28. Y ahora.

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Llegamos a casa, en el coche me mantuve callado y Derek, respeto ese silencio, aunque de vez en cuando acariciaba mi mejilla, o me apretaba una mano.

Me sentía aturdido por tanta información. Y más sabiendo lo que había hecho mi madre.

Derek abrió la puerta de la mansión, yo iba detrás de el, me dejó pasar y cerro la puerta.

Me quedé mirándolo y me acerqué y me agarré a él sin querer soltarlo.

Como un niño empecé a llorar. Me costaba respirar.

Habia estado aguantando esas ganas de llorar todo el tiempo que estuvimos en casa de mis padres.

Pero ya no podía más, y me derrumbe. No podía con mis piernas, no quería pensar en nada, no quería pensar en todo lo que mi madr hizo y paso.

No quería ni podía asimilarlo por ahora.

-Ehhhh, tranquilo Sti, estoy aquí, no te soltaré, desahógate. Dios ojalá no tuvieras que pasar por esto.

- Gracias por estar conmigo, le dije llorando, no puedo.... con todo.... esto sólo.....
No se que hacer......, le dije acercándome más a el.

- Lo solucionaremos, y no estás sólo, todos estamos contigo.
Tú no eres tú madre, tú decides tú futuro y tú vida.
Ahora sabes más de lo que paso.

Necesitas descansar y luego ya pensaremos que hacer, pero tienes que dormir algo, por favor me pidió Derek preocupado.

Tienes razón,  tengo que descansar, intente ponerme de pie, pero mis piernas fallaban.

-Derek, no puedo con mis piernas, le dije empezando a ponerme nervioso.

- Vamos tranquilo, yo te subo, seguro que por toda la tensión que llevas acumulado, tranquilo estoy contigo.

Me cogió en brazos, y me subió a la habitación, yo pegaba la cabeza a su pecho, el escuchar su corazón me hacía sentir más calmado. Y me hacía dormirme.

- Me tumbo en la cama, y noté como me quitaba el calzado y empezaba a quitarme la ropa dejándome en ropa interior y poniéndome una camiseta suya. Y me tapaba con la sabana y una manta.

Luego entré sueños escuche algo de ruido, y noté como se metía en la cama  yo me di la vuelta y puse mi cabeza sobre su pecho.

- Gracias Der, ....te ....quiero.

- Te quiero pequeño.

Y me fui quedando dormido.

DEREK.

- Note cómo su pulso se fue relajando, sabiendo que se había quedado dormido.

Esta preocupado por todo lo que hoy tuvo que escuchar y enterarse.

Queria protegerlo de todo. Pero esto se escapaba de mis manos,  solo podía estar ahí para él en todo momento, igual que el lo hizo antes conmigo.

-Note cómo sonaba mi teléfono, lo había puesto en silencio, para no despertar a stiles.

-¿Si? Pregunte.

-Hola hijo, soy el sheriff, como esta Siles?.

- Se derrumbó al llegar a casa, pero lo tranquilicé, y se ha quedado dormido.
Dentro de un poco le daré algo para que cene.

- Gracias hijo, gracias por cuidarlo, llámame si pasa algo, por favor.

- No te preocupes, y tú descansa también. Mañana te llamo y ya te digo como pasó la noche y hablamos.

- Gracias hijo, gracias.

Esto era duro,  una familia se puede romper en un momento, los sueños se pueden esfumarse en un segundo.
Pero lo que tenia seguro era que esto no volvería a suceder, no dejaría que siles pasara por ello.

Unas horas después

- Me desperté, y noté que el lado de Derek, estaba vacío, no sabía que hora era, solo sabía que ya era de noche, se veía la luna casi llena por la ventana de la habitación.

Escuche ruido, de abajo, supongo que Derek estaba haciendo algo de cenar, y sabía que al escuchar mi corazón subiría.

Me quedé mirando por la ventana desde la cama. De repente noté como se hundía la cama un poco, y noté un beso en mi mejilla.

-¿Como estas?, ¿Estás más tranquilo?, me pregunto mirandome a los ojos.

- Si, gracias a ti, eres la mejor estufa y almohada del mundo. Le dije con cariño.

- Ven aquí tonto. Me acerco a él y me besó.
Era un beso lleno de cariño, y amor.

- ¿Tienes hambre?. Me pregunto.

- No mucho. La verdad, le dije.

- Bueno, he calentado un poco de chocolate y puedes tomar unas galletas con trozos de limón que tanto te gustan. Hazlo por mí y come algo., me miró con ojos de preocupación.

- Vale, vamos, a cenar algo, no quería verlo preocupado por mi.

-Bajamos, nos sentamos en el salón.  Derek fue a buscar las tazas y trajo el bote con las galletas de limón.
Me acerque a él y puso la televisión, para distraernos algo.

-Derek?..le llame.

- Dime, ¿ pasa algo?.

- No....no....tranquilo, estaba pensando,  no se si será buena idea celebrar mi cumpleaños, ahora mismo no me apetece nada, la verdad, pero no quiero defraudar a los chicos.
No se que hacer.

- ¿Quieres mi consejo?

-Si claro. Le dije.

- Celebralo, bueno no te quiero forzarte a nada.
Pero será algo sencillo y te ayudará a olvidarte un poco de todo esta locura.
Si quieres yo hablaré con los chicos si no te ves con ánimos de hacerlo y les contaré lo que tú quieras.

- No tranquilo prefiero decírselo yo. Mañana es miércoles, podemos quedar a la tarde aquí, y les contaré todo. Prefiero que lo sepan por mi.¿ te parece bien?.

- Desde luego que si.
Mañana les mandaré un mensaje para quedar aquí .

- ahhhh mañana no voy a ir a clase, quiero pensar en todo esto.
Además tengo que volver a hacer la dichosa prueba en el hospital.

- Y quiero hablar con mi tía Melinda  bueno Mel. Siempre me acuerdo de llamarla así. No sé  si seguirá queriendo que la llame así.  Tengo ganas de verla. La he añorado mucho.

Nos acabamos el chocolate y recogimos  las tazas, las dejamos en el fregadero., Subimos nos pegamos una ducha juntos, y me puse un pijama limpio, nos metimos en la cama.

Estuvimos hablando un poco de todo y viendo una película hasta que me quede dormido.

Esperaba que esta noche pudiera descansar....

QUE ME ESTA PASANDOWhere stories live. Discover now