-Quince-

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Un mes después.
Por suerte lo de Jason no resultó ser muy grave. Ahora él está muy bien y cumple tres meses. Las clases van muy bien. Y mi relación con Zed también está parcialmente bien. Después de esa pelea él me pidió perdón por comportarse como un idiota. No le gusta que yo pase tiempo con Logan, así que lo evito en el colegio, aunque él va bastante a mi casa, después de todo, somos amigos.

Aunque Zed se ha estado comportando muy extraño. Hay días en los que me trata de maravilla y otras veces se porta distante, además me ha cancelado o plantado unas cuantas veces. Ya me he cansado de preguntarle si le pasa algo. Últimamente paso detrás de él, debe estar cansado de mí.

Hoy es otro hermoso y divertido lunes de clases (nótese mi sarcasmo). Vamos solo un mes de clases y ya estoy cansada. Cada día se hace más difícil levantarme para venir a este lugar, es imposible acostumbrarme. Se supone que ya debería ser como rutina, ya que vengo casi 11 años o eso creo.

- Hola- digo acercándome a Zed que habla por teléfono. Me hace una señal para que espere

- Si mamá- dice al teléfono- ¿El viernes? Voy a una fiesta con Halley. Yo le digo. Adiós- corta la llamada

- ¿Qué pasó?- digo sentándome junto a él

- La hermana de mi madre viene de visita este viernes y mi madre quiere que me quede en casa a cuidar a mis primos mientras ellas salen a comer para conversar- otra vez me cancela los planes

- ¡Qué raro!- digo sarcásticamente

- ¿A qué te refieres?

- Nada, mejor olvídalo

- No, quiero saber- dice molesto

- ¡Vamos Zed!- digo más molesta- Sabes a que me refiero

- No, no lo sé y por eso pregunto

- Si no quieres salir conmigo solo tienes que decirlo, no me voy a enojar

- ¿Por qué dices eso?

- Porque últimamente me cancelas las salidas, o peor, me dejas plantada

- ¿Estás diciendo que estoy mintiendo?

- Tómalo como quieras- digo girando mi rostro

- Halley mírame- dice tomándome del mentón y girándome hacia él- Nena te amo y lo sabes, no sería tan idiota para cancelarte una salida. Prometo compensártelo, saldremos a comer el sábado

- Está bien, pero si cancelas, no volveré a hablarte el resto de mi vida

- Lo sé- dice acercándome a él y dándome un beso, el cual yo correspondo con mucho gusto. Nos separamos por la falta de aire y porque Mel y Bruno nos interrumpen

- Basta chicos, respeten los espacios públicos- yo solo rio

- Ni que fuéramos ustedes el viernes en el estacionamiento- dice Zed riendo y pasa un brazo por mi cintura

- ¿De qué hablas?- Mel se pone nerviosa y se sonroja

- No me digas que los viste besándose el viernes- digo sorprendida

- Si, pero se comían la boca

- ¿Acaso no puedo besar a mi novia?- dice Bruno defendiendo a Mel

- ¿Tu novia?- pregunto enarcando una ceja

- Si, no pusimos de novios el viernes

-¿Y esperaron hasta el lunes para contarnos?- finjo estar ofendida

No te debes enamorar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora