Dangerous Love |Kai Parker|

-Capituló 4

Abby PDV.

Estaba frente a un espejo completamente clisado, lo observaba con detenimiento, analizándolo, sintiéndome parte de cada trozo

Tenía que reconstruirlo, era un hechizo sencillo, las palabras eran fáciles, la concentración no mucho, pero tenía que intentarlo, si lo lograba, todo iría como viento en popa

Cerré mis ojos, respire suavemente, como nunca antes, deje de pensar, mi mente era un completo papel en blanco, susurre las palabras y podía escuchar cómo se reconstruía

Levante la mirada, estaba como nuevo, sonreí y mire tras de mí, en el marco de la puerta estaba Kai con los brazos cruzados, estábamos en la mansión Salvatore debido a que Jo pidió que estuviera vigilada

-Progresas niña-fruncí el ceño

-Tengo nombre – le recordé- Abby, deja de decirme niña- susurre con los dientes apretados- Además tengo diecinueve

-Pues eres una niña- cerro el ojo

Alzo las manos en defensa y sonrió en grande, dejándome ver el brillo y la blancura de sus dientes, parecían de mentira, todo el parecía de mentira, era tan guapo y tan idiota, como un muñeco de plástico

-¿Qué sigue?- le pregunte- No quiero seguir reparando cosas inútiles- soltó una carcajada bastante tonta

-El espejo no es inútil- camino hasta mí y me tomo de los hombros- Mírate- me giro- Sirve para que te veas- rodé los ojos

-Kai- lo mire directamente, sin pudor- Si para ti esto es una broma, simplemente dímelo- trague grueso, sabiendo cual sería su respuesta

-Tienes mucha magia pequeña Abby- sonrió- Para mí la magia no es una broma- su rostro serio me causo calosfríos

La tarde pasó, Kai era un niño disfrazado en el cuerpo de un hombre, hacia bromas que me causaban gracia, pero la mayoría eran inconsecuentes o irónicas, que daban ganas de pegarle en las pelotas

-Me voy a ir- me puse de pie- Estoy cansada y siento que no vamos a ningún lado

-Nadie hablo de ir algún lado- sonrió- Necesitas tiempo niña, puede que yo sea el líder del aquelarre, pero no se controlarme tampoco

-Han pasado décadas desde que arregle el espejo- exagere, soy la reina del drama- Y luego de eso, solo me has hecho repetir palabras que no entienden las personas cuerdas

-Repítelas- cerré los ojos- Repítelas

Repetí cada palabra en latín, de corrido, abrí los ojos y mire el espejo ¡Santa mierda! No estaba, era invisible, de verdad

-Toma mi mano- dijo el ojigris a la nada

Me acerque y tome su mano, entonces comprendí que él me veía, sonrió mostrando los hoyuelos que se formaban de manera adorable, este chico era una caja de sorpresas

-Repite las palabras y volverás a ser visible- dijo espeluznantemente

Le hice caso, las repetí, aunque solo sabia dos hechizos me sentía poderosa, como si con eso pudiera controlar todo mi poder, cuando solamente estaba aprendiendo hacer una bruja novata

Baje de dos en dos las escaleras, en la sala, frente a la chimenea, Damon, Elena y Jo estaban charlando rápidamente, pareciera que no hubieran notado mi presencia

Dije el hechizo de invisibilidad, mentalmente claro, para que no pudieran escucharme, Kai bajo, pero tampoco me vio, no podía estar más feliz, estaba haciendo algo bien

-¿Cómo están amigos?- dijo, llevándose malas miradas- Se que me odian, pero saben que soy el único que puede traer de vuelta a Bonnie- sonrió con suficiencia

-¿Tienes el ascendente?- pregunto Damon- Porque si es así, deja de jugar y tráela, maldito imbécil

-Hay tres ascendentes, de los cuales dos están hechos mierdas- hundió sus brazos- el que ocupaste tu y yo con mis habilidades manuales lo repare, pero termino hecho mierda igual- sonrió- el que hice mierda en la mano de tu amada Elena y el tercero cuyo paradero no conozco

¿Ascendente?

-Necesitamos entrar a 1994- susurro Elena con los dientes apretados

Mierda, yo tengo lo que buscan