Capítulo 49. Leslie

Start from the beginning
                                    

A la mierda. Iría directa al grano. No se merecía que tuviese tacto.

—Pues sí, mira por donde —le espeté, observándole con los ojos afilados—. Me pasa que me has mentido.

Su ceño se frunció, pero no era convincente.

—No entiendo lo que quieres decir.

Claro que sí, Carter. Hazte el tonto ahora...

—Que me dijiste que eras gay, cuando es una absoluta mentira.

Posé la mano sobre la mesa y tamborileé con los dedos, haciendo ruido cada vez que las uñas chocaban contra la madera. Tenía tanto enfado dentro que necesitaba sacarlo de alguna manera.

Carter suspiró, y continuó defendiéndose a sí mismo.

—Les, me gustan los chicos.

—Ah, ¿sí? —Pregunté con tono inocente, pero sin dejar de mirarlo como si pudiera hacerle daño solo con mis ojos—. Entonces cuéntame cómo es posible que Hunter te haya visto liándote con muchas chicas.

Lejos de reaccionar como me esperaba, de desmentir mis palabras o, como mínimo, intentar decir que Hunter no decía la verdad, Carter se echó a reír.

Y la verdad, estaba preparada para todo menos eso. Aun así mantuve la postura, porque su risa no tenía ningún toque de felicidad. Finalmente, dijo:

—Les has dicho a Hunter que nuestra relación es falsa, ¿verdad?

Aunque lo formuló como una pregunta, su tono fue de afirmación.

—Sí, lo hice —le aseguré—. Es mi amigo.

Soltó un pequeño "¡ja!", y paseó los ojos por la mesa.

—Ya, claro... Solo amigo.

Su forma de jactarse y desconfiar hizo que me pitaran los oídos. Dejé de tamborilear los dedos y me incliné sobre la mesa.

—Carter Clarke, no tienes derecho a increparme por nada. Primero, nuestra relación no era real. Y segundo, me mentiste.

—¡Pero no te mentí! Al menos, no del todo...

Tragué saliva, esperando a que continuara. No le creía, pero de pronto él también había perdido los nervios y alzado la voz, lo que me dijo que, quizás, empezaría por fin a ser sincero.

Tardó varios segundos en volver a hablar mientras su respiración volvía a la normalidad.

—No soy gay, pero sí me gustan los chicos. Soy bisexual. Y el hombre de la fiesta, del que me escondía, es mi ex. Todo eso era cierto, y que mis padres no lo saben también.

Está bien, podía intentar creer esa parte, pero todavía había muchas piezas que no me encajaban.

—Bueno, pues me importa una mierda —le espeté, porque no pensaba ser comprensiva o tener tacto con él—. Si ellos te han visto con más mujeres, ¿por qué narices me dijiste que iniciara una relación falsa contigo?

—Porque quería joder al hijo de puta que hizo daño a mi hermana, pero no quería salir contigo tampoco.

Oh.

Así que era eso. Y, sin embargo, no terminaba de encontrar el sentido a lo que decía. ¿Había montado un plan para hacer daño a Hunter, y yo tenía que formar parte de él?

Cuando no dije nada, Carter continuó:

—Sabía que Hunter era mala gente desde el principio. Y aquel día, en el restaurante, cuando vi cómo te miraba... Sabía que había engañado a Avery desde ese mismo momento. Por eso te seguí el juego.

Para mí Hunter no era mala gente. Había metido la pata, eso sí. Se equivocó y con ello hizo daño a Avery. Tenía tantas cosas que reprocharle a Carter, que no acabaría nunca, así que opté por pedir más explicaciones.

—Pero no le dijiste nada a tu hermana.

Él asintió.

—Para que no le doliera más.

Cuidaba de su hermana mayor como si en realidad ella fuese. la pequeña. Podía entenderlo, Kenzie me sacaba unos cuantos años, pero la defendería con uñas y dientes si alguien le hacía daño.

Carter se dejó caer en el respaldo de la silla y me miró a través de las pestañas, como si estuviese cansado de nuestra conversación.

—Mira, Les, lo siento. Esperaba que fueras tan capulla como él y me cayeses mal, pero... eres maja. No quería hacerte daño.

—No me has hecho daño.

Era cierto, pero en lugar de creerme, alzó los labios en una sonrisa petulante.

—Pues pareces bastante enfadada.

Gilipollas...

—¡Es que lo estoy, pedazo de idiota! Te burlaste de mí, y eso a nadie le gusta.

La sonrisa se le borró, pareciendo por primera vez en aquella conversación, al menos un poco avergonzado.

—Lo siento.

Asentí.

—Sigo molesta, ¿vale? —le aseguré—. Si quieres hacer daño a Hunter háblalo con él, pero no me metas en medio.

—Lo siento, Leslie, pero aquí tú sola te metiste en medio.

No podía haber dicho eso. Pero lo había hecho.

A la mierda. Ya habíamos hablado todo lo que tenía que decirse. Me puse de pies y, sin dejar que la discusión siguiera, le espeté:

—Por si no había quedado claro, eso de la relación falsa se ha acabado.

Y me alejé del café con el paso acelerado, haciendo caso omiso a Carter gritando mi nombre, pero también sintiéndome muy orgullosa de mí misma.

¡No le había pegado el puñetazo que tantas ganas tenía!

¡No le había pegado el puñetazo que tantas ganas tenía!

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

¡Holiiii!

Si estás a favor de Carter di hola aquí. O lo que sea. O algo.

Si quieres hacer algo como Les o más, presénciate aquí :)

En alguna otra historia he comentado mi ausencia. Me vacunaron de COVID, me acabó dando fiebre 28h después así, luego bajada de tensión dos días después, pero ahora ya estoy ok :)

Y actualizo y me voy a dormir si no os importa :)


PD. Pronto queda viaje de fotos a Alaska. Nada más. Andrea.  

:)

Otra Vez Nosotros ©Where stories live. Discover now