La música a todo volumen envolvía a todos haciéndolos bailar como locos. Estefan saltaba alrededor de Joon, que estaba intentando crear un estilo de baile nuevo que era una especie de combinación de twerking con el baile ruso kazachok. Gabriela lo daba todo bailando sensualmente y frotándose sobre Jose, el mencionado bailaba como podía, ya que aun se sentía débil. Leia y Natsuki se partían de la risa al ver la coreografía que hacían Liam y Odette.
—¿Quieres que vayamos por alguna bebida? —preguntó Bastian viendo a Jessy agitada por bailar.
—Por favor —respondió ella sonriente.
Bastian guió a Jessy hasta la mesa donde estaba el buffet. Le dio un vaso con soda a Jessy, sacó un petate de su traje y le ofreció un poco de alcohol.
—No tomo, gracias —dijo Jessy.
—Yo tampoco suelo hacerlo —dijo echando una buena cantidad de ron en su cola—. Pero la ocasión lo amerita.
—Pensé que nos apartaríamos del grupo —Jessy miro al centro de todo, donde Estefan y Joon bailaban llamando mucho la atención—. Por ellos.
—Aunque no lo creas, yo no tengo ningún problema con ellos, estoy feliz que ellos estén juntos al final —Bastian tomó su bebida—. Joon merece ser feliz.
—¿Pero tú no estás enamorado de Joon?
—Si, pero no me voy a perder uno de los dos bailes de la escuela por eso —se burló Bastian—. Me volveré un aburrido alfa cuando la escuela termine, tengo que aprovecharla al máximo.
Jessy asintió sonriente.
—¿Es verdad que eres de la manada francesa? —preguntó Bastián como quien no quiere la cosa.
Jessy lo miró incrédula.
—Los chismes aquí vuelan linda —dijo Bastián coqueto—. Casi toda la escuela sabe que eres la prima de Auguste.
Jessy intento que no se le notara el nerviosismo
—¿Cómo está Auguste? —pregunto—. He intentado contactarme con él, era mi amigo, pero no se como ubicarlo.
—Volverá para final de curso —le explicó ella—. Si no encuentra su mate en Francia, vendrá para la graduación de la escuela.
—¿De estar todo complicado desde que murió su beta y sus amigos cierto?
—Han sido tiempos difíciles para él, pero está bien.
Bastian iba a preguntar otra cosa pero uno de sus amigos lo interrumpió.
—Hey Bastian —dijo Doniar, un chico de un grado superior de Bastian y Jessy—. Viejo, no sabes lo que le acaba de llegar a Chad en su teléfono.
Bastián miró a Chad, su compañero de la clase de defensa y DJ ese día, que estaba mezclando la música en ese momento.
—¿Qué paso?
Doniar noto la presencia de Jessy.
—Es de confianza —dijo Bastian rápidamente.
Se acercó a Bastian para que solo él pueda escucharlo.
—Ha Chad le acaba de llegar un mensaje con un video algo comprometedor de Leia y Bael, con otro mensaje donde le indicaba que lo reproduzca en la gran pantalla led y con una notificación de que a su cuenta bancaria le acaba de llegar dos mil dólares.
Bastián miró asombrado a Jessy.
—¿Bael y Leia? —Jessy no podía creerlo.
—Chad sabía que Leia es tu amiga y además que no quiere tener ningún problema con los príncipes, todos sabemos lo problemáticos que pueden llegar a hacer —explicó Doniar—. Es mejor que hables con Leia, alguien quiere sabotearla esta noche.
