Prólogo:

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Conocí a TaeHyung en mi segunda mitad del primer año del bachillerato.

Ambos asistíamos a tutorías de matemáticas los sábados, sí, una completa mierda.

Me había visto en la necesidad de comenzarlas cuando por un mal entendido con la maestra de dicha materia (que en realidad fue ocasionado por un estúpido idol que le gustaba a HoSeok, mi mejor amigo), mi calificación final tendía de un hilo.

Tenía una beca que mantener y a pesar de las cosas se habían aclarado con la Señorita Choi no me quería arriesgar a que por pura maldad suya o por faltarme un punto, se pescará de ello y me hiciera dejar la materia.

Sí asistías a las asesoría, eran 7 sábados, dependiendo del horario, por suerte a mí me tocó en la mañana, pesado, sí, pero al menos tenía la tarde libre para dormir o hacerse menso. Una vez finalizados los 7 sábados y presentar un examen, el profesor encargado te daría los puntos que habías obtenido en las asesorías, que eran de 0 a 20 puntos, y esos, eran agregados al resultado final de tu maestro(a) titular de la materia.

¿Ven por qué tenía ya seguro el pase?

Era el último sábado y había llegado sobre el tiempo, por lo que me asome al salón y vi que éste se encontraba con personas dentro, no había profesor.

¿Eran los chicos con los que compartí clase por los 6 sábados pasados? Mierda, ¿por qué no preste atención a sus rostros? Y por más que los miraba y me esforzaba tratando de escavar en mi mente un microsegundo de algún rostro, nada, no recordaba ninguno.

Dirán, ¿por qué no sólo entras? Había personas afuera, como esperando, podrían ser los de mi salón. Y la verdad, me avergonzaría entrar al salón como Juan en su casa y sentarme bien digno en un banco, y que en serio ese no fuese mi grupo.

Pero después vi que un hombre salía de la bolita de alumnos y se encaminaba al escritorio.

Mierdaaa. ¿Y sí cambian a los profesores en las aplicaciones de los exámenes? ¿El profesor habrá mencionado algo el sábado pasado?

Estaba en un debate interno cuando en medio de aquel grupo que se disolvió, logre divisar a un castaño moreno, con la palma de su mano sosteniendo su mentón, sólo que ésta cubriendo su boca.

A éste yo lo conozco. Pensé.

Era un castaño moreno, no recordaba su nombre, pero HoSeok me había dicho que era un tanto extraño ya que solía hablar con todos y siempre estaba sonriendo.

"—En serio Hyung, es raro, eso es raro."

Recuerdo que cuando lo vi llegar el primer sábado lo había reconocido y dicho "—el chico del que tiene intriga HoSeok". Pero hasta ahí, ya que después de eso me centré en la clase, en terminar los ejercicios e irme lo antes posible en cuanto nos dieron salida, y así sucedió todos los sábados siguientes.

Entonces... sí él estaba ahí, sentado en ese banco, ¿aquello no era indicio de que efectivamente aquel conjunto de personas en el aula, se trataba de mi grupo asignado?

Sin procesarlo un poco más jale la puerta con cuidado y me adentré, no llame la atención de nadie, y todos se encontraban parados frente a un banco, así que no era como que sí pudiera pasar y decirle a uno "—quítate".

Así que sólo me acerque al moreno sentado en el primer lugar de la fila más larga y me pare frente a él, recargando mi trasero en el gran escenario que había en el salón, en el cual se encontraba el escritorio junto a la computadora y los pizarrones blancos.

—Oye —le llame y él me miro por sobre sus párpados, pero enseguida desvío sus orbes de mí.

¿A caso es tonto? Ladee la cabeza.

—Oye —lo volví a llamar y ésta vez me miro con sus ojos bien abiertos puestos en mí—, ¿éste es nuestro grupo? —le cuestione y lo vi ladear la cabeza, luego mirar alrededor, a todos los compañeros, después se volvió a mí y él sólo se encogió de hombros.

Oh, genial. Pensé soltando un suspiro. Y sí, en ese transcurso de la mañana comprobé que TaeHyung hablaba hasta por los codos, en ningún momento hubo silencio entre los dos, tanto él como yo siempre sacábamos un tema nuevo.

—Bueno, fue bueno conocerte Kim TaeHyung, nos vemos por ahí —me despedí acomodando mi mochila, mi padre había llegado por mí.

—¡Adiós YoonGi Hyung! —Se despidió con una gran sonrisa.

Cuando subí a la camioneta mire por la ventana y el castaño se había parado en medio de las grandes escaleras que deban hacia el estacionamiento y me despedía con una mano. Correspondí el gesto con una suave sonrisa.

—¿Quién es ese chico? —pregunto mi padre comenzando a manejar a la salida.

—Su nombre es Kim TaeHyung —respondí sin entrar en detalle.

Innocent -YoonTae.Where stories live. Discover now