Caminaba por las calles desoladas con miedo. Temor, a decir verdad. Me seguían unos pasos aterradores.
Lo peor de todo es que cada vez se escuchaban más fuerte, se acercaba.
Tomé de mi bolsillo el móvil y marqué rápidamente. Mi única esperanza era mi hermano.
- ¿H-Hola? ¿Namjoon? Ven rápido p-por favor.
-¿Hola? ¿Hyeri?
-¿Y-yoongi? ¿Y Namjoon?
Caminaba a paso apresurado y por lo tan distraída que estaba choqué contra algo de metal provocando un ruido estruendoso.
-Mierda -Maldecí
Me volteé hacia atrás confirmando que todavía no me alcanzaba aquel hombre de gorro y chaqueta negra. Un escalofrío paso en mi interior.
El miedo incrementaba cada vez más mientras un nudo crecía en mi garganta.
-¿Qué fue eso? ...Namjoon se fue a comprar algo, dejó su celular. ¿Por qué?
-T-tengo miedo -Susurré por el artefacto hablante
-¿Qué? ¿D-Dónde estas? ¿Estas bien? ¿Miedo a qué? ¡Responde!
Tantas preguntas a la vez que no sabía cuál responder.
-Ven rápido, tengo mucho miedo -Sollocé
Lo único que quería era a alguien. Una persona que me salve de esta situación.
-¡¿Dónde estas?!
Los ojos se me aguaron dificultando mi vista.
-Eh... Eh... En la calle principal.
Solté visualizando a mi alrededor. Obscuro. Aquellas tiendas estaban cerradas. Ni una sola persona pasaba.
Momento perfecto para que un acosador me persiga ¿eh?
¿Y si me alcanzaba? ¿Qué me iba a hacer ? ¿Me haría daño ? " Claro que sí idiota " . Me reté a mí misma .
Maldición. Si tan solo no hubiera tomado el bus para no caminar. Todo pasa por no querer caminar. Y son estos momentos en que me arrepiento de no haber caminado, en donde me culpo a mi misma por ser tan floja.
Revisé la pantalla del móvil. La llamada se había cortado.
Mis únicas esperanzas estaban en Yoongi. En que le haya decido a mi hermano mi estúpida y patética situación.
-¡¿Hyeri?!
Levanté mi vista para encontrarme con un chico que a todas fuerzas se dirigió a mí. Me abrazó. Estaba rodeada junto con sus brazos.
-¿Estas bien? ¿Te has lastimado? ¿Te encuentras bien?
-¿Y Namjoon? ¿Dónde está? -Pregunté mirando a ambos lados. El acosador ya se había ido.
-¡¿Qué importa Namjoon ahora?!
Lo miré sorprendida. ¿Me estaba gritando?
-L-lo siento -Bajé la cabeza. ¿Por qué estaba pidiendo disculpas?
-No, yo lo siento. No debí gritarte. Es que... me preocupé -Acarició mi rostro -Namjoon no iba a llegar asi que recién escuché un ruido por el celular me puse los zapatos y salí a la calle.
Sonreí complacida.