Al entrar al club.
Y que club.
Bailamos casi todo el tiempo y comence a dudar de cuales realmente habian sido los pecados de aquel angel.
Me derretia cuando me llevaba entre la gente por la cintura para dirigirme a la mesa. Nuevamente simplemente disfrutamos de la compañía mutua. Casi al finalizar la noche, nos acercamos a la pista cuando al fin sono algo parecido a un merengue, le enseñaba como moverse aunque casi me auto-aplaudo al ver su cara cuando giraba mientras bailaba.
Lo malo de la noche, es que uno de los viejos que estaba dentro comenzo a querer propasarse. Bastían recien se dio cuenta se lanzo encima a golpearlo con tanta furia que tuve que separarlo, el hombre se fue y corri a socorrerlo a el. Quien tenia un labio cuarteado. La noche termino, cuando los dueños del local nos sacaron por el alboroto formado y el simplemente reia.
-
¿De que te ries?. – pregunte nerviosa y algo molesta. - ¡casi nos llevan presos!
-
Te hago entender lo bien que me parezco a ese principe Harry… además, no iba a dejar que te tocara siquiera un cabello.
-
Es muy lindo de tu parte… - sonrei viendole y luego a su labio. - ¿duele mucho?
-
No tanto como la reproduccion a ese hombre. – volvio a reir.
-
La verdad es que si.
Nos carcajeamos de la risa y nos detuvimos mirandonos a los ojos.
-
¿Seguro estas bien?
-
Totalmente… - sonrei. – gracias por defenderme allá.
-
No hay problema… - sonrio.
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Saga Delucios 2.1: El Sello del Inmortal (Completada)
Short Story..."El deseo es la iniciativa para hacer cosas que quizas nunca hariamos" O una simple excusa. Conocer a un chico de aspecto angelical y mirada tentadora. La combinación perfecta para no pensar claramente. Un inocente viaje de verano puede converti...
