinobu, en el fondo le alegraba saber que los amigos de tanjiro eran felices

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–Ya estas mas calmadito?–cuestiono el albino, mientras seguia dando mimos al pequeño rubio