Us

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Estaba sentado al lado de la ventana en el lugar que, mi ahora amiga, solía sentarse, así es, pase de detestarla un poco a entablar cierto extraño tipo de amistad con ella, si bien no era ese tipo de amistad en la que directamente nos contábamos absolutamente todo con detalle, era una en la que nos contábamos los aspectos más importantes de nuestras vidas, para nosotros mismos eso era demasiada confianza. En fin, el día de hoy Lizey no está presente, cosa extraña pues estoy seguro de que prefiere estar aquí y escapar a encerrarse en su casa, por mi parte las cosas me dan igual el día de hoy, si muero está bien, si vivo está bien, si me gano la lotería el día de hoy está bien, nada cambia igualmente; seguido a un largo día de escuchar parloteos de adultos y analizar la patética existencia humana y su forma de hacer más miserable su vida, claro que nunca más miserable que yo, salí de la escuela y me dirigí a mi auto para entrar en él y dejarme caer en el asiento dando un suspiro pesado, saque de mi bolsillo la USB de Lizey, me recordaba a ella y por alguna razón desconocida últimamente lo necesitaba, pulpo aún no se daba cuenta de que yo la tenía, mi querida amiga es demasiado despistada, definitivamente no me molesta. No tenía ganas de ir a casa así que me quede ahí un momento, el tiempo pasaba y yo solo miraba la calle preguntándome ¿que podría llegar a hacer yo para cambiar mi vida?, no sé si tengo que irme de casa o quedarme y esperar a que pueda hacer mi propia vida, sin importar la respuesta recibí una llamada de Lizey, conteste tranquilamente y escuche su voz

- hola - dijo tranquila y resopló su nariz

- hola, ¿qué pasa? - pregunte con el mismo tono y mi ceño fruncido

- ¿estás ocupado? - no me ha dicho idiota, no sé si es un record o una advertencia

- no, ¿por qué? ¿Qué pasa? - enderecé mi espalda comenzando a preocuparme

- tu - dejaba volando las palabras - ¿podrías venir por mí? - mis manos encendieron mi auto sin la necesidad de que mi cerebro lo procesara

- claro, ¿a tu casa? - pregunté comenzando a arrancar

- no - una enigmática pausa de nuevo - al hospital - me congele, ella en el hospital, ¿habrá intentado algo? ¿Le habrá sucedido algo malo?, para cuando analice mis preguntas yo ya había colgado su llamado y ya estaba dirigiéndome a donde me indico, me tranquilice pensando en que definitivamente ella no estaba muerta, eso ya era ganancia. Al llegar al lugar me estacione con más tranquilidad e ingrese, observe en esas sillas metálicas a Lizey cabeceando y a su hermano al  lado, avance por ese pasillo con mis fosas nasales inundándose de ese desagradable y característico olor de hospital, Lizey levantó la mirada y se levantó para dirigirse a mí cuando su hermano tomó con fuerza su antebrazo

- ¿te vas a ir? - la miro molesto

- no, me levante para esperar parada como tonta - su sarcasmo era más fluido que su idioma

- cuando mamá despierte le diré que te largaste con tu novio a quien sabe dónde - la soltó y dejo que el efecto de sus palabras actuara solo

- no es cierto - regreso molesta - vas a ir a reprenderla como si fuera una niña y vas a salir a fumar, yo estuve con ella toda la noche y cuando tú estabas del lado de papá, así que no quieras echarme nada en cara - estaba comenzando una escena con las miradas en ella, sé que eso le molestaba así que como un escudo me puse detrás de ella y tome su brazo esperando que se tranquilizara

The difficulty of existingWhere stories live. Discover now