Mini relatos eróticos

La Pesca de Fresas

"La fruta no siempre tiene que ser prohibida"

Noche calurosa, dormía profundamente hasta que me desveló el roce de sus manos en mi cara.

Al parecer tenía una pesadilla por que no paraba de sudar y moverme de un lado a otro, pero no era una pesadilla, sino un sueño, un sueño bastante humedo...

Noches, de esas que te dan por buscar páginas como esta para saciar un rato tu sed.
[sí, seamos realistas, esto es como ver porno pero mejor]

Hoy me apetece escribir sobre el tema que a todas les cuesta tanto reconocer.

Curioso, pasar más de un mes en casa ¿Sin contacto físicos?
A todos nos afecta esto un poquito.
[y el que te diga que no se ha tocado esta cuarentena, miente].

La masturbación, no es solo masculina nosotras también nos masturbamos, nos excitamos pensando en culos, tetas, lo que cada una se quiera imaginar, o incluso recurrimos a libros eróticos.
¿Tanto cuesta reconocerlo? "pues si- yo me toco, y me encanta".

"madrugada del 20 de agosto"

Ellos dormían en casas paralelas y cada uno soñaba con el otro, y hablaban por las noches, pero nunca llegaron a tener contacto.
Aquella noche dormía profundamente, y un calor recorrió mi entrepierna, noto como la ropa interior se desliza hacia abajo, y como si me rozasen, las piernas, unas manos ásperas y grandes.
¿Estoy soñando enserio?

Sin abrir los ojos empecé a tocarme, primero suave, estoy muy húmeda así que sigo con más fuerza...
Me recosté y abrí el cajón de la mesilla de noche, en busca de mi vibrador.

Lo coloqué entre mis piernas y masajeando mi clítoris poco a poco fui introduciendolo.

Seguía mojada, cada vez más cachonda y decidí darle vibración.

Sin abrir los ojos empecé a imaginarle en mi cama, parecía tan real, que poderosa es la mente.

No pude evitar gemir, sentía todo mi cuerpo tensionarse del placer.
Metia el vibrador y lo sacaba con un ritmo intenso, y cuando sabía que estaba a punto de acabar me detenía.

[ No quería que aquello terminase, era una sensación de "quiero y no puedo". Que hacía estremecer hasta el último bello de mi piel]

Recuperaba el aliento y volvía a masturbarme.

Hice eso un par de veces hasta que ya no pude más. 

Me los dejé dentro, le di máxima velocidad y me toqué como loca para llegar al clímax. No paraba de gemir y cuando finalmente exploté en un orgasmo grité.

[ Grité de un placer que me inquietó, por que no sabía el placer increíble que uno mismo puede darse].

estoy empapada en sudor y las manos húmedas, al igual que todo el pijama y la cama. Menudo polvazo conmigo misma, pensé.

Tócate por que si tu te conoces la otra persona puede llegar a conocerte mejor y sino pues eso que te llevas ¿No?

"Por que todas las frutas no son prohibidas y esta debería ser obligatoria, Quémate con tu fuego que nadie mejor que tu sabe lo que puedes llegar a arder "