Un dia como todos los jueves Estefanía llevaba alimento a su mama al pie de la montaña porque ya no tenía las fuerzas para seguir adelante por si sola; su papa ya tenía muchos años de haber muerto, su mama tenía cierta edad en donde solo podía hacer cosas básicas, todo era complicado y al ser en ese momento hija única le correspondía cuidarla, a pesar de que Estefanía deseaba llevarla con ella a su casa pero su marido Carlos no lo deseaba ya que no quería problemas. Estefanía molesta y en ocasiones compasiva quería que terminara, esos sentimientos siempre chocaban porque quería disfrutar su vida ya que su marido solo pensaba en lo estorboso que era tener una mama que cuidar de vez en cuando y lo estorboso que era que atender a un marido que no la valoraba; sus pensamientos solo eran eso y su comportamiento era automático, despertar, atender y callar odiando el hecho de a verse convertido en la hija única.

Estefanía: - Escuincle vamos con tu abuela, ¿ya terminaste tu tarea? espero que sea así ¿ya barriste tu cuarto?

Hijo: - cuál de las preguntas deseas que te conteste

El hijo estaba guardando sus cosas en su mochila después de a ver dicho aquellas palabras, cuando de repente escucha unos pasos acercándose y al girar su mama la golpea en la cara con la palma de la mano

Estefanía: - no me hables así escuincle, no contestes de esa forma ¿que acaso eso te he enseñado?

El niño sin decir nada y con los ojos cristalinos termino de guardar sus cosas y espero a su mama en la puerta para ir a ver a su abuela que con el paso del tiempo parecía más débil más anciana, has en ocasiones no recordaba su nombre.

Estefanía:- vámonos

Hijo:- está bien mama

Los dos caminaron directamente por ese sendero que al principio del camino comenzaba muy rocoso que en ocasiones se sentían las piedras afiladas, esas piedras pero no existía otro camino además era el más corto después de unos minutos se adentraron en un en la zona donde se encontraba aquellos arboles espinosos que ayudaban a ocultar los rayos del sol de un día a las 6 de la tarde, ese tramo era tan tenebroso que había un silencio perturbador en donde solo se escuchaban los pasos de ellos dos. Al caminar parecía que los árboles se unieron para no permitir que nadie pasara por que el camino además de ser tenebroso tenia tantas curvas que no se veía el fin del camino y eso recordó la historia que le contaron en la secundaria de ese lugar y decidió preguntarle a su mama.

Hijo: mama me han contado una historia de este lugar

Estefanía: - vaya hasta que se te pasa el enojo espero que hayas reflexionado acerca de lo que sucedió de tu forma de contestar

El niño se quedó callado y no recordaba lo que había sucedido en su casa

Estefanía: - dime que historia

Hijo:- me han contado que existe una bruja en este lugar que se lleva a los niños, todo comenzó con una lectura que hablaba del mal y el bien que había seres que eran buenos pero para que existirán había malos en esa historia los llamaron héroes y villanos, entonces el profesor nos preguntó si conocíamos a algún villano y un compañero hablo sobre la bruja que vive por esta zona que se aparece por las noches que es algo bueno porque nosotros venimos por las tardes y regresamos antes del anochecer.

Estefanía no decía ninguna palabra mientras el hijo la veía de vez en cuando para saber cómo era su rostro, se preguntaba si su mama también tenía ese temor y ante un pequeño lapso de silencio para ver si decía lago decidió continuar

Hijo:-dicen que la bruja para obtener sus poderes mato a una de sus hijas y la convirtió en un espíritu que cuida este camino y a mí no me da mucho miedo pero dicen que cuando se escuchan ruidos es porque la niña está cuidando el camino para que nadie se acerque al pie de la montaña, lo primero que pensé cuando escuche eso fue que, tenían razón por que a veces se escuchan pequeños ruidos

un verdadero villanoWhere stories live. Discover now