Capitulo 4

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Nuestra evolución

O eso creyeron pues el entrenador decidió que era buena idea despertarlos a las 2 de la madrugada para que tuvieran una práctica nocturna

- esperen ustedes tres - llamo el entrenador a Ken (el chico gordito), Ryoma y Kenya (el que se supone es el más rápido) - vayan al fondo de la cueva y hagan lo que está escrito en la hoja - los cuatro asintieron y marcharon, Aledis miro esto con una ceja levantada pero lo ignoro y siguió a los otros.

[...]

- a donde fuiste, y porque hueles a carne - Aledis estaba confundida viendo llegar a los tres desaparecidos - el entrenador nos pidió que hiciéramos unas cosas - respondió Kenya - en lo que incluye comer carne - pregunto una vez más Aledis sudando una gota por el aroma que les daba eso tres, viendo que no contestaban se alejo y fue a dormir de nuevo

[...]

Bajar la montaña, perseguido por una manada de águilas no es lo que uno quisiera pero que se le puede hacer cuando tienes a un entrenador que no le falta un tornillo, le falta la fábrica entera.

Pero como llegaron nuestros protagonistas a esta surrealista situación.

Pues todo empezó cuando al entrenador se le ocurrió que tendrían una cacería de deportistas, en qué consiste, en traer atado un globo, que a su vez tendría una esencia que atraería a las aves.

Los gemelos se habían separado, Aledis corrió con rumbo a la cascada y Ryoma en dirección contraria con la intención de que el olor no se hiciera tan fuerte, pero lastimosamente para el gemelo mayor, Kintaro había decidido que era buena idea perseguirlo y eso provocó lo que querían evitar, una águila rápidamente fue tras ellos para pinchar sus globos, por su parte Aledis trotaba por el camino como si no le importará que poncharán su globo, un águila que la encontró miro esto con curiosidad, pero el olor era más atrayente que la curiosidad por aquella humana, el ave se dirigió a pinchar el globo y Aledis sonrió, al último momento esquivo y se dispuso a jugar con la ave. Después de unos diez minutos esquivando Aledis decidió que ya no quería jugar y empezó a correr con dirección a los árboles, donde al pájaro sería más difícil volar.

[...]

Por su parte el grupo que entrenaba en mejores condiciones, luchaban por la supervivencia de otra manera y de una manera totalmente más tranquila

[...]

Un chico rubio de preparatoria había encontrado a Sanada y con la intención de reventar el globo, se dirigió con una rama afilada, sanada con toda tranquilidad lo esquivo y pronto tres rocas se dirigieron al globo de el rubio. Se reveló que Ryoma y Kintaro fueron los responsables de lanzar dos rocas e ignorado el hecho que se habían visto tres rocas empezaron a discutir sobre quién habían roto el globo. Sanada miro más arriba de la pareja que discutía, encontrando a una Aledis que lo saludaba desde el árbol donde más abajo se encontraba discutiendo la pareja, está le hizo el signo de que no dijera nada, a lo que el asintió y después la vio marcharse. También observo que los otros dos se estaban encaminando rumbo a la cancha donde su tormento empezó

Un partido improvisado se llevó a cabo, hasta que se interrumpió puesto que un águila secuestro a Kintaro y la manada que perseguía a los estudiantes ahora rodeaba a Ryoma, Kintaro intentando ayudarlo le lanzó 5 castañas, a lo que el moreno reaccionó y las dirigió a las aves, las cuales abandonaron su labor de intentar ir tras los globos

Parece que al fin se mueven mejor - apareció el entrenador Nyudo - pero déjame advertirles, si no pueden golpear 10 a la vez, nunca derrotará a Oni o a Tokugawa  - menciono el entrenador

El regreso de la princesa ~New Prince of tennisWhere stories live. Discover now