Harry demostraba así lo que no se atrevía a decir, eso pensaba yo esperaba no equivocarme.

-Harry - me separó poniendo mi mano sobre su pecho.

El me mira esperando a que continúe.

-No puedes hacerme esto otra vez – el levanta la deja dejándome claro que no pilla por donde quiero ir.

-¿Qué pasa Sofía? ¿No quieres hacerlo? – muerdo mi mejilla interna porque no era eso, al contrario tenía muchas ganas y quería pero Harry me confunde de mil maneras y ya no se que hacer.

-No es eso, me confundes – le digo por fin.

El se pasa la mano por su pelo rodando los ojos para mirarme de nuevo.

-Siento decirte que no soy tu chico perfecto que tanto buscabas – le arrancaría los pelos ahora mismo.

¡AHHHHH!

-Si que lo eres solo tienes un error y es que no quieres expresar tus sentimientos para que nadie te dañe – me arme de valor en decírselo de una vez porque realmente lo pensaba.

-Tonterías – giro mi cabeza levantando ambas cejas.

-Harry - le avisó.

-Te rayas demasiado – vuelve a ponerse esa armadura de hierro.

-Y a ti te cuesta demasiado expresarte – digo sabiendo que tengo la razón.

-Sofía

-Harry

-No te vale con que te diga me gustas – hago un puchero.

-Entonces retiro lo dicho que estoy enamorada de ti – eso le sorprende pero se ríe acercándose para besarme.

Le sigo el beso acabando el encima de mí.

-Me gustas Sofía y mucho demasiado para mí gusto – le vuelvo a golpear en el hombro mientras río.

-Tu también me gustas demasiado – le digo un poco tímida.

El me deja besos en el cuello para comenzar a hacerme cosquillas.

Empiezo a reír como loca por culpa de sus cosquillas.

-Para Harry nos van a regañar – no quería buscarme más problemas.

No me hace caso y sigue haciéndome cosquillas sin parar.

Cojo como puedo la cara de Harry besandolo y solo así para.

Nuestros cuerpos se juntan sintiendo su miembro listo para la acción, levanto mi cabeza cuando sus besos pasan a mi cuello.

El sabe realmente como besar mejor que nadie.

Me empiezo a dejar llevar por sus besos húmedos que van bajando por mi clavícula, sus manos se cuelan por detrás de mi espalda quitándome el sujetador.

Me quedo expuesta ante el mientras que sigue con sus besos hasta llegar a uno de mis pechos que un segundo después ataca tirando de un pezón con sus labios, gimo porque es una sensación rara pero placentera.

Atacó el otro pezón mientras que tiraba de su pelo.

Sus labios subieron de nuevo a mis labios sin darme cuanta cuando se quito su pantalón.

Los besos siguieron hasta que nuestra poca ropa que teníamos desaparecieron por el suelo.

Acaricie su espalda besándolo poco a poco note como entraba en mí.

Gemí sus manos se unieron con las mías poniéndolas en la almohada mientras me enviste despacio.

Nuestras respiraciones cada vez eran más aceleradas, pero yo sentía este momento especial, diferentes a la otra, tal vez me estaba volviendo más loca la cabeza, ilusionándome cada vez más para luego hacerme más daño aún.

Mi Perdición II Parte De Un Nuevo ComienzoKde žijí příběhy. Začni objevovat