I n e s p e r a d o // Toji Fushiguro x lectora

"9"

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Mientras te sumergías en tus pensamientos, ambos esperaban el auto que el valet se encargaría de traer.

- Sube.- Te dio un pequeño empujón dándote a entender que caminarás al auto.

El chico abrió la puerta del copiloto, agradeciste y entraste al auto.

Toji hizo lo mismo, y pronto salieron en busca de tiendas departamentales.

En el auto se sentía un enorme silencio, a diferencia de otras veces, el silencio era incómodo, bastante incómodo.

Trataste de calmar un poco tu enojo y reencor que sentías en ese momento con el, así que tomaste tu celular que ya hacía rato no veías.

Y notaste que tenías muchos mensajes de Kida.

Kida♡

Martes:
Espero y la estés pasando bien
en tu viaje, te espero para ir por
ese café, te extraño linda.

Hoy:
Veo que no te llegan mis mensajes:(
supongo que estarás ocupada.
Pero que tengas un lindo día,
hoy pasé por el muelle,
y te recordé, a ti y a tus lindos
ojos♡.

Cuídate linda, te espero con ansias.

No pudiste evitar sonreír al leer los mensajes, era tan lindo, tan atento, no se merecía que jugaras con el.

De pronto una culpa te invadió completamente, de pronto los celos que te hacía sentir Toji, se sintieron como piquetes en el pecho al recordar a Kida, en como habías tenido un desliz con Toji.

Que habian dormido juntos, en fin, todo lo que estaba pasando en ese momento, se sintió como una profunda pasades en todo tu cuerpo.

No tenías nada con Kida, aún.

Pero sentías como si estuvieras siendo infiel, y no te gustaba esa sensación.

Decidiste comenzar a marcar tu línea con Toji, y no permitir nada que no fuera por lo que habías ido.

Pero es que Toji te hacía olvidar al mundo entero.

No podías simplemente poner tu distancia, tenías que dejar de verlo para que ese sentimiento ya no siguiera creciendo.

Estabas convencida de que Kida era buen novio, muy detallista y lindo, y Toji complemente lo contrario, era fácil elegí, ¿verdad?.

Saliste de tus pensamientos, volteando a ver de nuevo la pantalla de tu teléfono, con los lindos mensajes de Kida, e inconscientemente, una sonrisa volvió a aparecer en tu rostro.

- ¿Ahora estás riendo?, te digo que eres tan ridícula.- Dijo Toji observando como sonreías a la pantalla de tu teléfono.

- Como sea.- Dejaste de sonreír y guardaste el teléfono en tu bolsillo, después le responderás a Kida.

- ¿Por qué sonreías?

- Nada que deba importarte.

- Tienes razón, no me importa un carajo.

De nuevo un silencio pesado se apoderó del auto, pero está vez estabas segura de la actitud que querías tomar con el, y dejarle en claro que solo ibas a hacer tu trabajo, nada más que eso.

Observabas la enorme y colorida ciudad, pero no sentías esa emoción de ver los enormes edificios, estabas ajena a ese sentimiento por la situación de Toji, así que solo te limitaste a observar.