EL REY DEMONIO ( bakugou y tu +18 )

cap - 1

Tú eres una chica de 17 años, hija del emperador, con tu madre como emperatriz, y tienes una hermana gemela. Sin embargo, te han tratado como la oveja negra de la familia, ya que en el pueblo tienen un rango de 8 en el top de los reinos, siendo el más alto el Rey Demonio, que se encuentra en el top 10.

Cada pueblo tiene un poder:

Oscuridad: 10 (solo el Rey Demonio).Rojo: 9.Azul: 8.Rosa: 7, y así sucesivamente.

Tu pueblo es del color azul y se encarga del manejo del agua y la curación. Cada color representa sus habilidades inherentes.

Sin embargo, tú no has nacido con ningún poder, a diferencia de tu hermana gemela, quien sí lo tiene. El emperador ha hecho que solo haya una hija para evitar cualquier humillación que surgiría si se supiera que no tienes el poder azul. Tu madre incluso intentó matarte cuando se enteró de tu falta de poder, pero tu niñera logró detenerla.

Tu hermana te llenaba de golpes y te robaba tus pertenencias, y vivías en un cobertizo con un colchón tirado y una mesa de madera rota como tus únicas posesiones. Tu situación era desesperada, y tu padre no mostraba preocupación por ti, sin importarle tu estado.

A veces tenías la oportunidad de comer, pero siempre tenías que bañarte en el río del pueblo, generalmente de noche. La única persona que te brindaba comida, ropa y cariño era tu niñera, quien te cuidaba como si fueras su propia hija.

Un día, mientras caminabas en el jardín del castillo, cuidando las flores y admirando su belleza, te encuentras con tu hermana y sus amigas de otros reinos. Para evitar conflictos, bajas la cabeza y ocultas tu rostro.

Guisella: ¿Qué haces en mi jardín, escoria?

Niña: ¡Uy, qué asco, quién es ella?

Niña 2: Mira su ropa, debe ser una sirvienta. Se ríe

Tu ropa no era más que un trapo viejo hecho por tu niñera, pero a ti te gustaba.

Guisella: ¿Eres una sirvienta o mejor una esclava? Se ríe

(Notas que tu ropa es sucia y rota, y las niñas se ríen entre ellas.)

Guisella: ¿Acaso me estás ignorando, sirvienta?

Escuchas cómo sus "amigas" se ríen.

Niña: Espera... se parece mucho a ti, Guisella.

Niña 2: Tienes razón, pero no puedo ver bien ya que tiene la cabeza agachada.

Las niñas se acercan para ver mejor, pero Guisella te toma del pelo y te tira hacia abajo, ensuciando tu rostro con lodo.

Guisella: ¿Te gusta? Se ríe ¿Crees que puedes parecerte a mí estando tan sucia?

Niña: Tienes razón, mi error.

Niña 2: Sí, además mira su ropa, es muy asquerosa y sucia.

Niña 3: Como ella. Se ríen

Las amigas se ríen entre ellas, mientras Guisella sigue sosteniéndote del pelo y te humilla.

Guisella: ¿Estás demente? ¿Por qué saliste a la luz del día? ¿Quieres que te vean?

Tú no respondes, lo que la enfurece aún más. Toma lodo del suelo y te lo arroja a la cara.

Guisella: ¿Te gusta? Se ríe ¿Crees que te pareces a mí ahora que estás sucia?

Te aleja de sus amigas y te lleva a tu choza

Guisella: Este es tu lugar, y solo este. No quiero verte de nuevo.

Luego, cierra el cobertizo con llave
Tú: No, perdón. No volveré a tu jardín. Hazme lo que quieras, pero no toques a Rosa, por favor.

(El cobertizo se cierra con llave mientras tú sigues suplicando.)