Olivia se metió en la cama e intentó dormir pero el solo pensar en que Noah estaba en la habitación del lado la ponía nerviosa. Se durmió pensando en como Noah habría podido dormir en la cama con ella, deseó habérselo dicho. Se imaginó como él llenaría su pequeñísima cama y como la abrazaría toda la noche.

El olor a comida la despertó. Olía a pancakes. Se levantó de un salto y vio¡ que ya era de día, revisó la hora y se dio cuenta que aún no era hora de levantarse. Corrió a la cocina, no había nada más delicioso que los pancakes de Colette. Se preguntó porque estaría haciendo pancakes un martes en la mañana.

La imagen que se encontró la dejó con la boca abierta. Noah estaba frente al fogón haciendo pancakes, Lauren y Colette estaban sentadas en la barra de la cocina riéndose de un chiste de Noah.

¿Colette desayunando pancakes? ¿Lauren despierta antes de las 11 de la mañana? Se preguntó si seguiría dormida, porque eso solo pasaba en sus sueños.

-¿Buenos días?- saludó Olivia.

-Buenos días, burbujita. Siéntate que ya te paso tu desayuno- le dijo Noah.

-¿Eh?- preguntó Olivia con una mueca.

-No sabía que Ken tenía dotes para hacer unos deliciosos pancakes- dijo Lauren lamiendo su plato- son mejores incluso que los de Michael- le dijo guiñándole un ojo a Noah. Este sonrió en respuesta.

Eso era mucho decir ya que últimamente Lauren amaba todo lo que Michael hacía.

-Es verdad- dijo Colette llevándose el tenedor educadamente a la boca- Están buenísimos- Colette se relamió los labios.

¿Qué rayos estaba sucediendo?

-Ah...

Olivia se sentó en la silla y Noah le puso un plato de pancakes enfrente, la verdad es que tenía muy buena pinta. Olivia se llevó un poco a la boca y masticó con lentitud. Estaban deliciosos, mejores que los de su abuela.

-Guau- dijo Olivia antes de llevarse otro a la boca.

-¿Deliciosos, verdad?

-Un orgasmo gustativo ¿No?- dijo Lauren tan asertiva como siempre.

-¿Qué?- logró decir Olivia atorándose.

-Eso ni siquiera exis...- comenzó Colette

-No se si eso existe pero ella tiene razón- dijo Noah señalando a Lauren con la espátula- Mi comida es espectacular.

-Creía que no cocinabas- dijo Olivia antes de beber un poco de jugo de naranja para que lo que se le había atorado siguiera su rumbo natural.

-Soy rico, no estúpido.

-¿Eres?- preguntó Lauren con repentino interés en Noah.

-Ya no lo soy- anunció Noah- Pero lo bueno es que no volveré a ver al idiota de mi padre y ahora tengo a tres asombrosas nuevas compañeras de piso.

Colette entrecerró los ojos y le dio una mala mirada.

-Temporales- añadió Noah.

Olivia lo miró con atención. Su sonrisa demostraba felicidad, pero sus ojos no llegaban a sonreír.

-Iré a correr- anunció Colette rondando los ojos- Si nos preparas ese desayuno todos los días voy a volverme obesa.

-Pues ve a correr, porque ese es el plan- dijo Noah guiñándole un ojo.

Colette salió por a puerta principal con su conjunto deportivo.

-Iré a recuperar mis horas de sueño- anunció Lauren levantándose de la silla.

Té para tres (TERMINADA)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora