Mimosa - Nadie sabe que te quiero

C051 - Nunca lo había besado antes

Un noble esperaría el momento oportuno para vengarse. Ji Xinglan fue realmente calculador.

Cuando recordó las cosas vergonzosas que hicieron en el asiento trasero. Yan Qiu se sintió mareado y su cabeza parecía explotar. No podía levantarse del todo. Quería estirar la mano para sostener algo, pero terminó casi chocando contra el marco de la pintura.

 Ji Xinglan vio que había algo extraño en su expresión y rápidamente se apresuró a apoyarlo.

Pero como Ji Xinglan había estado abrazando a Yan Qiu durante tanto tiempo, éste no quería su apoyo. Su mente estaba desordenada y lo único que quería era huir. No sabía cómo había cobrado fuerzas de repente, ya que ahora mismo estaba de pie tambaleándose y casi se cae al suelo, pero empujó el brazo de Ji Xinglan y corrió hacia la puerta.

Sin embargo, Ji Xinglan no lo dejaría realmente huir. Lo alcanzó en unos pocos pasos y lo abrazó con fuerza por detrás. 

Yan Qiu se llevó a cabo en sus brazos como algún tipo de tesoro, y Ji Xinglan se negó a dejarlo ir. En la habitación tenue, solo podía mirar la luz que se filtraba a través de la puerta de la sala de exposiciones. Esa fue la luz que anhelaba alcanzar. 

Ji Xinglan parecía estar muy sorprendido por su reacción y él besó tentativamente la oreja. —Xiao Qiu, ¿te recordaste? 

A pesar de que lo escondió muy bien, Yan Qiu todavía escuchaba la preocupación en su voz. Sabía que Ji Xinglan también estaba probando las aguas.

Parecía tener mucho miedo de que Yan Qiu realmente huyera.

Honestamente, sin embargo, Yan Qiu realmente no quería correr. Tenía que ajustar cuentas con este bastardo.

Yan Qiu se sintió demasiado avergonzado para enfrentarlo porque había acosado a Ji Xinglan en el pasado. Quería buscar un lugar para calmarse para que su rostro no se enrojeciera por completo mientras se enfrentaba a Ji Xinglan.

—¿Realmente lo recuerdas? —Había una sensación de urgencia en el tono de Ji Xinglan. Extendió la mano para agarrar la barbilla de Yan Qiu y así poder mirarlo.

—Entonces, ¿por qué cada vez que venía a buscarte, tú... ? —Hizo su pregunta muy rápidamente, como si realmente quisiera saber algo.

Yan Qiu frunció el ceño. Sacudió la cabeza y quiso sacudir su mano. —Estamos en público. Deja de molestar.

Sólo había una puerta que separaba la sala del exterior. La gente seguía fuera. A Yan Qiu le preocupaba que Ji Xinglan arreglara las cosas con él ahora mismo.

Pero mientras ambos discutían entre sí sobre esto, alguien empujó repentinamente la puerta con un fuerte golpe y una mujer se precipitó contra la luz.

—¡Sorpresa! —La persona que entró llevaba tacones de aguja. Parecía un poco loca, y cuando entró corriendo, encendió todas las luces. Las luces sobre ellos se encendieron al instante.

Las dos personas que estaban abrazadas quedaron expuestas al instante bajo la luz.

Joyce se quedó atónita antes de enfrentarse inmediatamente a la mirada asesina y feroz de Ji Xinglan. Se estremeció y rápidamente apagó el interruptor de la luz en la pared. —¡Hermano, siento haberte molestado! Por favor, continúe.

Al decir esto, salió corriendo rápidamente de la sala de exposiciones e incluso les ayudó amablemente a cerrar la puerta.

Yan Qiu parpadeó confundido.  

Ji Xinglan frunció el ceño y habló en dirección a la puerta: —Regresa.

Una vez que terminó de decir eso, finalmente estuvo dispuesto a dejar ir a Yan Qiu. Pero todavía le tomó la mano porque estaba preocupado y le impidió intentar huir.