II

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Tyler, un poco enfadado por lo que según él era una broma, se acostó otra vez e intento dormir.

...

Al terminar el fin de semana le tocaba otra vez escuela y como estaba distante con su único amigo, Tyler se sentía sumamente solo. Su única compañía era Amber, pero ella desgraciadamente no iba a su escuela.
Amber... la joven novia del pecoso, lo extraño para este era que, para él, la pelirroja era más su amiga que verdaderamente su novia. Eso lo confundía tanto al pobre joven.

...

A mitad de la semana, a él joven de cabello rosado se le dio por hablarle al morocho luego de ignorarlo por días.
- Hola...- Lo saludó su amigo.
Tyler blanqueó los ojos, signo de que estaba molesto.
- ¿Necesitas algo? - Pregunto secamente el pecoso.
- Quería disculparme por haber estado ausente estos días, y también me enteré que tienes novia ¿por qué no me contaste? -
- Para que te iba a contar, ¿para qué me ignores? - Le respondió sarcásticamente.
- Quiero invitarte el sábado a una cita doble, tú, yo, y nuestras novias.
¿Quieres? -
- Em si claro- Acepto el pelinegro.
La conversación que acababa de tener con su amigo parecía irreal, ¿James solo se había acercado a él para invitarlo a una cita doble?
Que idiota... pero, Tyler debía aceptar ir, para así poder aprender del noviazgo de su amigo.
Sin embargo se sentía ofendido por elegir el sábado, pero supuso que se iba a ir acostumbrando a el hecho de que los sábados ya no eran los mismos de antes.

...

Ya era sábado y se encontraban allí, en un restaurante del pueblo, Tyler y Amber.
Ellos estaban esperando que la pareja se apareciera y así fue, diez minutos tarde.
- Hola pecoso y.... fosforito-
Saludo su amigo haciendo referencia a la pareja.
- Hola...- Respondió Tyler luego de suspirar pesadamente.
Esa noche fue extraña, la novia del morocho y la novia de su amigo terminaron hablando más entre ellas que con ellos, sin embargo, ellos hicieron lo mismo.
Se pusieron al día luego de estar varios días sin hablar. Tenían muchas cosas que contarse.
Y cuando el joven de ojos verdes la estaba pasando estupendo en la cita doble, le sucedió por segunda vez algo muy extraño.
El oía a su padre gritar su nombre una y otra vez.
- ¿Oyeron eso? - Le preguntó Tyler a los presentes con los que se encontraba.
Curiosamente todos negaron rotundamente haber escuchado algo.
¿Acaso trataban de hacerle una broma?
O....
¿Realmente estaba enloqueciendo?
Abrumado, se levantó de la mesa y se dirigió al baño de hombres.
Mojó su cara varias veces con agua tratando de obtener tranquilidad. Se miró al espejo y aún oía a su padre.
Estaba a punto de romper en llanto cuando su amigo apareció justo cuando lo necesitaba.
- ¿Estas bien?- Le preguntó James preocupado.
- Creo que me estoy volviendo loco-
Le respondió asustado su amigo.
James se acercó a él y lo abrazó tratando de calmarlo, cosa que funcionó.
Su corazón se ralentizó poco a poco y dejo de escuchar a su padre.
- Gracias- Suspiró en el oído de su amigo.
James lo tomó de los hombros y dejo su cara muy cerca a la de su amigo.
- No hay de que, recuerda que siempre me tendrás- Le contestó haciendo que sus alientos chocaran.
Mirándose fijo a los ojos, Tyler sintió algo extraño, y parecía no ser el único ya que su amigo acercó unos pocos milímetros más su boca a la de su compinche.
Los alientos de ambos volvieron a chocar.
- ¿Qué está pasando aquí?-
Preguntó repentinamente la novia de James desde la puerta del baño.
Claro que el momento se echó a perder.
- Nada- respondieron ambos al unísono cuando se separaron.
Obviamente la novia del de cabello rosa no iba evitar hacer un escándalo. Arruinando la noche para todos.
Bella no paraba de repetir unas palabras las cuales causaron un impacto que hizo replantearse muchas cosas a Tyler.
- ¡¿Qué hubiera pasado si no aparecía?!-
Rápidamente Amber y Tyler se fueron para no generar más tensión.
El pelinegro acompañó a su novia a su casa para asegurarse de que estuviera bien y aparte aclarar lo sucedido.
Al llegar a la casa de la pelirroja, esta se dispuso a hablar.
- Mira pecoso...-
Comenzó su oración con el apodo con el que solo lo llamaba James, al hacerlo ella le causó gran desagrado.
- No te juzgo.
Entiendo si eres mi novio solo para ocultar que estas enamorado de tu mejor amigo, pero al menos dime tus intenciones para no ilusionarme-
Soltó ella en seco.
Tyler no tenía palabra alguna para contestar.
Sentía como su pulso cardíaco aumentaba cada vez más.
¿Y si ella tenía razón?
Y otra vez comenzó a escuchar voces.
"Tiene arritmia" oyó que grito una mujer. Era de una voz que nunca había escuchado antes.
Ya estaba harto de vivir en la incertidumbre del porqué de las voces.
¿Era esquizofrénico?
¿Qué le estaba ocurriendo?

dreaming of angelsWhere stories live. Discover now